(Minghui.org) Un hombre de 60 años de la ciudad de Chengdu, provincia de Sichuan, se encuentra en huelga de hambre mientras cumple una sentencia injusta de 3,5 años por practicar Falun Gong.
El Sr. Luo Changyong fue arrestado el 15 de marzo de 2022, después de que la policía sospechara que colocaba pegatinas con información sobre Falun Gong. Fue puesto en libertad bajo fianza al día siguiente. Posteriormente, la policía remitió su caso a la Procuraduría del distrito de Xindu.
Debido al constante acoso policial y de funcionarios de la Procuraduría, el Sr. Luo se desplazó el 15 de mayo de 2023, para ser arrestado tres meses después, el 21 de agosto. Ingresó en el Centro de Detención del distrito de Xindu al día siguiente.
Durante la audiencia del Sr. Luo el 28 de mayo de 2024, el Tribunal del distrito de Xindu lo trasladó de una sala grande a una pequeña y no permitió la presencia de sus familiares ni amigos.
El Sr. Luo señaló que en China nunca se ha penalizado a Falun Gong. Su abogado se declaró inocente en su nombre y afirmó que la Procuraduría no había presentado pruebas de que el Sr. Luo hubiera colocado pegatinas sobre Falun Gong; e incluso si lo hubiera hecho, no habría perjudicado a nadie. Añadió que el Sr. Luo tenía el derecho constitucional a la libertad de religión y de expresión para practicar su fe y hablar de ella.
El Sr. Luo y su abogado solicitaron la comparecencia de testigos para interrogarlos, pero no se presentó ninguno. El juez presidente interrumpió constantemente al Sr. Luo y a su abogado durante sus alegatos de defensa y dijo: “Respecto al tema del Falun Gong, las autoridades superiores han tomado una decisión firme. Tenemos la obligación de detenerlos”. Poco después, suspendió la audiencia.
El 20 de junio de 2024, el juez sentenció al Sr. Luo a tres años y medio de prisión y a una multa de 10.000 yuanes. La sentencia no hizo mención alguna a los argumentos de su defensa ni a los de su abogado.
Posteriormente, fue trasladado a la Prisión de Jiazhou para cumplir su sentencia. Recientemente inició una huelga de hambre en protesta por su detención ilegal.
Desde 2006, la Prisión de Jiazhou se utiliza para encarcelar a practicantes varones de Falun Gong en la provincia de Sichuan. Los practicantes son sometidos a torturas, como largas horas de pie, descargas eléctricas y golpizas. A menudo, solo disponen de unos segundos para comer y son obligados a realizar trabajos forzados. No se les permite hablar entre sí y se les ordena redactar "informes de pensamiento" y declaraciones juradas de renuncia a su fe.
Quienes se niegan son sometidos a un estricto control. Han sido rociados con agua con pimienta o torturados por otros reclusos. Los reclusos implicados en la persecución de los practicantes de Falun Gong son recompensados con reducciones de condena. Al menos 25 practicantes han muerto a causa de torturas en la Prisión de Jiazhou; algunos dentro de la cárcel y otros poco después de ser liberados.
El Sr. Luo trabajaba en el Centro de Tecnología Agrícola de la Oficina de Desarrollo Rural del distrito de Xindu. Comenzó a practicar Falun Gong en 1996 y pronto se recuperó de diversas dolencias. Tras la persecución ordenada por el Partido Comunista Chino en 1999, fue blanco de repetidos ataques por defender su fe. Fue sentenciado a cuatro años en 2001 y a otros cinco en 2009.
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Categoría: Hechos de la persecución