Reportado en 2024: 164 practicantes de Falun Gong mueren en la persecución de su fe

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Ene. 13, 2025 | Por un corresponsal de Minghui

(Minghui.org) El Sr. Liu Dianyuan, residente de la ciudad de Chaoyang, provincia de Liaoning, fue sentenciado a 11,5 años en 2016 a la edad de 78 años por practicar Falun Gong. A pesar de su extremadamente precario estado de salud, la Primera Prisión de la ciudad de Shenyang lo aceptó. Su estado siguió empeorando y falleció en la prisión el 10 de febrero de 2024, día del Año Nuevo chino. Tenía 86 años.

La Sra. Zhou Guixiang, de 77 años y residente en la ciudad de Guiyang, provincia de Guizhou, estaba demacrada y se le detectaron tumores en el hígado y los intestinos mientras permanecía retenida en un centro de detención local. Su solicitud de libertad condicional seguía pendiente cuando falleció el 23 de octubre de 2024. Su cuerpo ya había sido incinerado sin el consentimiento de su familia cuando ésta acudió al centro de detención al recibir la noticia de su fallecimiento.

Los casos de los dos practicantes figuran entre las 164 nuevas muertes de practicantes de Falun Gong registradas en 2024, año en que se cumplió el 25 aniversario desde que el Partido Comunista Chino ordenó la campaña de erradicación de Falun Gong en 1999. Hasta el 31 de diciembre de 2024, se habían confirmado un total de 5.167 casos de muerte. Algunos de los practicantes fueron torturados hasta la muerte, mientras que otros fallecieron tras sufrir años de angustia mental o devastación económica. Debido a la estricta censura informativa y a los practicantes que fueron víctimas del delito de sustracción de órganos vivos, se cree que el número real de víctimas mortales es mucho mayor. La lista completa de las 164 muertes recién confirmadas en 2024 puede descargarse aquí (PDF).

Figura 1. Practicantes fallecidos en 2024

PARTE I. RESUMEN DE LOS NUEVOS CASOS DE FALLECIMIENTO NOTIFICADOS

Los 164 practicantes fallecidos, con edades comprendidas entre los 41 y los 91 años en el momento de su fallecimiento, procedían de todos los ámbitos de la vida, e incluían trabajadores de empresas automovilísticas, directores de empresas farmacéuticas, profesores, abogados, agricultores, propietarios de tiendas, contables y ex funcionarios del gobierno.

Un total de 149 de los practicantes fallecidos cumplieron condena en prisiones o campos de trabajo, o estuvieron retenidos en centros de lavado de cerebro u hospitales psiquiátricos antes de fallecer. Además de las dos muertes bajo custodia mencionadas, otros 15 practicantes también murieron mientras estaban retenidos en prisiones o centros de detención. Estas muertes bajo custodia estuvieron a menudo precedidas de brutales torturas físicas y tormentos mentales (debidos al lavado de cerebro intensivo destinado a obligar a los practicantes a renunciar a su fe), administración involuntaria de fármacos, afecciones médicas desarrolladas bajo custodia o retraso en la atención médica.

Otros practicantes soportaron décadas de acoso constante, vieron suspendidas sus pensiones o se vieron obligados a desplazarse para esconderse de la policía. A algunos les precedieron sus cónyuges, padres, hijos o hermanos, que también perdieron la vida a causa de la persecución.

1.1. Diecisiete mueren bajo custodia

De las diecisiete muertes bajo custodia registradas en 2024, cinco ocurrieron en centros de detención y los otros doce casos tuvieron lugar en prisiones.

La Prisión de Mujeres de la provincia de Heilongjiang notificó a la familia de la Sra. Guan Hongyan el 6 de noviembre de 2023 que ese día había muerto de «una enfermedad». Sin embargo, según fuentes internas, sucumbió a las heridas sufridas tras ser torturada repetidamente por los guardias y las reclusas. La muerte por tortura de la Sra. Guan, de 63 años y residente en la ciudad de Qitaihe, provincia de Heilongjiang, se produjo unos 16 meses después de cumplir siete años y medio de condena.

Semanas después del fallecimiento de la Sra. Guan, la Sra. Li Yuzhen, residente en Harbin (capital del Heilongjiang), murió en la misma prisión a principios de enero de 2024, mientras cumplía una condena de cuatro años.

Varios practicantes murieron sólo unos días después de ingresar en prisión.

La Sra. Xu Haihong, de la ciudad de Qingdao, provincia de Shandong, murió el 9 de diciembre de 2023, unos tres días después de ser trasladada a la Prisión de Mujeres de la provincia de Shandong para cumplir una sentencia de dieciséis meses. Tenía 56 años.

En la ciudad de Gongzhuling, provincia de Jilin, la Sra. Wang Yuying murió en el centro de detención local, un mes después de su arresto. Tenía 68 años. Las autoridades ofrecieron a su familia 30.000 yuanes a cambio de su silencio sobre su sospechosa muerte. Sus seres queridos consultaron a un abogado y les dijeron que nadie podía ayudarles a ganar un juicio, ya que la policía bloquearía todos los canales si intentaban reunir pruebas. Mientras tanto, su hermano de 80 años, que fue arrestado con ella el mismo día, se enfrenta a una acusación por compartir su fe.

1.2. Muertes en casa

Aunque algunos practicantes sobrevivieron a años de brutales torturas bajo custodia, fallecieron años después, incapaces de recuperarse de los daños físicos y/o psicológicos sufridos durante la detención. En algunos casos, las autoridades liberaron a los practicantes cuando estaban al borde de la muerte para eludir su responsabilidad, y los practicantes murieron poco después.

En los últimos 25 años, muchos otros practicantes también vivían con miedo cada día, pues nunca sabían si la policía llamaría a su puerta de repente en mitad de la noche o les detendría mientras estaban fuera. Para muchos, la angustia mental era mortal. Algunos eran tan frágiles que morían poco después de su última detención o episodio de acoso.

En los últimos años, algunos practicantes, que ya habían perdido su trabajo debido a la persecución, sufrieron un nuevo golpe cuando las autoridades les suspendieron la pensión. Lucharon contra la pobreza antes de acabar falleciendo.

1.2.1. Muertes por acoso o última detención

Mientras estaba en libertad condicional por su fe en Falun Gong, la Sra. Zhao Huifen, de la ciudad de Huaibei, provincia de Anhui, se enfrentó a un acoso y vigilancia continuos por parte de las autoridades, incluso después de que le diagnosticaran cáncer de esófago. Falleció el 21 de abril de 2024. Tenía 71 años.

Tras haber soportado siete años de tortura en prisión y la pérdida de casi todos sus dientes, el Sr. Wang Huai, de la ciudad de Zhangjiakou, provincia de Hebei, murió el 9 de marzo de 2024, dos días después de ser acosado de nuevo por las autoridades.

La Sra. Feng Yuqiu, profesora jubilada de enseñanza media en la ciudad de Shulan, provincia de Jilin, cumplió dos condenas en campos de trabajo y estuvo retenida en un centro de lavado de cerebro en dos ocasiones desde el inicio de la persecución en 1999. Sufrió incesantes torturas bajo custodia, que la traumatizaron profundamente y afectaron a su salud. Desde 2023, el estado de sus piernas y dedos de los pies, gravemente lesionados por la tortura, se deterioró rápidamente, lo que la incapacitó para caminar. También sufría problemas de visión. Se cayó y se rompió las piernas. Antes de recuperarse del todo, la policía la detuvo durante un arresto en grupo el 5 de junio de 2024 y la detuvo brevemente. Fue puesta en libertad bajo fianza, pero murió tres meses después, el 9 de octubre de 2024. Tenía 73 años.

Cinco agentes de policía irrumpieron en el domicilio de Chen Guohua en la ciudad de Dongying, provincia de Shandong, sobre las 6:30 horas del 29 de noviembre de 2023 y registraron su casa. Su familia dijo que esa mañana tenía cita con el médico y la policía los siguió hasta el hospital. Le diagnosticaron cáncer de hígado metastásico en fase avanzada, y sólo entonces desistió la policía de intentar detenerla. Aun así, amenazaron con volver a por ella cuando se recuperara. Su estado empeoró drásticamente tras la redada policial y murió el 11 de diciembre de 2023, a la edad de 54 años.

A pesar de que la presión arterial de Wang Qingxiang era peligrosamente alta, la policía la mantuvo bajo custodia tras arrestarla el 5 de septiembre de 2024. Finalmente liberaron a la residente de la ciudad de Yuanjiang, provincia de Hunan, el 16 de septiembre, cuando ese día sufrió un infarto fulminante. Falleció ocho días después, el 24 de septiembre. Tenía 60 años.

1.2.2. Muertes por administración involuntaria de fármacos bajo custodia

Cinco residentes de la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei, fueron arrestados en un domicilio particular el 16 de junio de 2022 por practicar Falun Gong. Dos de ellos, el Sr. Li Chunlian y el Sr. Chen Jun, fueron retenidos en un hospital psiquiátrico y sometidos a administración involuntaria de fármacos. Ambos experimentaron una importante pérdida de peso y una disminución de su claridad mental. El Sr. Li falleció repentinamente el 11 de noviembre de 2024. El Sr. Chen, que sufrió un infarto y al que se le instaló un stent tras su puesta en libertad bajo fianza, fue sentenciado a 7,5 años en torno a diciembre de 2024.

Poco después de que la Sra. Xie Changchun, de la ciudad de Guanghan, provincia de Sichuan, terminara de cumplir una sentencia de un año en la Prisión de Mujeres de la provincia de Sichuan, el 19 de abril de 2024, sintió un dolor agudo en el lado izquierdo del abdomen. Su piel se oscureció y quedó demacrada. Falleció cuatro meses después, el 12 de agosto, a los 80 años. Su familia sospechaba que le habían administrado drogas tóxicas durante su estancia en prisión.

1.2.3. Muertes tras décadas de persecución

La Sra. Chen Xuzhen, de la ciudad de Danjiangkou, provincia de Hubei, murió el 14 de marzo de 2024, un mes después de haber sido puesta en libertad en estado crítico tras cumplir un año de detención. Su fallecimiento puso fin a años de persecución por defender su fe en Falun Gong. Anteriormente fue arrestada en múltiples ocasiones y sufrió hostigamiento constante.

La Sra. Liu Shengzhi, su esposa y su hermana, todos ellos residentes en Beijing, soportaron décadas de encarcelamiento y tortura por practicar Falun Gong. El Sr. Liu recibió descargas eléctricas en sus partes íntimas y quedó incontinente. Luchó contra un edema sistémico durante años y falleció el 17 de julio de 2024, a la edad de 70 años. Su hermana, Liu Fengxia, tras cumplir dos condenas en campos de trabajo y una en prisión, murió en 2020. Su esposa, que fue golpeada casi hasta la muerte bajo custodia, oyó una vez a un guardia decir: «Somos la policía. Los superiores han dicho que no tenemos ninguna responsabilidad si te golpeamos hasta la muerte. Y nadie sabría si realmente has muerto».

Tras perder a su esposa y a su hijo en la persecución a Falun Gong, Su Anzhou, un hombre de 71 años de la ciudad de Lanzhou, provincia de Gansu, se enfrentó a un acoso constante y fue amenazado con una sentencia de prisión, incluso cuando ya estaba incapacitado. Falleció el 10 de enero de 2024.

El Sr. Su Anzhou (derecha), su difunta esposa y su hijo

1.2.4. Muertes por devastación económica y desplazamiento

El Sr. Ouyang Haiwen, de la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei, trabajaba en una fábrica de ropa militar. Fue despedido tras el inicio de la persecución por negarse a renunciar a Falun Gong. Fue sentenciado a cuatro años en 2011, por colocar carteles sobre la persecución en una zona pública. A partir de septiembre de 2020, la oficina de la seguridad social suspendió sus prestaciones mensuales de jubilación de 2.800 yuanes (después de que su familia hubiera cotizado 15 años por él) y le ordenó cotizar otros 130.000 yuanes antes de restablecer los pagos. Para mantenerse, tuvo que hacer trabajillos a pesar de su mal estado de salud. Sufrió una hemorragia interna y falleció en una residencia el 19 de abril de 2024. Tenía 70 años.

El difunto Sr. Ouyang Haiwen

Aunque la Sra. Huo Xiuqin, residente en la ciudad de Fuxin, provincia de Liaoning, sobrevivió a brutales torturas mientras estaba encarcelada por practicar Falun Gong, permaneció postrada en cama durante los 12 años siguientes. Su esposo dejó su trabajo para cuidar de ella. Vivían de la pensión mensual de 2.300 yuanes de la Sra. Huo y apenas llegaban a fin de mes. La indigente familia sufrió un duro golpe cuando las autoridades suspendieron repentinamente la pensión de la Sra. Huo a finales de 2022, con la excusa de que no tenía derecho a percibirla debido a su condena a prisión diez años antes. La salud de la mujer, de 63 años, se deterioró y falleció meses después.

Después de que la Sra. Cui Yajun, residente de 79 años en la ciudad de Jinzhou, provincia de Liaoning, se viera obligada a vivir fuera de casa para evitar ser encarcelada, las autoridades intensificaron la persecución suspendiéndole la pensión y ordenando también a sus hijos que trabajaran con ellos para recuperarla. No pudo regresar a casa ni siquiera después de desarrollar graves problemas de salud. Cuando por fin regresó a casa, en diciembre de 2024, ya se encontraba en estado crítico. Murió días después, a la edad de 83 años.

1.3. Desglose de casos por año de ocurrencia

Entre las 164 nuevas muertes documentadas, 58 tuvieron lugar entre 1999 y 2023 y los 104 casos restantes se produjeron en 2024, con una media mensual de 8. En enero de 2024 se produjo el mayor número de muertes (14), seguido de 12 en abril de 2024, y 11 en marzo, octubre y noviembre de 2024. El resto de los meses de 2024 tuvieron casos de un solo dígito. Debido a la estricta censura informativa, los casos de persecución no siempre pueden ser denunciados a tiempo, ni la información está fácilmente disponible.

1.4. Distribución por ubicación-año-género de las 164 nuevas muertes notificadas en 2024

Los 164 practicantes fallecidos, 106 de ellos mujeres, procedían de 20 provincias, 4 regiones autónomas y 4 municipios de administración central. Liaoning comunicó el mayor número de casos, 25, incluidos 16 ocurridos en 2024 y 9 en años anteriores. Heilongjiang ocupó el segundo lugar con 19 casos, incluidos 13 ocurridos en 2024 y 6 de años anteriores. Hebei ocupó el tercer lugar con 18 casos, incluidos 11 de 2024 y 7 de años anteriores. Tres regiones más tuvieron casos notificados de dos dígitos y los 22 lugares restantes tuvieron casos de un solo dígito, entre 1 y 8.

La figura 4 también muestra la distribución por sexos de las nuevas muertes notificadas en las distintas provincias.

1.5. 148 Practicantes fallecidos con edades conocidas

De los 164 nuevos casos notificados, se conocía la edad de 148 practicantes en el momento de su fallecimiento, de los cuales 130 tenían 60 años o más. Noventa y siete de los 148 practicantes eran mujeres, de las cuales 39 fallecieron antes de 2024 y 58 en 2024. Los 51 restantes eran hombres, 13 de los cuales fallecieron antes de 2023 y 38 en 2024.

El practicante más joven era el Sr. Zhou Hongyu, de 41 años, de la ciudad de Dengzhou, provincia de Henan. Fue víctima de abusos mientras cumplía una sentencia en la prisión de Zhengzhou. Sufrió edemas de forma intermitente tras ser puesto en libertad en mayo de 2023. Nunca se recuperó y falleció en enero de 2024. Le sobreviven su esposa, Sun Haihong, que también cumple condena por practicar Falun Gong, y su hija de 12 años.

La practicante de mayor edad era la Sra. Cui Xiangzhi, residente del condado de Tahe, provincia de Heilongjiang, de 91 años, que falleció en diciembre de 2019 tras soportar dos décadas de acoso y ser testigo de la persecución a sus hijos y sus cónyuges.

La segunda practicante de más edad, la Sra. Zhang Guiqing, del condado de Nanbu, provincia de Sichuan, falleció el 29 de octubre de 2021, cinco meses después de verse obligada a vivir fuera de casa para evitar el acoso. Tenía 88 años.

PARTE II. CASOS MÁS SELECTOS

2.1. Muertes bajo custodia

Durante su detención, los practicantes de Falun Gong que se negaban a renunciar a su fe se enfrentaban a brutales torturas físicas y a intensos lavados de cerebro destinados a transformarlos. Muchos fueron retenidos en un entorno aislado, vigilados por los reclusos las veinticuatro horas del día, privados de toda comunicación con sus familias y sin permiso para hablar con otros practicantes de Falun Gong encarcelados. Las lesiones físicas y la enorme presión mental fueron a menudo mortales.

Dada la política de erradicación de Jiang Zemin, el ex jefe del Partido Comunista Chino que ordenó la persecución en 1999: «Difamar su reputación [la de los practicantes de Falun Gong], arruinarlos económicamente y destruirlos físicamente», a la mayoría de las prisiones y centros de detención se les asignaron «cuotas de muerte», por las que los guardias no tendrían que rendir cuentas si torturaban a los practicantes de Falun Gong hasta la muerte, sino que recibirían recompensas cuando obligaran con éxito a los practicantes a renunciar a Falun Gong. Los reclusos también recibían incentivos, como reducciones de condena y otros privilegios, por su participación activa en la tortura de los practicantes.

2.1.1. Un hombre de 60 años muere bajo custodia, cinco días después de su ingreso en prisión

El Sr. Ren Changbin, residente de 60 años en la ciudad de Jiamusi, provincia de Heilongjiang, murió cinco días después de ingresar en la prisión de Shuangyashan para cumplir una sentencia de tres años. Su cuerpo presentaba múltiples contusiones y heridas, sus ojos tenían ojeras y su cabeza tenía varios puntos de sutura.

Sr. Ren Changbin

Según la hermana del Sr. Ren, recibió una llamada de la prisión sobre las 8 de la mañana del 28 de septiembre de 2024, comunicándole que el Sr. Ren había fallecido a causa de una urgencia médica. Exigió conocer la causa de la muerte, pero la persona que llamó se negó a proporcionar más información, salvo que el cuerpo del Sr. Ren había sido trasladado a una funeraria.

La hermana del Sr. Ren informó inmediatamente a otros miembros de la familia de la trágica noticia, y corrieron a la funeraria, donde vieron el cuerpo magullado del Sr. Ren.

Cuando la familia preguntó si su ser querido había sido torturado hasta la muerte, los guardias afirmaron que el Sr. Ren estaba muy débil cuando ingresó en la prisión, y dispusieron que dos reclusos «cuidaran» de él. También dijeron que Ren sufrió una caída mientras se duchaba, lo que le causó lesiones en la cabeza y el cuerpo.

La familia del Sr. Ren alegó que estaba muy sano cuando lo detuvieron y se preguntó cómo podía estar tan débil tras una semana de detención. Si la prisión había dispuesto que dos reclusos le «cuidaran», ¿por qué no evitaron que se cayera durante la ducha?

El Sr. Ren, exempleado de una fábrica de vidrio, fue arrestado durante una redada policial el 14 de septiembre de 2024 y sentenciado a tres años el 25 de julio de 2024. El 23 de septiembre fue trasladado a la Prisión de Shuangyashan, donde murió cinco días después.

2.1.2. Un hombre de 66 años muere mientras cumplía una condena de 11 años por demandar a un ex dictador del régimen comunista

El Sr. Yan Xuguang, de la ciudad de Chaoyang, provincia de Liaoning, murió el 16 de octubre de 2024, mientras cumplía una condena de 11 años por demandar a Jiang Zemin, ex jefe del régimen comunista chino que ordenó la persecución a Falun Gong. Tenía 66 años.

En mayo de 2015, la Procuraduría Popular Suprema y el Tribunal Popular Supremo de China anunciaron que aceptarían todos los casos que se les presentaran. Esto desencadenó una oleada de demandas penales de practicantes de Falun Gong de todo el mundo contra el papel decisivo de Jiang Zemin en el inicio de la persecución.

Se creó un grupo de trabajo en la ciudad de Chaoyang para perseguir a los practicantes de Falun Gong que demandaban a Jiang. Más de 300 practicantes fueron arrestados en Chaoyang el 9 de noviembre de 2015. El Sr. Yan fue apresado por la policía mientras conducía una motocicleta por la calle. La policía lo localizó rastreando su teléfono móvil.

Li Chao, director de la Oficina Municipal de Seguridad Pública de Chaoyang, ordenó a las Procuradurías y Tribunales locales que agilizaran el proceso de enjuiciamiento de los practicantes. El Sr. Yan, que era coordinador voluntario de los practicantes locales, fue considerado un objetivo clave.

En el Centro de Detención de la ciudad de Chaoyang, Yan contrajo una enfermedad infecciosa. A pesar de su grave estado, la policía se negó a liberarlo y lo trasladó a la División Médica del Centro de Detención Provincial de Liaoning. Controlaron estrictamente la información sobre su estado de salud y su paradero. Cuando su familia logró averiguar su situación e interrogó a la policía al respecto, ésta no les respondió directamente, sino que les preguntó cómo se habían enterado de su situación.

El Sr. Yan, retenido en la División Médica del Centro de Detención Provincial de Liaoning.

El Tribunal de Distrito de Shuangta celebró una audiencia sobre el caso del Sr. Yan el 19 de agosto de 2016. Su abogado se declaró inocente. Aunque el procurador Bao Lei, de la Procuraduría del distrito de Shuangta, no presentó ninguna prueba de que Yan hubiera infringido la ley, el presidente del Tribunal, Zhang Xiaohua, lo sentenció a 11 años de prisión. Posteriormente fue trasladado a la división para ancianos y enfermos de la Primera Prisión de Shenyang.

Cuando la familia de Yan lo visitó en octubre de 2023, seguía de buen humor. No volvieron a visitarlo en un año. (No está claro si no pudieron visitarlo ellos mismos o si la prisión denegó la visita a su familia). El 12 de octubre de 2024, de repente recibieron una llamada de la prisión, diciendo que el Sr. Yan estaba en estado crítico. Cuando acudieron al Décimo Hospital de Shenyang, ya estaba inconsciente.

La prisión aprobó la libertad condicional médica del Sr. Yan dos días después. Fue trasladado a Chaoyang en ambulancia e ingresado en el Hospital de Tuberculosis de Chaoyang. Falleció dos días después, el 16 de octubre.

2.1.3. Un hombre de Shandong muere en el hospital de la policía mientras cumplía una condena de ocho años

El Sr. Wang Zhongshi, residente en la ciudad de Zibo, provincia de Shandong, falleció el 22 de julio de 2024 mientras cumplía una sentencia de ocho años. Tenía 71 años.

El último arresto del Sr. Wang, el 11 de noviembre de 2020, se produjo poco más de un año después de que terminara de cumplir una sentencia de diez años por practicar Falun Gong. Su salud se resintió durante la primera condena, y sólo podía orinar en cuclillas. Antes de que pudiera recuperarse, fue arrestado de nuevo y sentenciado a otra larga condena en la misma prisión de la provincia de Shandong. Allí, los guardias siguieron torturándole obligándole a sentarse en un pequeño taburete todo el día sin moverse, lo que agravó aún más su ya dañada salud. No hacía ejercicio físico adecuado y se le privaba constantemente de sueño, al tiempo que se le obligaba a ver todos los días vídeos en los que se difamaba a Falun Gong. Finalmente sucumbió a la tortura y falleció en el hospital de la policía.

Entre los guardias que participaron en la tortura del Sr. Wang se encontraban el director de división Liang Jingda, el subdirector Chen Shuo y el instructor Zheng Jie. Cuando Liang dio órdenes de torturar a los practicantes, dijo a los guardias y a los reclusos: «No los traten [a los practicantes de Falun Gong] como seres humanos».

2.2. Muertes en casa

Aunque las muertes bajo custodia son el resultado más extremo de la persecución, la tortura física es sólo una parte de ella. Una mirada a los detalles de aquellos practicantes que murieron en sus casas proporciona una comprensión más completa del daño integral que sufrieron, que afectó a todos los aspectos de sus vidas cotidianas, y a menudo a las vidas de sus familias, todos los días.

2.2.1. Muertes poco después de la puesta en libertad debidas a malos tratos físicos o a afecciones médicas desarrolladas durante la detención

2.2.1.1. Una anciana de Guangdong muere semanas después de ser puesta en libertad en estado crítico (Foto gráfica en el artículo enlazado)

La Sra. Yao Jingjiao, de la ciudad de Jieyang, provincia de Guangdong, murió el 20 de noviembre de 2024, apenas unas semanas después de ser puesta en libertad condicional en estado crítico. Le faltaba sólo un mes para cumplir 85 años.

La Sra. Yao fue devuelta a su ciudad natal en ambulancia el 25 de octubre de 2024, tras enfermar gravemente mientras cumplía una sentencia de tres años en la Prisión de Mujeres de la provincia de Guangdong.

En sus últimas semanas, Yao sufrió el acoso frecuente de las autoridades. Incluso ocho días antes de su fallecimiento, se ordenó a su familia que le tomara una foto para presentarla a las autoridades y comprobar si estaba lo suficientemente bien como para volver a ingresar en prisión.

La sentencia injusta de la Sra. Yao se derivó de su arresto inicial el 14 de junio de 2020. Fue puesta en libertad bajo fianza al día siguiente. Tras ser sentenciada a tres años en noviembre de 2022, permaneció en libertad bajo fianza hasta el 5 de mayo de 2023, cuando la policía la llevó a un reconocimiento médico. Tenía la presión arterial alta, pero aun así la policía la llevó al Centro de Detención del distrito de Jiedong, donde permaneció retenida hasta que fue trasladada a la Prisión de Mujeres de la provincia de Guangdong a principios de julio de 2023. Debido a su persistente hipertensión y al deterioro de su salud, la prisión la ingresó en su propio hospital el día de su ingreso.

Cuando la Sra. Yao se rompió la pierna derecha el 9 de septiembre de 2024, la prisión no notificó a su familia su estado hasta mediados de septiembre. Se dijo a sus seres queridos que fueran a la prisión a firmar un consentimiento para que pudieran operarla. Fueron, pero no se les permitió verla. Después de firmar el formulario, la prisión dijo que la operación tenía que cancelarse debido al débil estado físico de la Sra. Yao.

La prisión volvió a llamar a la familia a mediados de octubre de 2024 y les pidió que solicitaran la aprobación de la Oficina 610 de la ciudad de Jieyang para que la Sra. Yao fuera puesta en libertad condicional. Su familia se puso manos a la obra, pero la Oficina 610 tardó una semana en aprobar la solicitud. Sin embargo, la prisión no liberó inmediatamente a la Sra. Yao. Extorsionaron a su familia con un total de 30.000 yuanes en tres ocasiones antes de acceder finalmente a ponerla en libertad condicional.

A primera hora del 25 de octubre de 2024, la prisión dispuso que una ambulancia llevara a la Sra. Yao al Hospital de Medicina China de la ciudad de Jieyang. Sus familiares, que esperaban en la entrada del hospital, se sorprendieron al ver que sacaban de la ambulancia a una Sra. Yao casi irreconocible. Estaba casi en estado vegetativo, con la boca abierta. Podía mover los ojos, pero no podía hablar.

Yao Jingjiao antes de su último encarcelamiento.

La Sra. Yao Jingjiao en libertad condicional.

El guardia que la escoltaba dijo que su pierna derecha aún no se había curado y que tenía múltiples fallos orgánicos. Anunció que la prisión la entregaba formalmente a su familia y les ordenó que firmaran un documento en el que eximían a la prisión de toda responsabilidad en caso de que le ocurriera algo a la Sra. Yao. Cuando se negaron a firmar, el guardia amenazó con devolverla a la prisión, así que cedieron y firmaron. Después la llevaron rápidamente al hospital.

Tras varios días en la UCI, Yao seguía sin mostrar signos de mejoría. La tarde del 4 de noviembre de 2024 no podía comer y su respiración era muy superficial. Los responsables del hospital no querían que muriera bajo su cuidado y le dieron el alta ese mismo día.

La Sra. Yao recuperó la lucidez mental tras volver a casa, gracias a los meticulosos cuidados de su familia. Sin embargo, se atragantaba con la comida y el agua porque tenía dificultades para tragar, lo que la dejaba sedienta y hambrienta, y empeoraba su estado. No está claro por qué su familia no pudo ponerle una vía intravenosa o una sonda de alimentación.

A pesar de su estado, la Oficina 610 dio instrucciones a los funcionarios del pueblo para que la acosaran en su casa y le tomaran fotos. Llamaron a su familia el 12 de noviembre y les ordenaron que le tomaran una foto para entregarla a las autoridades. Murió ocho días después.

2.2.1.2. Torturada por defender su fe, una exmédica internista muere días después de ser liberada

La Sra. Liu Dongxian, médico jefe de medicina interna en la ciudad de Changde, provincia de Hunan, soportó implacables torturas cuando cumplía una sentencia de nueve años. Murió en mayo de 2024, pocos días después de ser puesta en libertad. Tenía 72 años.

La Sra. Liu fue perseguida repetidamente por no renunciar a su fe desde que comenzó la persecución en julio de 1999. Cumplió una sentencia de un año y nueve meses en un campo de trabajo y tres condenas de prisión, por un total de 16 años. Las autoridades vigilaban su teléfono y su vida cotidiana, y a menudo se daba cuenta de que la seguían cuando salía. El hospital donde trabajaba la degradó de su puesto de médico y la obligó a realizar tareas diversas en un almacén de medicamentos. Le suspendieron el sueldo y las primas, y sólo cobraba 300 yuanes al mes para cubrir los gastos de subsistencia más básicos.

El arresto de la Sra. Liu tuvo lugar en diciembre de 2016. Fue sentenciada a nueve años el 13 de marzo de 2018. En la Prisión de Mujeres de la provincia de Hunan la obligaban a permanecer inmóvil durante largas horas y solo le permitían mover los brazos para comer o beber. Tenía que presentarse y obtener permiso del jefe de reclusas antes de poder ir al baño. También le limitaban el tiempo para ducharse.

Ilustración de tortura: De pie mientras está inmovilizada

Debido a su afección cardiaca y a su hipertensión, la Sra. Liu fue puesta en libertad en mayo de 2024, 19 meses antes de que expirara su condena. Murió pocos días después.

2.2.1.3. Un hombre de Jilin muere 21 días después de ser liberado bajo fianza, amenazado póstumamente con una sentencia de 3 años de prisión

El Sr. Tian Yuchun, de la ciudad de Changchun, provincia de Jilin, murió 21 días después de ser puesto en libertad bajo fianza en estado crítico. El Tribunal del distrito de Chaoyang amenazó con condenarle a tres años de prisión incluso después de que falleciera el 24 de julio de 2024. Le faltaba un mes para cumplir 75 años.

El Sr. Tian fue arrestado en su domicilio el 18 de abril de 2024. Los agentes que lo arrestaron dijeron que lo habían hecho porque sus supervisores les habían ordenado cumplir una cuota y arrestar a un determinado número de practicantes de Falun Gong antes del 1 de mayo (Día del Trabajo en China).

La policía prometió liberar al Sr. Tian tras interrogarlo, para llevarlo al centro de detención al día siguiente. Durante el examen físico exigido, le detectaron hipertensión, síntomas de apoplejía y desprendimiento de retina. Según la ley, no era apto para ser detenido, pero aun así el centro de detención lo admitió.

La familia del Sr. Tian apeló al centro de detención, sin resultado. Entonces recurrieron a la asociación local de personas con discapacidad, pero se negaron a ayudarles. La familia contrató a un abogado, pero el centro de detención dijo que el Sr. Tian era un «preso político» y que no se le permitían visitas (ni familiares ni abogados).

El centro de detención amenazó incluso con retirar la licencia al abogado si se atrevía a seguir representando al Sr. Tian. El 20 de junio de 2024, un guardia notificó a la familia del Sr. Tian que ese día vomitó, perdió el conocimiento y le diagnosticaron una obstrucción intestinal. Su familia pidió visitarlo, pero se lo denegaron. Cuando el centro de detención se enteró de que el Sr. Tian también tenía cáncer de vías biliares ocho días después, informaron a su familia para que solicitara su libertad bajo fianza.

Tardaron varios días en tramitar toda la documentación necesaria, y cuando el Sr. Tian quedó en libertad bajo fianza, el 3 de julio de 2024, estaba tan débil que no podía caminar sin ayuda. Más tarde contó a su familia que le habían obligado a sentarse en una tabla sin moverse todos los días en el centro de detención. En menos de una semana, le sangraron las nalgas y se le formó una gruesa capa de callos.

También dijo que el deterioro de su salud comenzó mucho antes del 20 de junio, cuando el centro de detención llamó a su familia. Dijo que lo llevaron al hospital del centro de detención en mayo de 2024 y lo inmovilizaron en una cama con las manos esposadas y los pies encadenados durante todo el día. Los guardias sólo le permitían llevar ropa interior y unos pantalones finos. No le dieron nada de comer. Tres guardias le vigilaban y se negaban a decir qué inyecciones le ponían cada día.

En mayo aún hacía frío en Jilin. Con la parte superior del cuerpo desnuda, el Sr. Tian imploró a los guardias y a las enfermeras que le permitieran ponerse la camisa. Todos le ignoraron.

Murió 21 días después de que le dieran el alta.

2.2.2. Tragedias familiares

2.2.2.1. El hijo muere en 2018 tras sufrir una enfermedad mental en prisión, la madre fallece en 2024 después de que la policía la acosara por buscar justicia para él

La Sra. Liu Xiufen, del distrito de Jinghai, Tianjin, falleció el 10 de abril de 2024, no mucho después de que la policía local la acosara en su casa y le exigiera saber si seguía practicando Falun Gong, y si tenía intención de seguir buscando justicia para su difunto hijo, que murió en 2018 tras verse abocado a una enfermedad mental durante su condena de cinco años en prisión.

El Sr. Ren Dongsheng y su esposa Zhang Liqin

El Sr. Ren después de que se volviera psicótico durante su detención

El hijo de Liu, Ren Dongsheng, fue arrestado el 8 de marzo de 2006 y sentenciado a cinco años de prisión en la cárcel de Binhai. Fue brutalmente torturado y también le suministraron drogas desconocidas. La prisión revocó las visitas de su familia durante los últimos ocho meses de su condena. Ante la protesta de Liu, la prisión le mostró un vídeo de su hijo, en el que aparecía agitado y con un comportamiento anormal. Estaba previsto que saliera en libertad el 7 de marzo de 2011, pero ese día lo llevaron directamente a un centro de lavado de cerebro y lo retuvieron una semana más. Cuando la Sra. Liu fue a recogerlo, se sintió conmocionada y desconsolada al ver a un hombre psicótico.

El mundo de la Sra. Liu se derrumbó. En aquel momento, su nuera, Zhang Liqin, seguía cumpliendo una sentencia de siete años por practicar Falun Gong.

El Sr. Ren permaneció psicótico en sus últimos años. Sufría alucinaciones la mayor parte del tiempo. Cuando había tormenta, se quedaba gritando bajo la lluvia. También se escapaba muchas veces en mitad de la noche y no volvía en varios días. Cuando volvía, estaba sucio y agitado.

Cuando alguien mencionaba de pasada a la policía, parecía aterrorizado y murmuraba para sí: «Tengo que huir, si no me atraparán». Entonces huía de su casa y se quedaba fuera durante unos días. También se despertaba a menudo de pesadillas y gritaba: «¡No les tengo miedo!».

En los raros momentos en que estaba mentalmente alerta, el Sr. Ren decía: «Los guardias de la prisión y los reclusos amenazaban con golpearme hasta la muerte si no renunciaba a mi fe».

Después de que la Sra. Zhang fuera puesta en libertad el 11 de febrero de 2016, ella y la Sr. Liu trabajaron juntas y lograron identificar a los ocho guardias de la prisión que fueron los principales responsables de torturar y drogar al Sr. Ren, lo que provocó su colapso mental.

Presentaron denuncias contra los represores ante diversos organismos gubernamentales, pero sin éxito. La Sra. Zhang fue incluso detenida durante 35 días por sus esfuerzos. En 2017, la Sra. Liu presentó sus denuncias ante el Primer Tribunal Intermedio de Tianjin y el Tribunal Superior de Tianjin, pero su caso fue desestimado alegando que había prescrito el plazo de dos años.

El Sr. Ren falleció a las 2 de la madrugada del 12 de septiembre de 2018. Incluso después de su fallecimiento, las autoridades locales siguieron acosando a las Sras. Zhang y Liu.

El repetido acoso hizo mella en la salud de la Sra. Liu, que quedó postrada en cama. Pero la policía no la perdonó. Un día irrumpieron en su casa y exigieron hablar con ella. Murió poco después, el 10 de abril de 2024.

2.2.2.2.La persecución a Falun Gong se cobra la vida de un matrimonio separado durante seis años; el marido fue baleado por la policía y encarcelado durante 14 años

El Sr. Jiang Honglu, un hombre de 66 años de la ciudad de Mishan, provincia de Heilongjiang, murió en un centro de ancianos el 27 de enero de 2024, dos semanas antes del Año Nuevo chino. Su muerte se produjo seis años después de que su esposa, la Sra. Yuan Shuzhi, falleciera el 4 de abril de 2018, a la edad de 60 años.

El Sr. Jiang, que solía trabajar en la Administración de Carreteras de la ciudad de Mishan, fue sentenciado a un año y tres meses de trabajo forzado en diciembre de 1999. Cuando habló con la gente sobre Falun Gong en 2002, un oficial lo persiguió, le disparó en la pierna y le pateó la cabeza. Posteriormente fue sentenciado a 14 años de prisión, y quedó paralítico de ambas piernas como consecuencia de las torturas sufridas en prisión. Era incapaz de hablar con coherencia, tenía mala memoria y padecía una afección de próstata. En sus últimos años, necesitó una sonda de alimentación nasal.

Su esposa, la Sra. Yuan, también fue arrestada y torturada en repetidas ocasiones. La presión mental de la persecución hizo mella en su salud. Desarrolló diabetes y sufrió una grave hinchazón en las piernas, que finalmente provocó la amputación de ambas piernas. Su estado siguió deteriorándose tras la operación y falleció el 4 de abril de 2018, poco después de cumplir 60 años.

El hijo de la pareja, de unos 39 años, quedó traumatizado por la persecución a sus padres a lo largo de los años. Se volvió retraído y se negaba a socializar. Permanecía en su habitación la mayor parte del tiempo.

2.2.3. Muertes tras dos décadas de persecución

2.2.3.1. Mujer de Shandong muere tras décadas de acoso, desplazamiento y sufrimiento por la administración involuntaria de medicamentos

La Sra. Wang Shuhua y su esposo, el Sr. Zhou Chuanzhong, de la ciudad de Taian, provincia de Shandong, se vieron obligados a vivir fuera de casa a principios de marzo de 2000 para evitar el frecuente acoso policial. Sin embargo, la policía siempre conseguía encontrarlos poco después de que se mudaran cada vez. Para ocultarse de la policía, vivieron en varias provincias, entre ellas Hubei, Shanxi y Hebei.

Tras un arresto en 2006, la Sra. Wang recibió inyecciones tóxicas, y después sufrió convulsiones y náuseas constantes. Su estado empeoró repentinamente en 2013 y quedó completamente incapacitada. Después de luchar durante otra década de sufrimiento físico, mientras soportaba la angustia mental de la persecución en curso de Falun Gong, especialmente presenciando el arresto y sentencia de su esposo, falleció el 14 de agosto de 2024, a los 68 años.

Como la oficina local de seguridad social había suspendido la pensión de la pareja, y su hijo no trabajaba debido a las heridas de un accidente automovilístico, la familia sólo tenía 500 yuanes en efectivo, y ni siquiera podía permitirse pagar el funeral de la Sra. Wang. Un pariente se enteró de su situación y les prestó 10.000 yuanes. Sólo entonces la familia incineró el cuerpo de la Sra. Wang para que pudiera descansar en paz.

2.2.3.2. Una arquitecta de Guangdong muere a los 60 años tras repetidos acosos policiales por su fe en Falun Gong

La Sra. Chen Yanping, una residente de 60 años de la ciudad de Guangzhou, provincia de Guangdong, murió el 23 de mayo de 2024, después de años de ser acosada por la policía por su fe en Falun Gong.

Sra. Chen Yanping

La Sra. Chen, propietaria de una empresa de arquitectura, atribuyó a Falun Gong el haber mantenido bajo control su quiste hepático congénito (sacos llenos de líquido en el hígado). Sin embargo, tuvo una recaída en su enfermedad y desarrolló otros síntomas tras el repetido acoso policial por su fe. Nunca se recuperó y falleció.

Tras el inicio de la persecución a Falun Gong en 1999, la policía prohibió a Chen viajar al extranjero, y ni siquiera le permitió visitar la cercana Hong Kong. La vigilaban estrechamente. En varias ocasiones, cuando estaba a punto de subir a un avión para viajar a su país, la policía la llamó para preguntarle adónde se dirigía. Para evitar más acoso, a menudo recorría largas distancias en auto (en lugar de volar) cuando tenía que viajar.

El acoso a la Sra. Chen se intensificó en 2023, después de que la policía local descubriera que había publicado un artículo escrito por el fundador de Falun Gong en WeChat (una popular plataforma de medios sociales en China). La policía se presentó en su domicilio y, en contra de su voluntad, comprobó su teléfono móvil y sus publicaciones en WeChat. La interrogaron en su casa y confiscaron un retrato del fundador de Falun Gong, junto con obras de arte con mensajes de Falun Gong.

La policía llamó a la puerta de Chen un día de finales de noviembre de 2023. Al no responder nadie, llamaron a la puerta de su vecina y le preguntaron si estaba en casa y con quién vivía. La Sra. Chen salió de su edificio de apartamentos poco después de las 20:00 horas de esa noche para recoger algo de su coche. De camino al garaje se encontró con cuatro policías. No se dieron cuenta enseguida de que era la Sra. Chen, pero ella sabía que iban a por ella. En lugar de volver a su apartamento, se marchó inmediatamente. No llevaba teléfono ni dinero. Consiguió encontrar un lugar temporal donde instalarse y vivió fuera de casa durante un tiempo para evitar que la arrestaran.

A partir de febrero de 2024, la Sra. Chen empezó a experimentar dificultades para caminar, con hinchazón en los pies, tras la recaída de su quiste hepático. La hinchazón se extendió gradualmente a las piernas. Su peso se disparó y su cintura aumentó. El aumento del peso abdominal comprimió las venas de la parte inferior de sus piernas y obstruyó el flujo de sangre venosa, lo que empeoró el edema de sus piernas. Al mismo tiempo, el vientre le oprimía el diafragma y el corazón, que empezó a latir intensamente. Su estómago también estaba comprimido y perdió el apetito.

A pesar de comer muy poco, Chen engordó casi 18 kilos en tres meses. Se sentía incómoda en cualquier posición, de pie, sentada o acostada.

La Sra. Chen llamó a alguien con Facetime el 4 de abril de 2024, y pronto aparecieron dos agentes. Le ordenaron que dejara de usar Facetime y borraron por la fuerza la aplicación de su teléfono.

La Sra. Chen fue hospitalizada más tarde. Dijo muchas veces a su familia y al personal médico que si no la hubieran obligado a vivir fuera de casa en noviembre de 2023, su salud no habría empeorado tan rápidamente. A pesar de su sufrimiento, se mantuvo tranquila y alegre. Incluso regaló a sus enfermeras una cesta de flores y otra de fruta el 12 de mayo, Día de la Enfermera. No está claro si murió en el hospital o en casa el 23 de mayo.

2.2.3.3. Muere un querido médico de unos 50 años tras años de persecución por practicar Falun Dafa

El Dr. Dong Wencheng, un querido médico de la ciudad de Harbin, provincia de Heilongjiang, murió el 24 de noviembre de 2024, tras sufrir años de persecución por su fe en Falun Gong.

El Sr. Dong, de unos 50 años, dirigía su propia clínica y a menudo cobraba honorarios bajos o no cobraba a pacientes con dificultades económicas. Su generosidad, sus excepcionales dotes médicas y su simpatía le granjearon el respeto y atrajeron a pacientes de todas partes. Al enterarse de su muerte, muchos de sus pacientes derramaron lágrimas y se preguntaron si volverían a encontrar un médico tan bueno.

El Dr. Dong fue arrestado por primera vez el 3 de diciembre de 2001 y llevado a un centro de lavado de cerebro. Antes de ponerle en libertad en fecha desconocida, la policía le obligó a pagar 2.000 yuanes y a entregar las escrituras de sus tres residencias.

Tras un viaje a Beijing para hacer una apelación en favor de Falun Gong en 2002, el Dr. Dong fue arrestado y retenido en unos seis Centros de Detención diferentes de Beijing. Posteriormente fue escoltado de vuelta a Harbin y retenido en el centro de detención del distrito de Shuangcheng. Inició una huelga de hambre en señal de protesta y fue alimentado a la fuerza. Fue liberado cuando cayó en estado crítico. Poco después de regresar a casa, tuvo que esconderse para evitar el frecuente acoso de los funcionarios locales del pueblo.

El Dr. Dong volvió a Beijing el 16 de abril de 2002 para hacer una apelación en favor de Falun Gong. Fue detenido y se lesionó una pierna tras sufrir una caída. Más tarde fue trasladado de nuevo a Heilongjiang y retenido de nuevo en el mismo centro de detención del distrito de Shuangcheng. Su estado siguió empeorando y los guardias lo pusieron en libertad.

Tras otro arresto en fecha desconocida, el Dr. Dong fue sentenciado a dos años de trabajo forzado en el Campo de Trabajo de Changlinzi. Los guardias lo sometieron a diversas formas de maltrato, como palizas, colgarlo boca abajo (véase la imagen de abajo), descargas eléctricas y verterle agua fría. En un momento dado sufrió una conmoción cerebral y desarrolló un trastorno mental tras las repetidas palizas.

Ilustración de tortura: Colgado boca abajo

El Dr. Dong fue arrestado en otra ocasión, el 6 de mayo de 2016, mientras compraba en un supermercado. Tras ser puesto en libertad, siguió sometido a vigilancia y acoso constantes por su fe. La presión mental hizo mella en su salud, y murió el 24 de noviembre de 2024.

2.2.3.4. Después de más de 13 años tras las rejas, un hombre de Beijing muere 4 meses después de completar su tercera pena de prisión por practicar Falun Dafa

El Sr. Pang You, residente en Beijing, estaba irreconocible cuando fue puesto en libertad el 26 de noviembre de 2023, tras cumplir una sentencia de un año y tres meses por practicar Falun Gong. Sufría pérdida de proteínas séricas del tubo digestivo y sudoración excesiva. Estaba extremadamente débil y le costaba caminar.

El difunto Sr. Pang You con su esposa y su hijo

Las autoridades locales siguieron vigilando al Sr. Pang, exdirector de la oficina de urbanismo y gerente de una empresa inmobiliaria, incluso después de que regresara a casa. La policía le acosaba de vez en cuando y dispuso que le vigilaran de cerca durante las «Dos Sesiones» de marzo de 2024, de una semana de duración.

Las «Dos Sesiones» son las reuniones anuales del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPC) y de la Asamblea Popular Nacional (APN). Este año, la CCPPC comenzó el 4 de marzo y la APN un día después. Ambas concluyeron el 11 de marzo. El régimen comunista es conocido por intensificar su persecución de los practicantes de Falun Gong en fechas sensibles, como las «dos sesiones».

El estado del Sr. Pang se deterioró rápidamente, y murió el 9 de abril de 2024. Tenía 61 años. Su fallecimiento puso fin a décadas de sufrimiento a manos del régimen comunista.

El Sr. Pang fue sentenciado por primera vez a ocho años tras su arresto el 27 de septiembre de 2000. Menos de un año después de ser liberado en 2008, fue arrestado de nuevo el 3 de agosto de ese año y sentenciado a cuatro años. Su tercera condena se derivó de su arresto el 2 de mayo de 2022. Aunque quedó en libertad bajo fianza al día siguiente, volvió a ser detenido el 28 de julio de 2022. Su salud empeoró durante la detención y fue enviado al Hospital de la Policía de Beijing dos meses después. Asistió a una vista virtual en su habitación del hospital el 3 de julio de 2023 y fue sentenciado a un año y tres meses poco después.

La salud del Sr. Pang siguió empeorando durante su detención. Sufrió insuficiencia cardiaca y renal, así como un grave edema por debajo de los huesos de la cadera. En un momento dado, tenía todo el cuerpo hinchado por debajo del pecho. También sufría complicaciones diabéticas, con dos llagas abiertas en los pies que supuraban pus. Le costaba mantenerse en pie, y cuando su abogado fue a verle lo sacaron en silla de ruedas. A pesar de su estado, las autoridades se negaron a concederle la libertad condicional.

2.2.3.5. Mujer de Liaoning enloquece tras un año de detención y muere siete años después

La Sra. Xing Anmei, de la ciudad de Shenyang, provincia de Liaoning, sufrió un colapso mental debido a la tortura y a la administración involuntaria de fármacos mientras cumplía condena por su fe, Falun Gong. Su salud se deterioró durante los siete años siguientes y falleció el 22 de febrero de 2024. Tenía 67 años.

Xing Anmei y su familia

La última detención de la Sra. Xing se produjo el 14 de abril de 2016, cuando desayunaba con su esposo y sus dos hijos en un restaurante local. La policía reveló que la familia estaba en el punto de mira porque presentaron una denuncia penal contra el exdictador chino Jiang Zemin por iniciar la persecución a Falun Gong que dio lugar a sus anteriores detenciones.

El hijo de la pareja fue puesto en libertad un mes después. A su hermana se le concedió la libertad bajo fianza y fue puesta bajo arresto domiciliario el mismo día. La joven declaró que su hermano cojeaba y parecía aturdido cuando ambos regresaron a casa. Le dijo que la policía le había pegado. Durante un tiempo no se atrevió a salir de casa.

La Sra. Xing fue sentenciada a un año y multada con 5.000 yuanes el 23 de febrero de 2017. Cuatro días después, su hija fue sentenciada a un año de libertad condicional y a pagar una multa de 2.000 yuanes. Su esposo fue condenado a dos años y medio y multado con 10.000 yuanes.

En el Centro de Detención de la ciudad de Shenyang, la Sra. Xing estuvo retenida en régimen de aislamiento, fue torturada y alimentada a la fuerza con drogas tóxicas de forma regular. Le rompieron los dientes mientras la golpeaban. Como consecuencia, tenía problemas para tragar y sufría mareos, fatiga, palpitaciones y náuseas. A pesar de su estado, los guardias la engrilletaron y le encadenaron la mano izquierda a una argolla del suelo. No la desencadenaban ni siquiera cuando necesitaba ir al baño. En otra ocasión, dos reclusas se sentaron sobre sus piernas mientras otras dos le retorcían los brazos a la espalda, lesionándole gravemente el hombro y el brazo izquierdos.

Cuando la liberaron el 14 de abril de 2017, Xing ya no era la misma. Estaba muy asustada y no reconocía a su familia, ni siquiera a sus propios hijos. Corría de un lado a otro día y noche, gritaba, golpeaba a la gente y tiraba cosas por una ventana superior. De vez en cuando, decía: «A los practicantes de Falun Gong les daban drogas a la fuerza todos los días». Después de luchar contra su mala salud durante siete años, murió el 22 de febrero de 2024.

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