Diputados británicos condenan las atrocidades de la sustracción forzada de órganos del régimen chino en el Día Mundial de los Derechos Humanos

(Minghui.org) El 10 de diciembre de 2022 es el Día Internacional de los Derechos Humanos. Lord Alton y Lord Hunt, miembros de la Cámara de los Lores británica, condenaron recientemente el crimen del Partido Comunista Chino (PCCh) de la sustracción forzada de órganos a practicantes vivos de Falun Dafa.

Lord Alton MP (Lord Alton) publicó un video condenando el crimen del PCCh de la sustracción forzada de órganos a practicantes vivos de Falun Dafa.

Citando graves acusaciones del Tribunal Chino Independiente presidido por el eminente abogado británico Sir Geoffrey Nice KC, Lord Alton dijo en el vídeo que fue Jiang Zemin, el exlíder del Partido Comunista Chino, quien ordenó la erradicación de Falun Dafa y, en sus palabras, haciendo "lo que fuera necesario". Jiang creó la Oficina 610 para llevar a cabo estas órdenes.

El Tribunal Independiente Chino concluyó tras ver las pruebas que "la sustracción forzada de órganos se ha cometido durante años en toda China a una escala significativa y que los practicantes de Falun Dafa han sido una -y probablemente la principal- fuente de suministro de órganos".

David Alton, Lord Alton de Liverpool.

Lord Alton declaró que era probable que el PCCh hubiera cometido los mismos crímenes contra los musulmanes uigures, los budistas tibetanos y los cristianos. Se trata de acusaciones graves, por lo que los legisladores del Parlamento británico, tanto de la Cámara de los Comunes como de la Cámara de los Lores, están colaborando por encima de las divisiones políticas para impulsar una legislación que castigue severamente a todo aquel que colabore con quienes cometen crímenes atroces.

Al explicar por qué le preocupan los crímenes contra la humanidad del PCCh, Lord Alton dijo que es porque apoyamos firmemente el artículo 18 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que afirma que toda persona tiene derecho a creer, no creer o cambiar sus creencias. Sin embargo, se viola cada día en todo el mundo, especialmente en China. Resulta aún más irónico que China sea miembro de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, creada para defender el artículo 18.

La Cámara de los Lores del Reino Unido ha aprobado recientemente una serie de enmiendas legislativas para proteger las cadenas de suministro públicas británicas de las amenazas de los violadores de los derechos humanos. El 30 de noviembre, durante la tercera lectura del Proyecto de Ley de Adquisiciones, la Cámara de los Lores votó por 191 votos a favor y 169 en contra una enmienda contra la sustracción forzada de órganos. Próximamente se someterá a votación en la Cámara de los Comunes.

La enmienda, si se convierte en ley, dará a los ministros discrecionalidad para tomar medidas y excluir legalmente a un proveedor si se descubre que este o personas relacionadas con él están implicados en la sustracción forzada de órganos y en actividades poco éticas relacionadas con tejidos humanos.

El liderazgo de Lord Hunt de Kings Heath permitió que el proyecto de ley fuera aprobado en la Cámara de los Lores. En su discurso, Lord Hunt dijo que el mundo era cada vez más consciente de que el PCCh está sustrayendo órganos de presos de conciencia vivos. El Tribunal Independiente Chino ha descubierto recientemente que el horrendo delito de sustracción forzada de órganos a víctimas vivas ha dado lugar a un asesinato generalizado. Las personas que reciben trasplantes de órganos pueden prolongar su vida, pero a costa de otra vida inocente.

Lord Hunt de Kings Heath

Lord Hunt señaló al Gran Comité las enormes pruebas de la sustracción forzada de órganos por parte del PCCh, incluidos análisis estadísticos detallados de trasplantes y donaciones, numerosas conversaciones telefónicas secretas documentadas, incluidas llamadas con altos cargos del PCCh que admitieron la sustracción forzada de órganos, declaraciones legales y políticas del PCCh, anuncios para universidades y personal militar y admisiones, tiempos de espera muy cortos para obtener órganos y una gran cantidad de testimonios personales. El Tribunal Chino Independiente tardó doce meses en evaluar todas las pruebas disponibles.

Además, un grupo de eminentes personalidades internacionales del Tribunal Chino Independiente entrevistó a más de cincuenta testigos, expertos e investigadores, e invitó formalmente a los representantes del PCCh a responder, dijo.

También, envió una importante señal a otros países.

A finales de abril de este año, Lord Hunt, Lord Alton y otros miembros del Parlamento británico promovieron también la entrada en vigor de una nueva ley británica, la Health and Care Bill. La ley prohíbe a los ciudadanos y nacionales británicos viajar a China y otros países para comprar órganos para trasplantes. La nueva ley también tipifica como delito a los británicos que puedan estar implicados en el tráfico de órganos.

Antecedentes: ¿Qué es Falun Dafa y por qué el PCCh lo persigue?

Falun Dafa (también conocido como Falun Gong) fue presentado por primera vez al público por el Sr. Li Hongzhi en Changchun, China, en 1992. Actualmente, esta disciplina espiritual se practica en más de 100 países y regiones alrededor de todo el mundo. Millones de personas que han adoptado las enseñanzas, basadas en los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia, y han aprendido los cinco ejercicios, han experimentado una mejora de su salud y bienestar.

Jiang Zemin, exjefe del Partido Comunista Chino (PCCh), percibió la creciente popularidad de la disciplina espiritual como una amenaza para la ideología atea del PCC y el 20 de julio de 1999 emitió una orden para erradicar la práctica.

Bajo la dirección personal de Jiang, el PCCh estableció la Oficina 610, una organización de seguridad extralegal con poder para anular los sistemas policial y judicial y cuya única función es llevar a cabo la persecución a Falun Dafa.

Minghui.org ha confirmado la muerte de miles de practicantes como consecuencia de la persecución durante los últimos 23 años. Se cree que la cifra real es mucho mayor que las muertes que han podido confirmarse. Innumerables practicantes han sido encarcelados y torturados por su fe.

Existen pruebas concretas de que el PCCh avala la sustracción forzada de órganos a los practicantes detenidos, que son asesinados para abastecer a la industria china de trasplantes de órganos.