(Minghui.org) Un residente de la ciudad de Linyi, provincia de Shandong, fue detenido en enero de 2022 por practicar Falun Dafa y condenado a un año de prisión. Como el Sr. Liu Jinguo se negó a renunciar a su fe, fue sometido a constantes torturas. Ahora está muy delgado, tiene las muñecas entumecidas, los pies y las piernas hinchados y es muy sensible al frío.

Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, es una disciplina espiritual basada en tres principios: Verdad-Benevolencia-Tolerancia, y está perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

El Sr. Liu, ex subdirector de la escuela primaria nº 4 del barrio de Linshu, en el condado de Linshu, era ampliamente reconocido como buen líder y maestro. Anteriormente había sido condenado a tres años de prisión por practicar Falun Dafa, tras una detención el 1 de marzo de 2016.

Mientras cumplía su primera sentencia en prisión, la Oficina de Educación y la Oficina de Asuntos Humanos y Sociales del condado de Linshu lo despidieron de su trabajo. Su padre, de 80 años, enfermó gravemente por preocuparse constantemente por él, y el hijo del señor Liu abandonó la escuela secundaria debido al estrés de la persecución.

Última persecución

El 11 de enero de 2022, el Sr. Liu estaba hablando con la gente sobre Falun Dafa cuando fue denunciado a la policía. Qiu Feng, director de la Oficina de Seguridad Interior, lo detuvo y lo llevó al Centro de Detención del condado de Linshu.

Durante el examen físico, el Sr. Liu fue arrastrado por las escaleras y golpeado en la cabeza y el pecho por un agente de policía por recitar "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". También le pusieron a la fuerza una vacuna y le sacaron sangre.

Recreación de la tortura: alimentación forzada

En el centro de detención local, el Sr. Liu dijo a la policía que en China no hay ninguna ley que criminalice a Falun Dafa y pidió entrevistarse con el director del centro de detención.

Como el Sr. Liu se negó a llevar el uniforme de los reclusos, los guardias lo alimentaron a la fuerza. También lo esposaron a la cama y se negaron a soltarlo cuando necesitaba ir al baño. Le obligaron a hacer sus necesidades en los pantalones y los guardias también se negaron a cambiar la ropa de cama mojada.

Li Fangchun, agente de la Oficina 610, reclutó a un grupo de personas y dispuso que le lavaran el cerebro al Sr. Liu en el centro de detención, a pesar de las restricciones pandémicas de la época. Cuando funcionarios de la Oficina de Seguridad Pública fueron a visitar el centro de detención, el Sr. Liu intentó denunciar la persecución que allí se estaba produciendo, pero fue en vano.

Posteriormente, el Tribunal del condado de Linshu condenó al Sr. Liu a un año y le impuso una multa de 5.000 yuanes. Apeló ante el tribunal intermedio, pero éste decidió mantener la sentencia original.

El Sr. Liu regresó a casa en enero de 2023. Debido a la persecución en el centro de detención, adelgazó mucho. Tiene las muñecas entumecidas y tiene que usar las dos manos para sujetar un bolígrafo y escribir cartas pidiendo justicia. Tiene los pies y las piernas hinchados y es sensible al frío. Su esposa pensó en divorciarse de él debido a la presión mental de la persecución, pero luego cambió de opinión.

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