(Minghui.org) Recientemente me di cuenta de que durante todos estos años había desarrollado la búsqueda del éxito y la fama al realizar proyectos de Dafa.

El apego llegó a ser tan fuerte que la cultivación llegó a ser menos importante para mí. Estaba lleno de orgullo y disfrutaba de los elogios de los compañeros, pero no podía aceptar ninguna crítica u opinión diferente.

Cuando los demás practicantes mencionaban algo que no me gustaba oír, afloraba mi envidia, vanidad y mentalidad competitiva. Como resultado, tuve algunos conflictos con otros practicantes, que afectó lo que hacíamos para salvar a la gente.

Shifu dijo:

“Pacificando el exterior por medio de cultivar el interior” (FALUN FOFA, Escrituras esenciales para mayor avance).

Shifu también dijo:

“Para un cultivador, mirar hacia adentro es una herramienta mágica" (Enseñando el Fa en el Fahui Internacional de Washington DC 2009, Colección de Enseñanzas del Fa, Vol. IX).

Sin embargo, cuando surgían conflictos, no miraba hacia adentro y permitía que mis apegos interfirieran con los proyectos de Dafa y con los compañeros practicantes.

No mantuve un corazón puro, sino que traté de obtener ganancias de los proyectos de Dafa para satisfacer mis apegos, en ese momento no estaba al nivel de un cultivador de Falun Dafa.

Ahora que miré adentro e identifiqué mis deficiencias, recordé lo que también dijo Shifu:

"En realidad, es el Fa el que salva a la gente y solamente es el Maestro quien puede hacerlo"(Nunca hables desenfrenadamente, FALUN FOFA, Escrituras esenciales para mayor avance).

Mi entendimiento es que no debemos albergar en el corazón ningún tipo de ego. Hacemos proyectos de Dafa no para validarnos, sino para validar a Dafa. Solo si abandonamos el apego al ego y validamos Dafa, seremos dignos de ser cultivadores de Dafa y podremos cumplir con nuestros votos de salvar seres conscientes. Al fin y al cabo, nosotros no estamos en este mundo para buscar fama y disfrutar de la vanidad.

Nota del editor: El artículo representa únicamente la opinión del autor y está destinado a compartir entre los practicantes según la enseñanza del Fa: “…comparte en el aprendizaje y comparte en la cultivación…” (Cultivación sólida, Hong Yin).