(Minghui.org) El Sr. Zhao Liang, de la ciudad de Huludao, provincia de Liaoning, tenía 21 años cuando el Partido Comunista Chino inició la persecución de Falun Dafa en julio de 1999. Como se negó a abandonar su práctica, las autoridades lo internaron en un campo de trabajo forzado en 2000 y 2004 durante un total de 4,5 años. Siguió siendo un practicante inquebrantable, y un juez lo condenó a diez años de prisión en 2008. A lo largo de los años ha sido sometido a brutales torturas.

Los padres, el hermano mayor, la cuñada y la sobrina del Sr. Zhao adoptaron Falun Dafa, después de ver cómo él se beneficiaba de la práctica. De todos los miembros de la familia, la persecución del Sr. Zhao, que ahora tiene 44 años, fue la más severa. Lo siguiente es un relato parcial de lo que sufrió y de cómo fue torturado desde 2008.

La detención

Una docena de agentes del Departamento de Policía del Distrito de Lianshan y de la Comisaría de Gangtun irrumpieron en el domicilio del Sr. Zhao, a las 6 de la mañana del 25 de febrero de 2008, para detenerlo. Los agentes esposaron en su espalda, a su sobrina, estudiante de secundaria, porque intentó detener a la policía. La policía también amenazó con detenerla a ella.

La madre de Zhao, que vivía con él, se desmayó del miedo y tuvo convulsiones. Después de llevárselo, el resto de los agentes, sin mostrar ningún documento, saquearon su casa y confiscaron sus libros de Falun Dafa, folletos, DVD, sus computadoras portátiles, impresoras, una cámara digital, reproductores de música y un disco duro, así como muchos materiales de oficina que utilizaba para imprimir materiales de Falun Dafa en casa.

Torturas en el Centro de Detención de Huludao

Los agentes llevaron al Sr. Zhao a la Comisaría de Gangtun y después al Centro de Detención de la ciudad de Huludao. Liu Junke, un guardia que lo había torturado cuatro años antes, lo reconoció y pidió que le asignaran el manejo de su celda. Liu instigó a los reclusos a pegarle y golpearle la cara y las manos con zapatos todos los días.

El dorso de las manos del Sr. Zhao se oscureció y se hincharon. Los reclusos le ataban los dedos y tallaban con un cepillo de dientes entre sus dedos, de un lado a otro, hasta que su carne se desgarraba y sus manos se cubrían de sangre. También le privaron de sueño.

Zhao inició una huelga de hambre para protestar por la persecución. También se negó a pasar lista o a vestir el uniforme. Liu y otras dos personas lo metieron en un viejo autobús que estaba aparcado lejos, sin cámaras de vigilancia alrededor, y empezaron a darle bofetadas hasta que la boca sangraba profusamente.

Unos días después llamaron a un médico para que lo alimentara a la fuerza. Los reclusos lo ataron a una silla de hierro, le sujetaron la cabeza hacia atrás y le introdujeron una sonda en el estómago, lo que le causó un dolor tremendo. Lo alimentaban a la fuerza dos veces al día. En una ocasión, Wei Guozhong, director del centro de detención en aquel momento, indicó a los reclusos que le echaran unas cuantas botellas de cerveza en el estómago, y dijo: "Como Falun Dafa no permite beber alcohol, te alimentaré a la fuerza con alcohol".

En abril de 2008, el centro de detención se fusionó temporalmente con el Centro de Detención de Suizhong. El Sr. Zhao fue trasladado allí y continuó siendo alimentado a la fuerza durante tres meses. El juez Wei Aijun, del Tribunal del Distrito de Lianshan, lo condenó a finales de mayo de 2008 a diez años de prisión. Las autoridades no informaron a su familia del juicio, y se limitaron a comunicarles el veredicto después.

Zhao recurrió ante el Tribunal Intermedio de la ciudad de Huludao y su familia contrató a dos abogados para que lo defendieran. Zhao dijo a los abogados que quería declararse inocente y que no renunciaría a su fe. Las autoridades presionaron a sus abogados y uno de ellos fue forzado a presentar una declaración de culpabilidad por él. Después de que el juez Gao Ensi del Tribunal Intermedio confirmara el veredicto original, Zhao fue trasladado a la Prisión de Jinzhou en junio de 2008.

Negación de visitas y privación del sueño en la Prisión de Panjin

Tras un mes en la Prisión de Jinzhou, Zhao fue trasladado a la Prisión de Panjin, donde no se le permitió llamar a casa. Según un recluso que ayudó a los guardias a perseguir a los practicantes, había una orden de los superiores que prohibía a los practicantes de Falun Dafa hacer llamadas telefónicas si se negaban a renunciar a la práctica. También se le restringió la posibilidad de comprar artículos de primera necesidad o comida extra, a pesar de que la prisión solo proporcionaba comida ordinaria.

La prisión intensificó la tortura en noviembre de 2014, intentando transformar a los practicantes inquebrantables. Una docena de guardias llevaron al Sr. Zhao a una habitación totalmente cerrada y lo ataron a un dispositivo de tortura en forma de silla de hierro. Le obligaron a mantener los ojos abiertos en todo momento y le pusieron sin parar vídeos que calumniaban a Falun Dafa. Se declaró en huelga de hambre para protestar por la tortura. Lo mantuvieron inmovilizado en la silla con los ojos abiertos durante seis días seguidos. Se desorientó y apenas estaba consciente. Cuando lo bajaron de la silla, tenía las piernas demasiado hinchadas para caminar.

El Sr. Zhao fue obligado a trabajar en un taller clandestino, cosiendo el interior de balones de fútbol, desde principios de 2015 hasta que fue liberado el 24 de junio de 2017.