​Una mujer de Shanghái, de 68 años, tuvo su pensión suspendida durante 32 meses por causa de su fe en Falun Gong y esta situación continua hasta hoy.

(Minghui.org) Una mujer de 68 años de Shanghái tiene su pensión suspendida desde enero de 2021 porque una vez cumplió tres años de prisión por su fe en Falun Gong, una práctica de cuerpo y mente que ha sido perseguida por el Partido Comunista Chino desde julio de 1999.

La Sra. Shi Yajuan se jubiló de la empresa Shanghai Guotai Rubber, Plastic and Hardware Company en 2005, tras alcanzar la edad de jubilación de 50 años. Fue detenida el 12 de marzo de 2007 por su fe en Falun Gong y posteriormente condenada a tres años de prisión. Fue puesta en libertad en marzo de 2010.

El 5 de diciembre de 2020, más de una década después de su puesta en libertad, la Sra. Shi recibió una notificación del Centro de Servicios de la Seguridad Social del Distrito de Huangpu, en Shanghái, en la que se le comunicaba que debía presentarse en el plazo de cinco días a partir de la recepción de la notificación para liquidar unos pagos excesivos de pensión que se le habían efectuado. El aviso indicaba que el sobrepago incluía las prestaciones de pensión que se le habían concedido durante los tres años de encarcelamiento (de abril de 2007 a marzo de 2010).

Poco después, la Sra. Shi acudió al Centro de Servicios de la Seguridad Social. Un empleado le mostró dos documentos expedidos por el Ministerio de Recursos Humanos y Seguridad Social de China (MOHRSS). Uno era el [2001] Nro. 44, expedido el 8 de marzo de 2001, y el otro el [2003] Nro. 315, expedido el 7 de julio de 2003, siendo el segundo explicaciones adicionales del primero. Ambos documentos afirmaban básicamente lo mismo, es decir, que los jubilados que cumplían condena debían renunciar a sus prestaciones de pensión durante su encarcelamiento.

A continuación, el empleado mostró a la Sra. Shi el cálculo del Centro de Servicios de la Seguridad Social del supuesto "pago en exceso" que se le había hecho. Shi "debía" un total de 139.269,60 yuanes (aprox. 18.801,40 USD) al Centro de Servicios de la Seguridad Social, incluidas las prestaciones de jubilación que se le habían concedido durante sus tres años de encarcelamiento, así como el ajuste anual por coste de la vida de las prestaciones de jubilación que se le habían concedido desde su puesta en libertad (de abril de 2010 a diciembre de 2020). La empleada dijo que intentaban recuperar también el ajuste por coste de la vida porque se consideró que no tenía derecho a esos aumentos anuales debido a su fe en Falun Gong.

La Sra. Shi alegó que todas sus prestaciones de pensión eran ingresos obtenidos legalmente y que, por tanto, no debía nada al centro de servicios de la Seguridad Social. Su pensión fue entonces suspendida a partir de enero de 2021 para "devolver el sobrepago que debía".

Han pasado 32 meses (de enero de 2021 a agosto de 2023) desde que se suspendió la pensión de la Sra. Shi. Según el Centro de Servicios de la Seguridad Social, su pensión mensual estaba prevista en 4.504,32 yuanes (aprox. 608,08 USD) en 2021. Si se utiliza esa cifra (sin tener en cuenta los aumentos anuales de la prestación), los pagos de pensión suspendidos en los últimos 32 meses han acumulado 144.140,8 yuanes (=4.504,4 yuanes*32 meses), lo que ya ha superado el supuesto pago en exceso de 139.269,60 yuanes.

Incluso según la propia lógica del Centro de Servicios de la Seguridad Social, la pensión de la Sra. Shi debería haber sido restablecida tan pronto como "devolviera el supuesto pago en exceso que debía". Sin embargo, hasta hoy, la Sra. Shi aún no ha recibido ninguna prestación de pensión, a pesar de sus repetidos esfuerzos por buscar justicia para sí misma.

Esfuerzos inútiles para solicitar el restablecimiento de la pensión

El 8 de febrero de 2021, la Sra. Shi presentó una solicitud de reconsideración administrativa de la situación de su pensión ante la Oficina Municipal de Recursos Humanos y Seguridad Social de Shanghái. Al no recibir respuesta, el 18 de febrero de 2021 llamó al teléfono de atención al ciudadano 12345 de Shanghái para quejarse. La Oficina Municipal de Recursos Humanos y Seguridad Social emitió entonces su "Aviso de recepción de solicitud de reconsideración administrativa" ([2021] N.º 63).

Un empleado de la oficina llamó a la Sra. Shi la tarde del 26 de febrero de 2021, diciendo que podían ofrecerle un estipendio mensual de 1.200 yuanes (mucho menos que su pensión de 4.504,4 yuanes).

La Sra. Shi preguntó al interlocutor cuál era la base legal para suspender su pensión y darle un estipendio en su lugar. No le contestó, pero la amenazó con que era inútil presentar una reconsideración administrativa. Así pues, rechazó la oferta del estipendio porque, para empezar, nunca deberían haberla privado de su pensión, ganada legalmente.

La Sra. Shi nunca recibió otra respuesta de la oficina aparte del acuse de recibo de su solicitud de reconsideración administrativa.

También presentó una demanda contra el Centro de Servicios de la Seguridad Social del Distrito de Huangpu, pero el Tribunal del Distrito de Pudong se negó a atender su caso y dijo que debía suspenderse su pensión para devolver lo pagado de más. Entonces acudió al Tribunal Intermedio encargado del juicio. El Tribunal Superior también se negó a aceptar su caso alegando que el Tribunal de Primera Instancia debía tramitarlo primero. Volvió entonces al Tribunal de Primera Instancia, que se negó de nuevo a aceptar su caso y le reiteró que la suspensión de la pensión era para devolver lo pagado de más.

En los dos años siguientes, Shi escribió unas 20 veces al Centro de Servicios de la Seguridad Social del Distrito de Huangpu para que le devolvieran la pensión, pero nunca le contestaron.

La Seguridad Social viola la ley al suspenderle la pensión

La Sra. Shi reiteró un hecho en sus numerosos recursos: sus prestaciones de pensión son sus derechos legítimos y nunca deberían haber sido suspendidas bajo ninguna circunstancia. Aunque el Centro de Seguridad Social del Distrito de Huangpu presentó dos documentos del MOHRSS como prueba de que el gobierno central había prohibido a los jubilados que cumplían condena recibir prestaciones de pensión, ninguna ley promulgada en China lo ha indicado nunca.

El artículo 73 de la Ley del Trabajo estipula: "Los trabajadores disfrutarán de las prestaciones de la seguridad social de acuerdo con la ley cuando se jubilen. Las condiciones y normas para que los trabajadores disfruten de las prestaciones de la seguridad social se estipularán mediante leyes y reglamentos. Las prestaciones de la seguridad social disfrutadas por los trabajadores deben pagarse íntegra y puntualmente".

La Sra. Shi subrayó que las oficinas de la seguridad social son meras fiduciarias encargadas de recaudar e invertir las cotizaciones a la pensión y de dispensar las prestaciones de jubilación. No están en condiciones de suspender las prestaciones de jubilación de ningún jubilado, aunque sea encarcelado por cualquier motivo. La suspensión de su pensión por parte del Centro de Servicios de la Seguridad Social del Distrito de Huangpu equivale, por tanto, a vulnerar sus derechos de propiedad.

Además, la Constitución garantiza la libertad de creencia de los ciudadanos, por lo que la Sra. Shi nunca debería haber sido encarcelada, y mucho menos sufrir una persecución económica en forma de suspensión de la pensión.

Adopción de la práctica de Falun Gong

La Sra. Shi consiguió una copia de Zhuan Falun, la principal enseñanza de Falun Gong, en mayo de 1996. Terminó de leer el libro en dos noches y se identificó con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia para ser una buena persona.

Ya no se peleaba con los demás en casa ni en el trabajo. Poco a poco se volvió más tolerante, considerada y tranquila. La gente que la conocía comentaba que se había convertido en una persona mucho más alegre, comprensiva y cariñosa.

Gracias a la práctica de Falun Gong, la Sra. Shi también mejoró su salud. El músculo de su mano derecha se había atrofiado durante años, pero se recuperó totalmente después de empezar a practicar Falun Gong. Solía correr el riesgo de desmayarse (debido a la expansión por calor y la contracción por frío de los vasos sanguíneos) cada año cuando cambiaba la estación o había grandes cambios de temperatura. Con la práctica de Falun Gong, sin embargo, no volvió a desmayarse durante los cambios de tiempo.

Debido a sus experiencias positivas con Falun Gong, la Sra. Shi nunca vaciló en su fe después de que comenzara la persecución en julio de 1999. En los últimos 24 años ha sido perseguida repetidamente por su fe.

Detenida durante 45 días en Beijing en 2001

La Sra. Shi fue a Beijing a hacer un llamamiento en favor de Falun Gong el 12 de enero de 2001 y fue detenida en la plaza de Tiananmen al día siguiente. Dos hombres vestidos de civil la detuvieron y le pidieron su documento de identidad. Luego le preguntaron si Falun Gong era bueno y ella dijo que sí. La introdujeron en una furgoneta y la condujeron a la Estación de Policía de Qianmen, en Beijing. La oficina de enlace del gobierno de Shanghái en Beijing la recogió y la escoltó de vuelta.

En la Estación de Policía de Waitan, en Shanghái, la interrogaron durante varias horas. El Departamento de Policía del Distrito de Huangpu dictó una orden de detención contra ella y la trasladó al Centro de Detención del Distrito de Pudong, donde permaneció recluida más de 20 días. Después, la policía le dio otra orden de detención y la mantuvo bajo custodia durante algún tiempo más. Estuvo detenida un total de 45 días.

Detenida más de 10 días durante la APEC China 2001 en Shanghái

Durante la APEC (Cooperación Económica Asia-Pacífico) China 2001, que se celebró en Shanghái, el comité local de calle de la Sra. Shi la engañó para que acudiera a una sesión de lavado de cerebro celebrada en un complejo turístico. Permaneció allí entre 10 y 15 días, durante los cuales fue vigilada por dos personas las 24 horas del día y obligada a ver programas de televisión que difamaban a Falun Gong. Se declaró en huelga de hambre en señal de protesta y fue insultada por las dos personas.

Detenida de nuevo durante el XVI Congreso Nacional de 2002

Durante el XVI Congreso Nacional del Partido Comunista Chino, celebrado en noviembre de 2002, la Sra. Shi fue puesta bajo arresto domiciliario en el hotel Nanjing, en el distrito de Huangpu, por agentes de la Estación de Policía de Waitan.

Estuvo detenida en el hotel entre 10 y 15 días.

Condenada a tres años en 2007 y torturada en prisión

La Sra. Shi fue detenida el 12 de marzo de 2007 por varios agentes de la Estación de Policía de la calle de Jiaxing y de la Oficina de Seguridad Doméstica del Distrito de Luwan que la habían estado siguiendo. Allanaron su domicilio y confiscaron un ordenador de sobremesa, dos discos duros portátiles, dos impresoras, varias memorias USB, tres juegos de CD con conferencias de Falun Gong y material informativo.

El Tribunal del Distrito de Hongkou condenó a la Sra. Shi a tres años de prisión por "utilizar una secta para socavar el cumplimiento de la ley", el pretexto habitual utilizado para inculpar y encarcelar a los practicantes de Falun Gong.

Mientras cumplía condena en el Equipo Cinco de la Prisión de Mujeres de Songjiang, la Sra. Shi fue sometida a lavado de cerebro y tortura. Las reclusas que la vigilaban inventaron unos movimientos de ejercicio y le ordenaron que los hiciera. Las reclusas habían sido entrenadas por los guardias de la prisión para "trabajar" específicamente a los practicantes de Falun Gong por todos los medios sin afrontar ninguna consecuencia.

A la Sra. Shi no se le permitía dormir hasta muy entrada la noche, pero la despertaban muy temprano por la mañana. Sólo le daban un poco de agua para cepillarse los dientes y lavarse la cara cada mañana. No había cuarto de baño en la celda, pero no se le permitía salir para ir al aseo del pasillo.

A veces, las reclusas la derribaban a propósito hasta que su rostro palidecía. Luego hacían una pequeña pausa antes de reanudar los golpes.

También la obligaban a sentarse en un pequeño taburete sin moverse durante largos periodos. Una vez se quejó de que no podía soportarlo más. La ignoraron diciendo que no pasaría nada mientras no muriera. Empezó a retorcerse y su cuerpo se puso rígido. Las reclusas la llevaron a la clínica de la prisión. Allí el médico le midió la tensión y los latidos del corazón. Después, las reclusas redujeron un poco los malos tratos.

También la obligaban a realizar trabajos forzados. Como a menudo no podía terminar la cuota de trabajo, era reprendida al menos una vez al mes durante al menos dos horas cada vez. Para evitar que la amonestaran, trabajó muy duro para intentar cumplir la cuota.

Detenida durante más de 50 días en 2016

La Sra. Shi fue detenida en 2016 tras ser denunciada por estudiar libros de Falun Gong en casa de otro practicante. El denunciante era el secretario del comité de calle de la zona residencial del practicante anfitrión.

La Sra. Shi fue llevada al Centro de Detención del Distrito de Huangpu. Un mes después fue puesta en detención administrativa y llevada a un centro de lavado de cerebro, donde permaneció otros 20 días.