(Minghui.org) Después de que una mujer de 56 años desarrollara una grave enfermedad cardíaca cuando fue torturada en prisión, fue sometida a un control más estricto, porque se negó a renunciar a Falun Dafa, una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.
La Sra. Zhang Chuanwen, del condado de Qingyuan, provincia de Liaoning, fue arrestada el 4 de diciembre de 2022 por distribuir calendarios que contenían información sobre Falun Dafa. Fue sentenciada en secreto a 3,5 años por el Tribunal del distrito de Wanghua el 24 de marzo de 2023. Después de ser admitida en la Prisión de Mujeres de la provincia de Liaoning el 26 de julio de 2023, se le negaron las visitas familiares.
Una fuente cercana reveló que los guardias y las reclusas no permitieron que la Sra. Zhang durmiera y le ordenaron que permaneciera de pie y mirara videos que difamaban a Falun Dafa en agosto de 2023. Cuando se negó a obedecer, la golpearon y abusaron verbalmente. Perdió cuatro dientes y entró en estado de shock como resultado de la paliza. Después de que la llevaran de urgencia al hospital, los médicos le diagnosticaron una enfermedad cardíaca.
Sin embargo, los guardias no le informaron a la Sra. Zhang sobre su diagnóstico y la llevaron de regreso a la prisión sin brindarle más atención médica. Durante los siguientes tres meses, solo se le permitió dormir dos o tres horas todos los días. Mientras estaba despierta, tenía que sentarse en un pequeño taburete, inmóvil.
Las dos hermanas de la Sra. Zhang fueron a la prisión a fines de octubre de 2023 y finalmente se les permitió una reunión virtual con ella después de que condenaran a los guardias por violar la ley penitenciaria al revocar el derecho de su hermana a recibir visitas familiares.
Cuando las hermanas le preguntaron a la Sra. Zhang si la habían torturado, el guardia que estaba a su lado le dijo con tono amenazador: “Dígales, ¿alguien la ha torturado?”.
La Sra. Zhang comenzó a llorar y dijo: “Hermanas, por favor no pregunten sobre la tortura”. Por su expresión facial y su voz temblorosa, sus hermanas sospecharon que estaba bajo una tremenda presión en la prisión. La llamada se cortó después de 20 minutos.
La Sra. Zhang fue trasladada al equipo nueve de la división cinco a finales de diciembre de 2023. Los guardias la obligaron a realizar trabajos forzados durante largas horas todos los días. Se sentía mareada y tenía una opresión en el pecho. Los líderes del equipo Wang Zhuo y An Xinlei la insultaron verbalmente y las reclusas que la vigilaban le quitaron el colchón y no la dejaron sentarse.
La familia de la Sra. Zhang la visitó nuevamente a principios de 2025. Notaron que caminaba muy lentamente y no podía abrir un ojo. Parecía agotada y hablaba con una voz muy débil. Sus dientes estaban descoloridos y muy flojos. Cuando su familia le preguntó qué había pasado, ella señaló la insignia de la división de “Gestión Estricta” que llevaba, lo que indicaba que había sido sometida a una brutal tortura. También dijo que su corazón latía muy rápido y que se sentía muy incómoda. Durante la conversación, un guardia se quedó cerca y registró todo lo que dijeron. La reunión terminó en sólo diez minutos.
Antes de que la familia de la Sra. Zhang se fuera, un director de la guardia se quejó de que, debido a que la Sra. Zhang desafió sus órdenes, no ganaron suficientes puntos para cumplir con la cuota [de tener suficientes practicantes de Falun Dafa que renunciaran a su fe]. La familia instó al director a que la tratara bien.
Persecución previa
La Sra. Zhang comenzó a practicar Falun Dafa en 1997 a la edad de 29 años. Muchas de sus dolencias desaparecieron pronto, incluyendo artritis severa, enteritis y enfermedades de la piel. También abandonó muchos malos hábitos, como fumar, beber y jugar mahjong. Después de presenciar sus cambios, su esposo la apoyó mucho en su práctica de Falun Dafa.
Alarmado por el número cada vez mayor de practicantes de Falun Dafa, el Partido Comunista Chino ordenó una campaña de persecución a nivel nacional para erradicar la práctica de China en julio de 1999. Debido a que la Sra. Zhang se negó a renunciar a Falun Dafa, fue arrestada repetidamente, recibió dos sentencias en campos de trabajo y una en prisión antes de su última persecución.
La Sra. Zhang fue a Beijing para apelar por el derecho a practicar Falun Dafa a fines de 2001. Fue arrestada y sentenciada a un año en el Campo de Trabajo Forzado de Wujiabao.
Debido a que la Sra. Zhang inició una huelga de hambre para protestar por la persecución, el guardia Wu Wei la golpeó, dejándola herida y cubierta de moretones. Tenía las piernas severamente hinchadas y los tobillos dislocados.
Un día, Wu entró repentinamente en la celda de la Sra. Zhang y le dio una patada en la garganta. Ella cayó al suelo. Tan pronto como se incorporó, Wu la pateó de nuevo. Le dieron tres patadas de esta manera.
En otra ocasión, el guardia Wu y Zhang Wu echaron agua sobre la Sra. Zhang. Luego, uno de ellos le aplicó descargas eléctricas y el otro la golpeó. Una guardia observaba desde un costado.
Wu también vertió orina sobre la cabeza de la Sra. Zhang y la obligó a hacer el split de lado, lo que le causó graves lesiones en la pierna y no pudo caminar.
Recreación de la tortura: el split de lado.
La noche del 6 de mayo de 2002, varios guardias le taparon los ojos a la Sra. Zhang con un paño negro, la ataron a una silla de metal, le aplicaron descargas eléctricas con dos picanas y la patearon. Tras una noche de tortura, sufrió quemaduras graves en la cara y una hinchazón tal en el cuello que le llegaba al ancho de la cabeza.
La Sra. Zhang intentó escapar a fines de mayo de 2002, pero fue capturada y sometida a una tortura aún más brutal. A fines de 2002, fue sentenciada a otro período en un campo de trabajo y transferida directamente al tristemente célebre Campo de Trabajo Forzado de Masanjia.
En el Campo de Trabajo Forzado de Masanjia, fue privada del sueño y obligada a ver videos que difamaban a Falun Dafa. También fue obligada a trabajar más de diez horas sin paga todos los días, principalmente haciendo artesanías con materiales tóxicos.
Las autoridades acosaron con frecuencia a su esposo. Incapaz de soportar la presión, se divorció.
El 21 de junio de 2018 fue arrestada nuevamente después de ser denunciada por distribuir materiales sobre Falun Dafa. En el centro de detención, desarrolló una grave enfermedad. No podía abrir un ojo y perdió una cantidad significativa de peso. Sin embargo, los guardias la obligaban a trabajar todos los días y a menudo la golpeaban si no podía terminar la cuota diaria.
Después de que el Tribunal del condado de Qingyuan sentenciara a la Sra. Zhang a un año y medio de prisión en diciembre de 2018, el procurador consideró que la sentencia era demasiado leve y apeló a un Tribunal Superior. El Tribunal Intermedio de la ciudad de Fushun dictó sentencia en agosto de 2019 para aumentar la sentencia de Zhang a tres años. Fue ingresada en la Prisión de Mujeres de la provincia de Liaoning el 10 de septiembre de 2019 y liberada el 20 de junio de 2021.
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