Experimentando la gracia salvadora de Dafa

(Minghui.org) Practico Falun Dafa desde hace más de 25 años. He superado muchas dificultades y he mantenido mi promesa de darle a conocer a más seres conscientes que "Falun Dafa es bueno, Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno" para que puedan ser salvados durante la gran catástrofe.

Soñaba con casarme con un hombre que me amara y se llevara bien conmigo el resto de mi vida. Sin embargo, después de casarme, ese no fue mi destino. Mi suegra era muy egoísta. No le importaban los sentimientos de los demás, incluidos los de sus propios hijos e hijas. Nunca me consideró un integrante de la familia, y poco a poco fui sintiendo resentimiento en mi corazón.

Vivíamos juntos, y yo trabajaba en el campo con mis suegros todos los días. Pero mi suegra siempre se escondía de mí cuando compartían la comida.

Una tarde, regresé de trabajar en el campo y mi suegra ya había cocinado carne de cerdo. Toda la familia, incluidos mis suegros y los hermanos de mi esposo, cenaron juntos sin pedirme que los acompañara.

Me enfadé mucho y me fui a la cama sin comer nada.

Después de dar a luz a mi hija, mi mamá me cuidó y mi suegra no me ayudó en nada.

Mi esposo tampoco se portaba bien conmigo, sobre todo cuando di a luz a dos hijas (en China se prefieren los hijos que a las hijas). Discutíamos todos los días y a veces me pegaba.

Me sentía agredida por mis suegros, y no había nadie con quien pudiera hablar. Llegué a mi límite mental y me planteé terminar con mi vida. En ese momento, comprendí por qué la gente se suicida. No sabía el sentido de la vida y empecé a darme por vencida.

También comencé a salir a jugar a las cartas y regresaba a casa muy tarde. A veces no podía entender por qué todo lo que me rodeaba estaba mal. Soy bonita y capaz de hacer todo en casa. Sentía que la vida era muy injusta.

Cuando mi suegra repartió los bienes de la familia, no me dio la mesa redonda que me había prometido. Solo me dio cuatro cuencos, seis platos y dos pares de palillos.

A la mañana siguiente, ni siquiera pude preparar el desayuno, ya que no tenía ni ollas ni siquiera una espátula. Empecé a odiar a mi suegra y a criticarla a sus espaldas todo el tiempo.

La gracia salvadora de Dafa

Después de empezar a cultivarme en Dafa, comprendí las enseñanzas sobre las relaciones kármicas y que tenía deudas con las personas en vidas pasadas. Después de iluminarme a esto, mi resentimiento hacia mi suegra desapareció de repente, y me sentí muy relajada.

El Maestro Li (fundador de Falun Dafa) nos pide que seamos amables con todos, y más aún con la familia. Dafa me enseñó a ser sincera, compasiva y tolerante, así que ahora soy muy amable con mi suegra. Nos mudamos de la casa de mi suegra después de construir una nueva casa. Mi suegra venía a menudo a cenar a mi casa, y yo la trataba como una invitada y le preparaba muchas comidas.

A menudo le decía que viniera a mi casa si no quería cocinar. No probé una sola comida hecha por mi suegra durante más de 30 años, pero estoy muy tranquila y ya no me siento desequilibrada por eso.

En mi familia conviven cuatro generaciones. Como practicante de Dafa, respeto a los mayores y cuido a los niños. Disfrutamos mucho de la armonía familiar. Si no hubiera cultivado Dafa, mi familia se habría desintegrado.

El Maestro nos pide que tomemos el dinero ligeramente, que demos un paso atrás cuando encontremos conflictos y que no nos peleemos con la gente.

Cuando vendimos nuestras dos casas viejas por un total de 40.000 yuanes (6.040 dólares), la costumbre de nuestra ciudad natal era que mi esposo debía recibir 20.000 yuanes (3.020 dólares), y su hermano los otros 20.000 yuanes (3.020 dólares).

Sin embargo, mi suegra y la hermana de mi esposo nos pidieron que les diéramos dinero. Así que les di 10.000 yuanes a cada una de los 20.000 que recibimos por la venta de las dos casas.

Nuestros ingresos eran reducidos, pero no quise incomodarles, aunque tuviera que sufrir un poco. Me esforzaba por ser considerada. Desde luego, no sería así si no practicara Dafa.

En otro ejemplo, compartíamos una casa antigua con el hermano de mi esposo. Después de construir la nueva casa, le dejamos la antigua al hermano de mi esposo, que vale por lo menos 30.000 yuanes (4.530 dólares).

Él nos ayudó y cuidó a nuestros hijos cuando mi esposo y yo nos vimos obligados a abandonar la casa para evitar ser arrestados ilegalmente debido a mi práctica de Falun Dafa. Le agradecí todo lo que había hecho y quise devolvérselo.

Mi familia se beneficia de Dafa

Mi hija mayor sufría de bronquitis desde que nació. Sin embargo, después de empezar a cultivarme en Dafa, ella recitaba a menudo "Falun Dafa es bueno; Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno" y su enfermedad se curó. Ahora mis dos hijas practican Falun Dafa.

Mis dos nietas tienen ocho y seis años. También recitan a menudo "Falun Dafa es bueno" y rara vez se enferman.

Siete integrantes de nuestra familia se cultivan en Dafa, y los que no lo practican creen que "Falun Dafa es bueno y Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno". Todos han sido bendecidos por Dafa.

La nuera de mi tía padecía enfermedades muy raras. No importaba cuántos médicos viera o cuántas medicinas chinas tomara, todos sus esfuerzos fueron en vano. Más tarde empezó a recitar "Falun Dafa es bueno, Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno", y todas sus enfermedades se curaron.

La nuera de mi tío no podía quedar embarazada después de muchos años. Entonces escuchó que recitar "Falun Dafa es bueno" es muy efectivo para cosas como esa. Así que se arrodilló en secreto delante de la imagen del Maestro, pidiéndole que la bendijera para poder tener un hijo. Después de un año, dio a luz a un niño sano. Toda la familia se alegró mucho.

Mi hermano también ha practicado Dafa durante tres años. Una vez, regresó a casa con su esposa y su hijo después de visitar a su suegro. Cuando estaba a mitad de camino, descubrió que el depósito de gasolina estaba casi vacío. No se lo hizo saber a su esposa y siguió recitando "Falun Dafa es bueno; Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno". También ponía música de Dafa en el auto. Cuando llegaron a casa, el indicador de combustible mostraba que su nivel de combustible había aumentado en lugar de disminuir.

Aclarar la verdad durante la detención

Una de mis responsabilidades como practicante de Falun Dafa es salir a distribuir información que le diga a la gente la verdad sobre esta maravillosa práctica.

Esto tiene el efecto de salvar a los seres conscientes, ya que no quiero que pierdan sus vidas durante la gran catástrofe. Como resultado de mis esfuerzos por esclarecer la verdad, mi esposo y yo fuimos detenidos y condenados ilegalmente.

En el centro de detención, sentí compasión por los detenidos, ya que no tenían suficiente comida y ropa. Pedí a mi familia que enviara más comida y ropa para las personas que compartían la misma celda que yo. Todos se sintieron muy conmovidos por mi amabilidad.

Les enseñé la frase "Falun Dafa es bueno, Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno". Algunos incluso estudiaron el Fa y practicaron los ejercicios conmigo.

En el cumpleaños del Maestro Li, le pedí a la gente que me compraran dos manzanas. Los internos de mi habitación también sabían que era el cumpleaños del Maestro, así que también compraron secretamente pescado enlatado y bocadillos para celebrar el cumpleaños del Maestro. Todos apretamos las palmas de las manos en heshi para mostrar nuestro respeto y nos inclinamos ante la foto del Maestro.

Todos los reclusos anhelaban que los ayudaran. No sabían que todavía hay gente tan buena como los practicantes de Falun Dafa en este mundo.

Estas personas tenían buena naturaleza original. Sin embargo, muchos de ellos no creen en nada y no entienden las limitaciones morales debido a la educación atea del Partido Comunista Chino.

No creen que haya dioses y Budas en este mundo, y no saben que serán castigados por cometer actos incorrectos. Luchan por obtener beneficios personales a costa de perjudicar a los demás.

Un chico de menos de 20 años era un asesino y fue brutalmente torturado en el centro de detención.

Pedí a la policía que dejara de golpearlo. El oficial de policía dijo: "Todos son prisioneros. Solo ustedes, los practicantes de Falun Dafa, han sido tratados injustamente y no deberían estar aquí".

Gracias Maestro por su compasiva salvación. ¡Heshi!

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