(Minghui.org) Una mujer de 65 años de Beijing fue ingresada recientemente en la Prisión de Tianhe tras perder su apelación contra una sentencia de siete años y medio el 9 de octubre de 2025.

La Sra. Wei Suwen fue sentenciada y multada con 16.000 yuanes por el Tribunal del distrito de Dongcheng el 27 de junio de 2025 por practicar Falun Gong, una disciplina espiritual perseguida por el Partido Comunista Chino desde julio de 1999. El Segundo Tribunal Intermedio de Beijing dictó sentencia en su contra el 9 de octubre sin celebrar una audiencia pública.

Detención

La Sra. Wei fue detenida el 15 de agosto de 2024 mientras paseaba por el Parque Tiantan. Su hija recibió un mensaje de texto del oficial Gu a las 14:30 de ese día, informándole que su madre estaba detenida en la Estación de Policía de Tiantan. También le comunicó que le habían confiscado tres teléfonos móviles a la Sra. Wei, incluyendo dos Lenovo que le pertenecían y un tercero (un iPhone 6 dorado) de su hija.

Unos ocho agentes allanaron la casa de la Sra. Wei sin mostrar identificación ni orden judicial. La ingresaron en prisión preventiva en el Centro de Detención del distrito de Dongcheng poco después de la medianoche. El oficial Xu Zheng estuvo a cargo del caso.

La Procuraduría del distrito de Dongcheng aprobó la detención el 30 de agosto. El procurador Miao Rongrong devolvió el caso a la policía el 30 de noviembre, y esta lo volvió a presentar el 16 de diciembre de 2024.

Sentenciada con pruebas insuficientes

La Sra. Wei fue acusada formalmente el 16 de enero de 2025. Compareció ante el Tribunal del distrito de Dongcheng el 18 de febrero. El juez Chen Chunsheng presidió el juicio, asistido por los jueces Ma Lijun y Li Peizhong, el secretario Sun Chenfei y Zhong Zheng, asistente judicial.

El procurador Miao acusó a la Sra. Wei de «utilizar una organización sectaria para socavar la aplicación de la ley», un pretexto habitual del régimen comunista para incriminar a practicantes de Falun Gong. Entre las pruebas de la Procuraduría figuraba que la Sra. Wei “utilizaba sus dos teléfonos, modificados para funcionar como servidores, para conectarse a puntos de acceso Wi-Fi y enviar mensajes de texto sobre Falun Gong”.

Miao recomendó una pena de siete años o cadena perpetua. El abogado de la Sra. Wei defendió su inocencia. Señaló que conectarse a puntos de acceso Wi-Fi mediante teléfonos móviles normalmente requiere que una persona permanezca en un lugar fijo, pero la Sra. Wei caminaba por el parque con un paraguas en una mano (llovía el día de su detención) y un bolso en la otra. Abandonó el parque en unos 10 o 20 minutos. Técnicamente, era imposible que alguien se conectara al punto de acceso a través de su teléfono.

La policía afirmó haber recibido un aviso sobre la supuesta "actividad ilegal" de la Sra. Wei en el parque, pero nadie compareció ante el Tribunal para ser interrogado.

El agente Xu también presentó un vídeo que mostraba a la Sra. Wei conectándose a puntos de acceso Wi-Fi, pero el vídeo se grabó antes de que estuviera paseando por el parque.

Según el abogado, la hija de la Sra. Wei, el único familiar autorizado a asistir a la audiencia, le prestó su iPhone. Tras la detención de la Sra. Wei, exigió que le devolvieran el iPhone, pero no se lo devolvieron. Le dijeron que el teléfono estaba relacionado con el caso de su madre y que solo podría ser devuelto una vez cerrado el caso. Posteriormente, la policía determinó que el iPhone no tenía ninguna relación con el caso. Por ley, el teléfono debía devolverse en un plazo de tres días a partir de la decisión, pero a la hija de la Sra. Wei no se le devolvió.

La hija de la Sra. Wei también dudaba de que los dos teléfonos Lenovo pertenecieran a su madre, quien solo sabía hacer y contestar llamadas con teléfonos móviles. Sin embargo, se demostró que esos dos teléfonos Lenovo contenían información que requería conocimientos avanzados sobre las funciones de los teléfonos inteligentes.

Incluso si la Sra. Wei hubiera usado los teléfonos para enviar mensajes de texto sobre Falun Gong, esto no es ilegal, ya que ninguna ley en China penaliza a Falun Gong ni lo cataloga como secta.

No obstante, el juez Chen sentenció a la Sra. Wei el 27 de junio de 2025. Su hija recibió una copia del veredicto el 23 de julio, en el que se indicaba que su iPhone sería subastado y que las ganancias se usarían para cubrir parte de la multa judicial de su madre.

El Tribunal de Apelaciones falla en contra de la Sra. Wei; su hija busca justicia

La hija de la Sra. Wei escribió al juez Li Kai del Segundo Tribunal Intermedio de Beijing, solicitándole una audiencia pública para poder testificar contra la sentencia injusta de su madre por parte del Tribunal de Primera Instancia. El 9 de octubre de 2025, Li emitió un fallo confirmando el veredicto original contra la Sra. Wei sin celebrar audiencia.

Al día siguiente, la hija de la Sra. Wei presentó quejas en la plataforma en línea 12368 contra el juez de primera instancia Chen y el juez de apelaciones Li por haber sentenciado a su madre sin fundamento legal. Esa misma tarde, recibió una llamada telefónica preguntando por su lugar de trabajo. La persona que llamó le advirtió: “Falun Gong es un tema extremadamente delicado en nuestro país. El gobierno lo ha prohibido y la sentencia ya está dictada. Solo necesitamos ejecutarla. Si tiene alguna pregunta, puede presentar una moción”.

La hija de la Sra. Wei presentó la moción. El 11 de octubre de 2025, la hija de la Sra. Wei presentó una queja contra el oficial Xu ante la División de Supervisión del Departamento de Policía del distrito de Dongcheng. El oficial Song (número de placa 027485) atendió la llamada. Le advirtió que estaba grabando la conversación y que podía denunciar a Xu ante la Procuraduría del distrito de Dongcheng por negligencia en el cumplimiento de sus funciones o interponer una demanda contra el departamento de policía.

Song dio a entender que la División de Supervisión no era responsable del asunto. Posteriormente, la hija de la Sra. Wei envió una carta de queja a la Procuraduría del distrito de Dongcheng. El 17 de octubre de 2025, recibió respuesta del Tribunal del distrito de Dongcheng (que remitió la queja).

El Tribunal declaró que la investigación policial del caso fue clara, con fuentes de evidencia legales que corroboraban el delito cometido por la Sra. Wei y que ameritaba una pena severa. El Tribunal se felicitó por haber impuesto una pena de prisión apropiada, conforme a la ley.

Informes relacionados:

Mujer de Beijing de 65 años condenada a 7,5 años de prisión por practicar Falun Gong
Mujer de 64 años arrestada en Beijing por practicar Falun Gong