(Minghui.org) Me sentí extremadamente triste después de leer la serie de artículos "Estos niños desean ayudar a acabar con la persecución". En los 25 años de persecución a Falun Dafa, incluso los adultos tenemos problemas para soportar la enorme presión que no ha disminuido en todos estos años; no puedo imaginar cómo los niños pequeños se las arreglan para hacer frente al trauma de ver a sus padres siendo perseguidos. 

Conozco a tres familias de Chongqing que tienen hijos pequeños cuyos padres fueron detenidos y condenados a prisión en repetidas ocasiones. Las experiencias de estos niños nos dan una idea de lo brutal que es la persecución para los jóvenes. 

Xixi y Wangwang

El Sr. He Zubin fue detenido en diciembre de 2000 y encarcelado durante un mes por distribuir material informativo sobre Falun Dafa. Por aquel entonces, el Sr. He tenía 23 años y su esposa, la Sra. Lyu Caili, estaba embarazada de nueve meses de su primera hija, Xixi. Antes de que Xixi cumpliera un año, el Sr. He fue detenido de nuevo el 21 de noviembre de 2002 y retenido en un centro local de lavado de cerebro durante unos meses. 

Aunque escapó a otra detención la noche del 8 de enero de 2003, por colgar una pancarta sobre Falun Dafa, se vio obligado a vivir lejos de casa durante casi dos años. La Sra. Lyu estaba embarazada de su segundo hijo en ese momento. No pudo volver a casa para estar con su esposa cuando nació su hijo Wangwang, el 30 de noviembre de 2003. Debido a las exigencias de criar sola a dos hijos, el pelo de la Sra. Lyu se volvió gris cuando tenía poco más de 30 años.

Tras casi dos años de desplazamiento, el 29 de noviembre de 2004 fue detenido en la ciudad de Suining, provincia de Sichuan, y posteriormente condenado a dos años y medio de prisión. Cuando fue liberado en 2007, vio por fin a Wangwang por primera vez: el niño tenía tres años. 

La pareja fue detenida el 19 de abril de 2015, cuando Xixi estaba en secundaria y Wangwang en primaria. Los hermanos fueron abandonados a su suerte durante las detenciones de sus padres. Se enfrentaron a un acoso policial constante en la escuela cuando alguien descubrió que los hermanos también practicaban Falun Dafa. 

La Sra. Lyu fue puesta en libertad 37 días después, pero el 20 de octubre de 2016, el Sr. He fue condenado a cinco años de prisión. La señora Lyu regentaba un pequeño restaurante para mantener a la familia mientras seguía trabajando para rescatar a su esposo. Xixi comprende lo trabajadora que es su madre. Estudiaba mucho en la escuela y ayudaba a cuidar de su hermano. Un día, Wangwang quería jugar y se negó a hacer los deberes. Xixi no sabía qué hacer con él. Cuando la Sra. Lyu volvió a casa esa tarde, Xixi rompió a llorar en sus brazos: "¡Echo tanto de menos a papá! Wangwang no se comportaría así si papá estuviera en casa".

Por desgracia, un año después de que el Sr. He saliera de la cárcel, fue detenido de nuevo, junto con la Sra. Lyu, la noche del 18 de junio de 2021. En 2023, el Tribunal del distrito de Jiulongpo condenó al Sr. He a ocho años de prisión y a la Sra. Lyu a cinco años.

Para entonces, Xixi ya tenía un empleo tras graduarse en un instituto de formación profesional. Con los padres cumpliendo largas condenas, Xixi asumió las responsabilidades de cuidar de Wangwang y pagar la hipoteca de la familia. Anhela que llegue el día en que sus padres sean liberados.

Xinyi y Ruirui

Jin Yu tenía 27 años cuando se quedó embarazada de su primera hija, Xinyi. Debido a su embarazo, fue puesta en libertad pocas horas después de ser detenida en 2000. Pero pocos meses después de dar a luz a Xinyi, Jin y su hija se vieron obligadas a vivir fuera de casa y a esconderse de la policía. Por aquel entonces, la madre de Jin, Zeng Xianfu, también fue detenida por su fe en Falun Dafa. La anciana desarrolló una grave afección cardiaca e hipertensión debido a las torturas sufridas bajo custodia y falleció en 2008. 

La Sra. Jin fue detenida de nuevo en 2003 y 2005. Más tarde dio a luz a otra hija, Ruirui. Sin embargo, debido a la presión de la persecución, su esposo se divorció. Ella tenía la custodia total de las niñas. 

Tras la cuarta detención de Jin, el 19 de abril de 2015, la policía la privó del sueño y le dijo que una de sus hijas se estaba muriendo y que debía cooperar con ellos para que la pusieran en libertad antes y poder ver a su hija. No cayó en su estratagema y fue condenada a dos años de prisión el 20 de octubre de 2016. 

En el momento de la detención de la Sra. Jin en 2015, Xinyi estaba en el instituto y Ruirui en la escuela primaria. Xinyi le contaba a Ruirui que su madre había salido de la ciudad para asistir a una reunión, y Ruirui lloraba a menudo, preguntándole por qué su madre tenía que dejarlas tanto tiempo. 

Cuando una amiga de la Sra. Jin visitó a las dos niñas, Xinyi le preguntó si había visto a su madre en el centro de detención y si los guardias la habían esposado o torturado. 

A Xinyi le encanta bailar desde que era pequeña y su sueño era entrar en Shen Yun Performing Arts. En 2015, el Programa de Danza de la Academia de las Artes Fei Tian (que colabora con Shen Yun para las prácticas de los bailarines) aceptó solicitudes y Xinyi cumplía todos los requisitos. Sin embargo, debido a la detención de su madre y a la posterior condena a dos años de prisión, renunció a convertirse en bailarina.

Zhenzhen y Xiongxiong

Cuando el Sr. Zhu Yong, trabajador de una fábrica de maquinaria, fue detenido el 19 de abril de 2015, llevaba de excursión a su hija Zhenzhen, que estaba en la escuela primaria, y a su hijo Xiongxiong, de un año, junto con sus padres ancianos. La policía lo golpeó delante de sus hijos y padres y se lo llevó. Sus padres e hijos quedaron aterrorizados al ver la brutalidad con la que lo trataron. 

Un año después, una vecina contó a la madre de Xiongxiong que el niño le dijo: "La gente mala se llevó a mi padre". La madre de Xiongxiong se quedó estupefacta al oírlo, ya que nunca le había explicado a Xiongxiong la detención de su esposo, temiendo que entristeciera el corazón del pequeño.

Más tarde, cuando un amigo del señor Zhu visitó a la familia, Xiongxiong volvió a decir que gente mala se había apoderado de su padre. También contó los detalles de su detención, como en qué dirección se lo llevaron. Su madre quedó conmocionada por los detalles que recordaba y el nivel de trauma que debió de sentir.

El Sr. Zhu fue condenado a dos años el 20 de octubre de 2016. Cuando Xiongxiong jugaba solo, solía fingir que hablaba con su padre por teléfono: "¡Hola, papá! ¿dónde estás? Ah, estás en casa de la abuela. ¿Vienes mañana a casa?". Después de "colgar" el teléfono, le decía alegremente a su madre: "Papá vuelve mañana a casa".

Epílogo

Estas tres familias, junto con los casos enumerados en los artículos citados, son solo la punta del iceberg de lo que han sufrido los niños en el curso de la persecución a Falun Dafa. De los innumerables practicantes que fueron perseguidos en los últimos 25 años, todos sus hijos o nietos se vieron afectados de un modo u otro. Algunos sufrieron discriminación en la escuela. Algunos fueron amenazados con la expulsión de la escuela o se les negó la oportunidad de asistir a la universidad. Después de 25 años, algunos pasaron de ser niños a jóvenes adultos. Su sufrimiento es indescriptible y, sin embargo, el miedo y la presión continúan cada día porque la persecución no ha terminado. 

Aplaudo a todos los jóvenes practicantes de Falun Dafa que trabajan junto a los practicantes adultos para generar conciencia sobre la persecución. Su espíritu y coraje son encomiables y no tienen precio. 

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