(Minghui.org) Una mujer de 85 años fue trasladada en ambulancia a su ciudad natal en la ciudad de Jieyang, provincia de Guangdong, el 25 de octubre de 2024, después de que enfermara gravemente mientras cumplía una sentencia de tres años de prisión por su fe en Falun Gong, una disciplina espiritual perseguida por el Partido Comunista Chino desde julio de 1999.
La familia de la Sra. Yao Jingjiao la llevó rápidamente al Hospital de Medicina China de la ciudad de Jieyang, y ella permanece en la unidad de cuidados intensivos en el momento de escribir este artículo. Está extremadamente débil y apenas puede hablar. Las autoridades penitenciarias dijeron que debe terminar su sentencia fuera de la prisión y advirtieron a sus seres queridos que no inviten a los practicantes locales de Falun Gong a visitarla.
Arrestos, sentencias y abusos en prisión
La Sra. Yao fue arrestada el 14 de junio de 2020 y puesta en libertad bajo fianza al día siguiente. La policía y el comité vecinal local siguieron acosándola en su casa. Las condiciones de su libertad bajo fianza se renovaron dos veces, en junio de 2021 y junio de 2022. La Procuraduría del distrito de Jiedong acusó a la Sra. Yao el 22 de abril de 2022 y el Tribunal del distrito de Jiedong la juzgó en agosto de 2022. Fue sentenciada a tres años de prisión y a una multa de 30.000 yuanes (4180,98 dólares) en noviembre de 2022 y permaneció en libertad bajo fianza desde entonces.
El 5 de mayo de 2023, la División de Seguridad Nacional del distrito de Rongcheng llevó a la Sra. Yao a un examen físico. Se descubrió que tenía presión arterial alta, pero la policía la llevó al Centro de Detención del distrito de Jiedong, donde estuvo retenida hasta que fue trasladada a la Prisión de Mujeres de la provincia de Guangdong (ubicada en la ciudad capital de Guangzhou) a principios de julio de 2023. Debido a su persistente presión arterial alta y al deterioro de su salud, la prisión la colocó en su hospital interno el día de su ingreso.
Los guardias de la prisión obligaron a la Sra. Yao a escribir varias declaraciones para renunciar y denunciar a Falun Gong contra su voluntad, lo que agravó aún más sus condiciones de salud preexistentes.
Cuando la Sra. Yao cayó en estado crítico, la prisión llamó a una ambulancia para que la llevara de regreso a la ciudad de Jieyang el 25 de octubre de 2024. Le dijeron a su familia que debía cumplir el resto de su condena fuera de la prisión. Sus seres queridos fueron amenazados para que no se pusieran en contacto con los practicantes locales de Falun Gong, para no enfrentar las consecuencias.
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Categoría: Hechos de la persecución
