(Minghui.org) Fui detenida por el oficial de policía Guan el 14 de julio de 2023, cuando estaba distribuyendo materiales informativos de Falun Dafa. El oficial Guan era subjefe del Equipo de Seguridad Doméstica del Departamento de Seguridad Pública del condado. Instaló una cámara de vigilancia oculta en el pasillo que conducía a su casa, y grabó mis actividades. Mantuve un pensamiento recto y me negué a cooperar tras mi detención. Pude regresar a casa con dignidad alrededor de las 10 de la noche.

Creer en Shifu y en el Fa

Cuando Guan me estaba arrestando, grité: "¡Shifu, ayúdame por favor!". Guan dijo: "Tu Shifu no puede ayudarte. Nadie puede ayudarte hoy". Guan me llevó a la comisaría, donde otros tres oficiales me interrogaron. Seguí enviando pensamientos rectos e ignoré sus preguntas. Pensé: "Ya que estoy aquí, eliminaré el mal en otras dimensiones, y desintegraré los elementos demoníacos y los espíritus comunistas que manipulan a estos oficiales, asegurándome que ya no cometan crímenes contra Dafa".

Un oficial me preguntó mi nombre y dirección. Le dije con calma: "No hablemos de esto ahora. Tome un descanso y escuchen. Falun Dafa está siendo perseguido, y usted sabe mejor que yo lo injustamente que se nos trata".

Él respondió ansioso: "No me digas esto. ¿Cómo te llamas?". Le ignoré y seguí enviando pensamientos rectos.

Me hicieron fotos, que utilizaron para buscar mi identidad en sus ordenadores. Al cabo de un rato, vinieron y me preguntaron si era de otro condado y si me llamaba Zhang Shufen. Entonces se dieron cuenta de que la persona que habían encontrado en el ordenador no se parecía en nada a mí. Guan me dijo: "Tu Shifu está aquí y te está fortaleciendo con gong". Se estaba burlando de mí, pero yo sabía que Shifu me estaba protegiendo.

A la hora de comer, los oficiales compraron comida y me ofrecieron un poco. Les dije: "Gracias, pero no tengo hambre".

El oficial me preguntó: "¿Por qué me das las gracias? Seguramente me odias en tu mente".

"No le odio", respondí. "Me culpo a mí misma por no haber hecho un buen trabajo, lo que les dio la oportunidad de crearse yeli (karma)". Todos se quedaron callados.

Después de comer, volvieron a preguntarme mi nombre y me hicieron fotos, ya que querían volver a buscar información sobre mí en sus ordenadores. Al final dieron con mi identidad. Me llevaron a mi casa y confiscaron la foto del Shifu que estaba en la pared, así como varios libros de Falun Dafa. Querían detenerme durante medio mes. Me dije en mi mente: "Lo que ustedes digan no cuenta. Mi Shifu tiene la última palabra".

Mi marido preguntó si era posible de no detenerme. Le dijeron que tenía que firmar una declaración de garantía. Mi marido me pidió que la firmara, pero me negué. "Si no me hubiera cultivado en Falun Dafa, habría muerto hace diez años. No voy a firmar nada".

Otro agente trató de convencerme para que firmara, así que le dije: "¿No se supone que los policías enseñan a la gente a ser buenos ciudadanos? ¿Por qué quieren que sea una persona ingrata?". Se quedó sin palabras.

Me llevaron de nuevo a la comisaría, me hicieron un examen físico y realizaron otros trámites. Después me llevaron a un centro de detención. De camino allí, me hicieron fotos y las enviaron a su grupo social para obtener "logros políticos". Sin embargo, el centro de detención se negó a aceptarme porque tenía la tensión muy alta. La policía me llevó tres veces al hospital para que me tomaran la tensión, y cada vez que me la tomaban era más alta. Al final tuvieron que dejarme ir a casa. Oí que el oficial Guan le decía a otro: "Le suplicó a su Shifu que la rescatara y ahora está libre". Nos hemos adelantado al enviar sus fotos a nuestro grupo social".

Mantuve la calma durante todo el proceso. No tuve miedo, no odié a la policía, ni le guardé rencor, y me deshice de cualquier pensamiento preocupante. Shifu me ayudó y disolvió esta persecución contra mí. Llegué a comprender que si hubiera odiado a estos policías (que también eran vidas que esperaban la salvación) y hubiera temido sufrir pérdidas, tal vez este no habría sido el resultado.

Negar los arreglos de las viejas fuerzas

Los policías que llevan mucho tiempo persiguiendo a los practicantes de Dafa han acumulado muchas formas de engañar a los practicantes de Dafa. A veces amenazan al practicante. Si el practicante está asustado, pueden hacer cosas que un practicante de Dafa no debería hacer. A veces también utilizan tácticas suaves para engañar a los practicantes para que se sientan agradecidos con ellos, lo que resulta en malas decisiones.

Cuando estaban a punto de llevarme al centro de detención, parecían amables, y me recordaron que me cambiara de ropa y llevara las necesidades diarias. Les dije que no hacía falta. Sostuve un pensamiento: "Ese no es lugar para mí. Lo que tú digas no cuenta". Si hubiera estado de acuerdo con ellos, me hubiera cambiado de ropa y hubiera traído artículos de primera necesidad, habría estado de acuerdo con las disposiciones de las viejas fuerzas, y habrían conseguido perseguirme.

Los practicantes de Dafa deben seguir los arreglos del Shifu. Sin embargo, los practicantes deben tener pensamientos rectos para que sean capaces de reconocer y negar las disposiciones de las viejas fuerzas.

Mirar hacia dentro

Una vez superada esta situación, me pregunté por qué había sucedido. A lo largo de los años, nunca había dejado de estudiar el Fa, hacer los ejercicios, enviar pensamientos rectos y hablar a la gente sobre Falun Dafa y la persecución. Había hecho todo lo posible para ayudar a los compañeros practicantes cuando era necesario, y había pasado por muchas tribulaciones, incluyendo pruebas de vida o muerte. ¿Cuál fue la razón por la que me enfrenté a esta persecución?

Tuve un sueño tres días antes de que la policía me detuviera. En el sueño, me disponía a ir a la escuela, pero un león y una leona estaban delante de mi puerta impidiéndome el paso. No querían que me fuera. Mi padre miraba desde un lado, sonriendo, pero no intervenía. Los dos leones desaparecieron tiempo después. Comprendí que probablemente me esperaba una prueba. Si la superaba bien, conseguiría mejorar en mi cultivación y el mal sería eliminado.

Después de ser detenida, mantuve firmes pensamientos de rectos y no cooperé con la policía. Regresé a casa sana y salva y con dignidad. Pensé que debería haber superado bien la prueba. Entonces, ¿por qué los leones me impidieron ir a la escuela? ¿Podría ser que el mal de otras dimensiones estuviera creando separaciones entre nuestros practicantes?

Más tarde se produjo una situación similar en nuestro grupo de estudio de Fa. El segundo día le conté a un compañero lo que me había pasado el día anterior. Le dije que dejaría de ir al grupo de estudio de Fa temporalmente, para proteger a otros practicantes. Dos días después, en el grupo de estudio del Fa, la practicante mencionó mi situación al grupo y pidió a los otros practicantes que enviaran pensamientos rectos para apoyarme. Alguien quería pedir más información a mi marido y pidió a los demás practicantes que continuaran con el estudio del Fa antes de marcharse. Sin embargo, todos los practicantes se fueron y el estudio de Fa terminó.

Algunas observaciones y reflexiones

Algunos de nuestros practicantes han adquirido un hábito a lo largo de los años. Cuando escucharon que un compañero practicante estaba siendo perseguido o sufría yeli (karma) de enfermedad, primero acusaron al practicante de sus brechas, implicando que la persecución había ocurrido porque el practicante no lo había hecho bien. Shifu cuida a los practicantes de Dafa. Si un practicante tiene apegos, debe corregirse mediante la cultivación. Sin embargo, estos apegos no son excusa para que el mal los persiga.

Creo que, si un practicante es perseguido, otros practicantes deberían formar un solo cuerpo con fuertes pensamientos rectos para apoyarlo, negar los arreglos de las viejas fuerzas y ayudarlo a encontrar sus apegos y eliminarlos. Los practicantes no deben culpar ciegamente al practicante, lo que podría agravar su tribulación. ¿Cómo es posible que un cultivador no tenga defectos?

Muchos practicantes no están dispuestos a interactuar con practicantes que sufren un yeli de enfermedad grave, alegando que se sentirían incómodos si lo hicieran. Simplemente ven a las viejas fuerzas perseguir al practicante que está en problemas, diciendo que carecen de la capacidad de intervenir. Ayudar a los practicantes en tribulaciones es en realidad solo un caso de leer el Fa con ellos y compartir pensamientos sobre el Fa con ellos, para ayudarlos a encontrar sus defectos y animarlos a mantener pensamientos rectos. La rectificación del Fa está llegando a su fin. Si todavía tenemos una mentalidad egoísta tan fuerte y las características del nuevo universo son desinteresadas y completamente para los demás, ¿podemos entrar en el nuevo universo?

Mi mentalidad de resentimiento

Todavía guardo mucho resentimiento. Estuve fuera de nuestra área tres años. Durante ese tiempo, casi todos los practicantes de mi grupo de estudio del Fa sufrieron diferentes grados de persecución. Dos practicantes ancianos sufrieron yeli de enfermedad grave. Se olvidaron de cómo hacer los ejercicios, no podían leer el Fa e incluso olvidaron cómo ofrecer incienso a Shifu. Otro practicante dejó de cultivarse debido al sentimentalismo familiar. Pedí a otros practicantes que los ayudaran, pero nadie en el condado me ayudó. La indiferencia de los practicantes me hizo sentir tan resentida que no quise verlos después de mi regreso.

Durante varios meses después de mi regreso, visité a los practicantes que padecían yeli de enfermedad, con la esperanza de ayudarlos. Cuando lograron alguna mejora, algunos practicantes vinieron a halagarme, diciendo cosas como: "Necesitamos gente como tú". Algunos practicantes se unieron a nuestro grupo de estudio del Fa e hicieron comentarios como: “Este es un buen grupo. Al unirse a este grupo, uno mejora rápidamente”. Algunos incluso dijeron: “Me sentí como un niño sin madre mientras no estabas”. Escuchar todo esto me hizo sentir muy incómoda. Si un practicante no logra mantener su xinxing y disfruta de los halagos, podría experimentar interferencia demoníaca.

Sé que debo desechar mi resentimiento a través de la cultivación, pero también quiero señalar que este tipo de "seguir a alguien" en vez de seguir el Fa es realmente perjudicial para los practicantes.

Insto a los compañeros practicantes a estudiar el Fa y seguir el Fa diligentemente. Un cultivador debe seguir su propio camino y hacer todo según el Fa. Las experiencias de otros practicantes sirven sólo como referencia. Hacerlo así beneficia a otros y a uno mismo, y no da a las fuerzas viejas ninguna excusa para perseguirnos.