(Minghui.org) No pude dejar de llorar cuando me enteré del fallecimiento de la Sra. Zou Xiuju el 10 de agosto de 2023. La conocí mientras estábamos encarceladas por compartir nuestra fe en Falun Dafa.

La primera vez que vi a la Sra. Zou fue en mayo de 2005, cuando estaba detenida en el tristemente famoso Campo de Trabajo Forzado de Masanjia. Me llevaron a una habitación de la tercera planta del edificio y vi a alguien limpiando el suelo. En cuanto nos miramos, me sonrió. Luego levantó la mano y cerró el puño delante del pecho. Sabía que también era practicante de Falun Dafa y me estaba animando a mantenerme firme. Aunque no podíamos hablarnos porque las reclusas nos estaban mirando, el contacto visual que teníamos era más que mil palabras. Me alegré mucho, porque era la primera practicante que veía en 22 meses durante aquel oscuro periodo.

Volví a ver a la señora Zou menos de un año después. Sólo entonces supe que se llamaba Zou Xiuju. Cuando la guardia Ma Jishan y otras la llamaron por su nombre mientras abusaban verbal y físicamente de ella, me colgaron de las muñecas en una habitación cercana. Las guardias cerraron entonces la puerta para torturarla y sólo por el informe de Minghui.org me enteré de la brutal tortura de alimentación forzada y ahorcamiento que sufrió en aquel momento.

A finales de 2006, el campo de trabajo reasignó a distintos pabellones a los practicantes que inicialmente estaban recluidos juntos. Aunque yo no estaba en el mismo grupo que Zou, a menudo me encontraba con ella durante las pausas para ir al baño. Las reclusas que nos vigilaban seguían sin permitirnos hablar entre nosotras y a veces nos gritaban, pero conseguimos encontrar formas de comunicarnos y aprendimos más sobre cómo resistían a la persecución los practicantes del Campo de Trabajo Forzado de Dalian. Nosotras también empezamos a resistir la persecución y la tortura se alivió durante un tiempo.

Aunque mis interacciones con la Sra. Zou fueron muy limitadas, la empatía que sentíamos la una por la otra era muy especial para mí. Aunque por ahora nos haya dejado, sigue viva en mi corazón.

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