Resistir la persecución proactivamente, en lugar de soportarla pasivamente

(Minghui.org) Mi padre me contó una historia que me pareció relacionada con algún fenómeno de la actual rectificación del Fa.

En un pueblo montañoso, unos lobos feroces se comieron a la hija de un anciano. Varios jóvenes del pueblo fueron a buscar a los lobos y encontraron la guarida del lobo en una cueva. Cuando entraron, se quedaron sorprendidos por una cosa: los lobos, que eran tan feroces, parecían estar muy asustados. Se escondieron unos detrás de otros y al final los capturaron a todos.

La gente puede tener miedo cuando ve lobos aparentemente fieros, pero en realidad, los lobos también tienen miedo de la gente.

Esto me recuerda a cuando la policía persigue a los practicantes de Falun Gong, ya que el resultado puede ser diferente dependiendo de si uno soporta pasivamente la persecución o elimina proactivamente el mal.

Recuerdo haber leído un artículo en el sitio web de Minghui hace unos años. En el artículo, un practicante de Falun Gong se dio cuenta de que alguien lo estaba vigilando en un coche. Se acercó y preguntó: "¿Qué haces aquí?". Esa persona se asustó tanto que huyó.

Tuve la siguiente experiencia después de que me detuvieran por defender mi fe. Después de iniciar una huelga de hambre para protestar por la persecución, los guardias me alimentaron a la fuerza. Un día, mientras me alimentaban a la fuerza, pedí ayuda al Maestro: "No puedo soportar más esto". Con la ayuda del Maestro, pude arrancar la sonda de alimentación, incluso cuando todavía estaba esposado. Cuando los guardias vieron que empezaba a resistirme a la alimentación forzada, me soltaron inmediatamente.

También leí otra historia sobre un policía que interrogaba a un compañero practicante. El practicante se negó a responder y aceptó el contragolpe señalando que el agente intentaba sacarle una confesión. El agente se abatió inmediatamente y se marchó.

Cuando nos enfrentamos a los perseguidores en lugar de aguantar pasivamente, podemos eliminar proactivamente el mal que hay detrás de los represores. Deberíamos exigir conocer la base legal de la persecución, sus datos personales, quién les instruyó y si tienen algún documento o instrucción que respalde sus acciones, en lugar de dejarnos interrogar pasivamente por ellos.

Creo que podemos detener eficazmente a los agentes individuales de la Oficina 610, a los miembros del personal comunitario y a los agentes de policía que participan en la persecución, recopilando sus datos personales y exponiéndolos.

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Nota del editor: El artículo representa únicamente la opinión del autor y está destinado a compartir entre los practicantes según la enseñanza del Fa: “…comparte en el aprendizaje y comparte en la cultivación…” (Cultivación sólida, Hong Yin).

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