(Minghui.org) La sección suiza de la Sociedad Internacional de Derechos Humanos (SIDH) y practicantes de Falun Gong presentaron más de 8.000 firmas al Gobierno Federal Suizo el 8 de diciembre de 2022, en vísperas del Día Internacional de los Derechos Humanos. En la petición se pedía al Gobierno suizo que condenara públicamente la sustracción de órganos a practicantes vivos de Falun Gong realizada por el Partido Comunista Chino (PCCh) y que tomara medidas para poner fin a la persecución a Falun Gong por parte del PCCh.

Silvan Fedier (primero por la derecha) de ISHR y Frank Moser (segundo por la derecha), practicante de Falun Gong, presentan 8000 firmas al Gobierno Federal Suizo pidiendo ayuda para acabar con la sustracción de órganos y la persecución a Falun Gong por parte del PCCh.

ISHR: Hay que actuar para detener la sustracción de órganos del PCCh

En una declaración a los medios de comunicación, la sección suiza del SIDH afirmó que, desde que en 2006 se destaparon los crímenes del PCCh de sustracción de órganos a personas vivas, todo tipo de pruebas han demostrado que el PCCh realmente extrae los órganos de detenidos vivos para obtener enormes beneficios. Las víctimas incluyen cristianos, uigures y practicantes de Falun Gong.

El ISHR citó el informe del veredicto del Tribunal de China en Londres en marzo de 2020, encontró que el PCCh ha implementado la extracción de órganos a personas vivas avalada por el Estado durante mucho tiempo, y los practicantes de Falun Gong han sido las principales víctimas. A pesar de las numerosas pruebas de estos crímenes, el PCCh se ha negado a admitir su culpabilidad y no ha permitido ninguna investigación independiente sobre el origen de los órganos.

En la declaración también se afirma que, aunque todavía no está claro cuántas víctimas han muerto como consecuencia de la sustracción de órganos a personas vivas, el PCCh lleva más de 20 años dedicándose a la extracción de órganos a personas vivas. El conjunto de pruebas es convincente y suficiente para que el gobierno suizo tome medidas para criticar públicamente al PCCh por sus crímenes y pedirle que ponga fin a su persecución.

Silvan Fedier, representante del SIDH, dijo que cada vez más expertos médicos, políticos y ciudadanos han tomado conciencia del delito de sustracción de órganos cometido por el PCCh.

“Es hora de tomar medidas reales para detener los crímenes del PCCh. Todos deberían tomar medidas, ya sean políticos, personas del ámbito médico o farmacéutico u otras organizaciones e instituciones. Debido a que este crimen es tan terrible, se pierden vidas todos los días. Estos asesinatos deben cesar y no pueden dejarse sin control”, afirmó.

Los crímenes del PCCh deben hacerse públicos

Frank Moser, practicante de Falun Gong que acompañó a ISHR a presentar las firmas, dijo que ha notado que cada vez más políticos y profesionales se han dado cuenta de que la sustracción de órganos del PCCh existe realmente. Moser dijo que era importante hacer pública la persecución del PCCh contra los practicantes de Falun Gong, especialmente sus atrocidades de la extracción de órganos a personas vivas.

Apuntó que la persecución del PCCh a Falun Gong le recordaba la reacción del público ante los campos de concentración nazis. Cuando la gente se enteró de la existencia de los campos de concentración, les resultaba difícil de creer, inimaginable, y nadie podía comprender el alcance de los crímenes. La situación real no se conoció hasta después de la caída de los nazis, pero para entonces ya era demasiado tarde para salvar las vidas de los perseguidos.

Moser también dijo que, hablando con los transeúntes, ha comprobado que después de que la gente se entera de los crímenes del PCCh, todos están de acuerdo en que hay que actuar para ponerles fin.

Sensibilización sobre la brutal persecución del PCCh, en Zúrich a finales de octubre.

Exponiendo la persecución del PCCh y recogida de firmas en Berna los días 5 y 26 de noviembre de 2022.

Enfermero: El delito de sustracción forzada de órganos a personas vivas debe ser ampliamente difundido

Florian, de 27 años, es enfermero. El 5 de noviembre vio a gente recogiendo firmas para una petición en el centro de Berna y se enteró por primera vez de los delitos de sustracción de órganos a personas vivas por el PCCh. "Esto es espantoso", dijo. "No puedo imaginar que ocurre algo así".

Firmó la petición y dijo que pensaba informarse más sobre la persecución a los practicantes de Falun Gong. "Espero que más gente se entere de esto y que menos países oculten información como lo ha hecho China", comentó. "Si un número suficiente de personas conoce estos [crímenes], más gente expresará su oposición".

El gobierno federal suizo debe tomar medidas para detener la persecución

Beatrice Mettler firmó la petición tras conocer las actividades de recogida de firmas de los practicantes de Falun Gong el 26 de noviembre. "La sustracción de órganos me resulta inimaginable, porque va totalmente en contra de mis creencias y es muy cruel", declaró.

Afirmó que los crímenes del PCCh deben hacerse públicos y que el gobierno suizo debe tomar medidas para que la gente no pueda ignorarlos.

Christoph Rätheli es enfermero en una unidad de cuidados intensivos. Dijo que la persecución del PCCh a los practicantes de Falun Gong, especialmente la extracción de órganos, "es un mal masivo".

“La gente todavía está siendo perseguida de esta manera. No debería suceder, y la gente debería poder practicar [Falun Gong] sin interferencias”, afirmó.

Al firmar la petición, dijo que quería decir al gobierno federal suizo: "Me opongo a la persecución y espero que pueda detenerse".

Antecedentes: ¿Qué es Falun Dafa y por qué lo persigue el PCCh?

Falun Dafa (también conocido como Falun Gong) fue presentado por primera vez al público por el Sr. Li Hongzhi en Changchun, China, en 1992. Esta disciplina espiritual se practica ahora en más de 100 países y regiones alrededor de todo el mundo. Millones de personas que han abrazado las enseñanzas, que se basan en los principios Verdad-Benevolencia-Tolerancia, y han aprendido los cinco ejercicios, han experimentado una mejora de la salud y bienestar.

Jiang Zemin, exlíder del Partido Comunista Chino (PCCh), percibió la creciente popularidad de la disciplina espiritual como una amenaza para la ideología atea del PCCh y el 20 de julio de 1999 emitió una orden para erradicar la práctica.

Bajo la dirección personal de Jiang, el PCCh estableció la Oficina 610, una organización de seguridad extralegal con poder para anular los sistemas policial y judicial y cuya única función es llevar a cabo la persecución a Falun Dafa.

Minghui.org ha confirmado la muerte de miles de practicantes como resultado de la persecución en los últimos 23 años. Se cree que el número real es mucho mayor. Innumerables practicantes han sido encarcelados y torturados por su fe.

Existen pruebas concretas de que el PCCh avala la sustracción de órganos a los practicantes detenidos, que son asesinados para abastecer a la industria china de trasplantes de órganos.