Por qué la de los humanos es una sociedad de perplejidad

Los cuerpos celestiales son tan vastos que ninguno de los dioses, reyes y señores conocen lo que hay más allá, y el número de vidas es tal que es incalculable. Sin embargo, todas las vidas en los cuerpos celestiales, en los niveles donde existen, compuestos de su propia materia, ven el mundo donde existen de manera integral —de la misma manera que los dioses ven el mundo— solo que no tienen la sabiduría y la capacidad de los dioses. En otras palabras, las vidas en los universos de los cuerpos celestiales no se encuentran en el mismo estado que los seres humanos, quienes no pueden ver la verdad del mundo en el que ellas mismas existen, no pueden ver la existencia de otras formas de vida en el ambiente donde ellas mismas existen y no pueden ver la verdadera manifestación de la materia en el propio ambiente donde existen. Por lo tanto, la forma en que la gente piensa y entiende el mundo es única e incompetente. Esta es una sociedad de “perplejidad” (a excepción de las deidades originales y de las manifestaciones del mundo de la cultivación en los Tres Reinos).

Entonces, ¿por qué es así? Es porque los cuerpos celestiales y los numerosos sistemas cósmicos dentro de los cuerpos celestiales han llegado al paso final de "destrucción" en la norma y regla del ciclo de formación, asentamiento, degeneración y destrucción. En esa desintegración de la terrible destrucción final, todo será completamente aniquilado, desaparecerá. Por lo tanto, el Creador ha decidido salvar a las multitudes de vidas.

Los universos de los cuerpos celestiales han llegado a esta etapa de destrucción porque los cuerpos celestiales y sus numerosos universos y las innumerables  multitudes de vidas, incluso las multitudes de señores, reyes y dioses en cada universo, en este largo tiempo de formación, asentamiento, degeneración y destrucción, han cambiado hasta que ya no son como al principio de su formación; es decir, ya no cumplen con el estándar del propio nivel donde se encuentran. Esta es la regla y norma inevitable en el ciclo de las vidas.

Para salvar a las multitudes de vidas, el Creador creó un mundo fuera de los cuerpos celestiales, usándolo para salvar a innumerables multitudes de vidas dentro de los cuerpos celestiales, y llamándolo "Tres Reinos". En los Tres Reinos, existen tres niveles donde existen vidas. Las vidas en el nivel más bajo existen en el ambiente más perplejo y más sufrido y carecen totalmente de capacidad y sabiduría. Esta es la sociedad humana. Sin embargo, en el segundo nivel, la sabiduría de la gente y de las multitudes de seres, es solo más alta que la del nivel de los seres humanos, por eso solo pueden ver el estado de los seres humanos y de su propio reino. Los seres humanos los llaman seres celestiales. Y en el nivel más alto, se pueden ver los estados de existencia de las vidas de los dos reinos inferiores y los estados de su propio reino. La sabiduría también es la más elevada entre los Tres Reinos. Los seres humanos los llaman colectivamente seres celestiales. Pero, todas las multitudes de vidas en los Tres Reinos son incapaces de ver los verdaderos universos y los mundos celestiales donde están los dioses en el Cielo. 

Por tanto, los seres humanos existen en una “perplejidad” con una sabiduría mínima y no pueden ver la esencia de las cosas. Esta es una creación del Creador para la salvación de las multitudes de vidas antes de la destrucción en el final del tiempo. También es para que las multitudes de seres puedan salir del mundo sufrido y sin claridad a través de la bondad de la naturaleza humana. Es difícil, muy difícil; en el final de la formación, asentamiento, degeneración y destrucción, las vidas que deben ser destruidas sólo pueden salir a través del sufrimiento y disolviendo el yeli, y al mismo tiempo siendo capaces de salvaguardar su naturaleza bondadosa original, entonces podrán ser reconocidos por el “futuro”. Cuando llegó el momento final, el Creador asintió que las multitudes de dioses, reyes y señores en los cuerpos celestiales y los dioses aún mayores y grandes que gobiernan vastas áreas de los cuerpos celestiales, se reencarnaran en humanos, y sellando toda su sabiduría y capacidades, enclaustrados en el cuerpo humano que es lo mas sufrido, mas incapacitado, sin sabiduría, sufriendo tribulaciones y disolviendo yeli. Y, en medio del sufrimiento, con pensamientos rectos, salvaguardando su naturaleza bondadosa original, solo así, pueden ser tomados en serio por el Creador y los dioses, y ser reconocidos por el futuro. Aquellos que reencarnaron repetidamente en la sociedad humana y gradualmente han disuelto sus ye de pecados y han acumulado más y más de bondadoso, seguramente serán seleccionados para ser salvados durante la salvación. Cuando la salvación comience en el fin del tiempo, definitivamente el Creador los salvará al nuevo universo. En otras palabras, la forma en que la sociedad humana existe en un estado de “perplejidad” es un medio especial creado por el Creador para salvar a las multitudes de vidas. Por lo tanto, estando en la perplejidad, no importa quién pida y a quién le pida, es inútil despejar la perplejidad. Ninguna vida desde el Cielo hasta la Tierra se atreve a dañar este ambiente para salvar a las multitudes de vidas.

Siempre hay gente en el mundo humano que dice que creer en Dios es supersticioso. Entonces, alguien dice que si lo ve, lo creerá, pero si no lo ve, no lo creerá. Como resultado, algunas personas se atreven a hacer cosas malas sin importar las consecuencias. No importa cuán alto sea un dios, cuando se reencarna en un ser humano, y cuando tiene un cuerpo humano, es un humano, pero cuando entra al cuerpo humano, ya entra en la perplejidad. Por lo tanto, algunas personas crearán ye en la perplejidad. El Creador creó los Tres Reinos para que las multitudes de vidas disuelvan su ye de pecados en el sufrimiento y eleven su propia moralidad; este es el propósito fundamental, y sólo entonces se podrá ser salvado al reino celestial sin ye de pecados. Una vez que se haya generado ye, hay que pagarlo. Esto está determinado por los principios de leyes de los cuerpos celestiales y universos. Sin embargo, como los humanos están en la perplejidad, es posible que también cometan ye de pecados en la vida terrenal y, por supuesto, hay que pagarlo. Si no se paga en esta vida, se lo devolverá en la próxima. De hecho, mucha gente tiene ye de pecados seriamente grandes, y para que la gente pueda ser salvada, el Creador todavía tiene que soportar parte del sufrimiento por los humanos. Esta es la mayor misericordia y amor para todas las multitudes de vidas. Cuando el ye alcanza cierto grado, la vida realmente será destruida. Eliminar tu ye de pecados y regresar al Cielo es tu verdadero propósito al venir a este mundo. Todos hicieron un juramento al Creador cuando reencarnaron en este mundo. Por supuesto, es sufrido pagar el ye de pecados. El yeli provoca que la gente luche y haya guerras, enfermedades, trabajos duros, hambre y pobreza; lo cual causa sufrimiento. Por supuesto, hay ye grandes y pequeños, y es precisamente porque hay ye grande y pequeño que existe una diferencia entre ricos y pobres en la vida humana. ¡Si la gente salvaguarda la bondad en la perplejidad, creará menos yeli! ¡Y sufrirá menos!

En otras palabras, la "perplejidad" de los humanos fue creada para salvar a todas las multitudes de vidas, salvar los cuerpos celestiales y las multitudes de universos. Esta "perplejidad" tiene una razón tan importante que nunca será despejada según los deseos humanos. Hay tantas deidades inmortales en el mundo, ¿por qué no pueden satisfacer el deseo humano de despejar esta perplejidad? ¡Ellos no se atreven! Porque esa fue creada por el Creador para salvar los cuerpos celestiales y las multitudes de vidas. ¡Esta es la esperanza de que todas las multitudes de vidas sean salvadas!

Li Hongzhi
30 de septiembre de 2024