(Minghui.org) Minghui se enteró recientemente de un incidente ocurrido entre 2006 y 2007. Antes de morir, un preso condenado a muerte de apellido Zhang, les contó a los practicantes de Falun Gong en la ciudad de Sanhe, provincia de Hebei, que había participado en la ejecución de practicantes que estaban en el ejército.
Según Zhang, el exlíder del Partido Comunista Chino (PCCh), Jiang Zemin, dio la orden de ejecutar a cinco oficiales del ejército practicantes de Falun Gong. Entre estas víctimas, el oficial de mayor rango era Jiang, comisario político del 39.º Ejército. Dos de ellos eran un comandante de regimiento y un comandante de compañía.
Un teniente general condujo a las víctimas a un arenal y mandó cavar una fosa. Luego ordenó a los cinco oficiales que se arrodillaran junto a la fosa. Los mandó fusilar y enterrar. Todos los participantes tuvieron que firmar un acuerdo de confidencialidad que les prohibía hablar de lo sucedido. El PCCh podría haber mentido a los familiares de estos practicantes, diciéndoles que "murieron en un acto de servicio".
Más tarde, cuando Zhang y varios otros tomaron un taxi, robaron y asesinaron al conductor, y arrojaron el cuerpo en una zona remota. Zhang fue declarado culpable de asesinato y condenado a muerte. Al darse cuenta de que nunca saldría de prisión, contactó con practicantes de Falun Gong y les contó lo sucedido.
Zhang estuvo involucrado en el robo en la ciudad de Sanhe o en la ciudad de Langfang. Se puede encontrar más información sobre su historial militar consultando los casos judiciales locales de 2006 y 2007.
Incluso las órdenes dadas en el ejército deben respetar la Constitución, no pueden violar la ley y deben tener un propósito militar. Este incidente pone de relieve aún más cómo la persecución a Falun Gong es despiadada y opera completamente al margen de la ley.
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Categoría: Hechos de la persecución