Reflexiones sobre la divulgación de rumores

(Minghui.org) El Partido Comunista Chino (PCCh) tiene fama de engañar a la gente para conseguir sus propios objetivos. Dice una cosa y hace otra, lo que hace que sus comunicados oficiales sean poco fiables. Además, el PCCh a menudo da un giro de 180 grados a sus anuncios anteriores, dejando a los ciudadanos sin información sobre los hechos. Sin embargo, los funcionarios del PCCh pueden revelar información privilegiada a sus familiares y/o amigos, quienes, a su vez, pueden filtrar la información a sus allegados.

Esta "información privilegiada" suele ser cierta. Para evitar ser engañados por el PCCh, a los ciudadanos chinos les gusta buscar información privilegiada, o "rumores", como los califican despectivamente las autoridades. Poder acceder a esos "rumores" se ha convertido en un indicador de las conexiones y la capacidad de una persona. Los que reciben esa información se sienten privilegiados, mientras que los que la transmiten suelen utilizarla para obtener beneficios personales. En cuanto aparece un nuevo "rumor", se difunde rápidamente.

Un ejemplo es la información sobre la pandemia. Antes de que las agencias gubernamentales a varios niveles impusieran el bloqueo, la "información privilegiada" que predecía un bloqueo inminente llevó a la gente a hacer acopio de alimentos, medicinas y otros artículos de primera necesidad. Aunque las autoridades refutaron repetidamente los "rumores", pocos hicieron caso a las desmentidas y los cierres terminaron imponiéndose.

Bajo el engañoso régimen del PCCh, en el que los ciudadanos comunes e incluso los funcionarios de bajo nivel pueden ser engañados en cualquier momento, la gente a menudo tiene sed de información privilegiada para protegerse de las políticas perjudiciales del régimen. Aunque la información no le concierna directamente a uno, no está de más conocerla "por si acaso", suele decir la gente.

La popularidad de la difusión de rumores en China es un subproducto de la cultura del Partido. Como practicantes de Falun Dafa, tenemos que dejar de lado cualquier tendencia a transmitir rumores.

El Maestro dijo:

“Además hay quienes difunden rumores; él le transmite a aquel, ella le transmite a aquella, hablando allí con gusto y deleite, como si tuvieran mayor acceso a la información. Como si tantos de nuestros estudiantes no tienen su claridad y no saben tanto como él; ya se ha hecho natural en él y tal vez lo hace inconscientemente. En su conciencia latente simplemente tiene este tipo de mentalidad de ostentar, de otro modo, ¿para qué transmite estos rumores?” (Sexta Lección, Zhuan Falun).

Al vivir bajo la cultura del Partido en la China comunista, muchos practicantes de Dafa se han acostumbrado a difundir rumores sin darse cuenta de que son perjudiciales. Por ejemplo, a algunos practicantes les gusta preguntar quién presta apoyo técnico, quién tiene un centro de producción de materiales de aclaración de la verdad en casa y quién organiza sesiones de estudio en grupo en sus hogares. Después de conocer esa información, pueden compartirla casualmente. Como consecuencia, algunos practicantes han sido detenidos y algunos centros de producción de materiales han sido saqueados por la policía.

Además, algunos practicantes han logrado burlar el bloqueo de Internet y pueden leer noticias sin censura. Esta información es fácilmente accesible fuera de China, pero no para los chinos debido a la censura del PCCh. Estos practicantes comparten lo que leen para presumir de su capacidad de acceder a información que otros desconocen.

Algunos practicantes que han salido de China siguen obsesionados con transmitir rumores y cotilleos, confundiendo a otros practicantes y a la gente corriente de la sociedad occidental.

Si un discípulo de Falun Dafa está obsesionado con obtener información privilegiada y difundir habladurías, podría ser que él o ella no crea verdaderamente en las enseñanzas de Dafa que han sido publicadas, y todavía esté apegado a mostrar sus conexiones o a buscar un atajo en la cultivación. Sin embargo, independientemente de la situación, este no es el comportamiento de un verdadero discípulo de Dafa.

Los practicantes que salieron de China y se mudaron a otro país han vivido en dos sociedades diferentes y probablemente son capaces de reconocer la influencia de la cultura del Partido. Pero sin un esfuerzo sólido para desprenderse de la influencia de la cultura del Partido y mejorar constantemente, ese discernimiento no significa nada.

En los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista se dice: "La cultura del Partido es el medio ambiente que necesita para sobrevivir la vil secta comunista. Como vimos, existen algunos indicios de que el PCCh puede perder la posesión de sus administraciones estatales; en cambio, parece más difícil quitarle la posesión de la mente del pueblo, pero este es el único camino posible para arrancar de raíz la hierba mala del comunismo".

Limpiar las influencias de la cultura del PCCh y eliminar todos esos elementos de nuestras mentes es importante para nosotros como discípulos de Falun Dafa. También es muy urgente.

Nota del editor: El artículo representa únicamente la opinión del autor y está destinado a compartir entre los practicantes según la enseñanza del Fa: “...comparte en el aprendizaje y comparte en la cultivación…” (Cultivación sólida, Hong Yin).