Los discípulos de Dafa deben usar más a menudo las habilidades sobrenaturales para oponerse a la persecución

(Minghui.org) Recientemente leí un artículo en Minghui titulado “Deshacerse de las nociones humanas y caminar hacia la divinidad” (en inglés). Esto me recordó que hay que usar las habilidades sobrenaturales más a menudo, aunque no podamos ver el efecto inmediato en esta dimensión. Después de todo, el Maestro Li (el fundador de Falun Dafa) nos ha otorgado el poder sobrenatural para oponernos a la persecución, validar Falun Dafa y salvar a la gente.

Dos incidentes

He aquí dos experiencias de este tipo. La primera ocurrió en 2000, cuando me llevaron a un campo de trabajos forzados. Como me negué a renunciar a mis creencias, el director me llamó a su despacho, donde ya había cinco o seis agentes. Tras esposarme los brazos a la espalda, me dio una descarga eléctrica en la cabeza, la cara y el cuello.

Durante ese tiempo, recité en mi mente el poema del Maestro:

Sin existencia

“Vivir sin expectativas,
morir sin arrepentimientos;
extinguiendo todo pensamiento excesivo,
cultivar el fo no es difícil”. (Hong Yin)

Cuando me daba la descarga, sentía como si me tocara una barra de metal y nada más. Pensando que el voltaje no era lo suficientemente fuerte, el director ajustó la potencia de la porra al máximo, pero seguía sin pasar nada. Después de intentarlo unas cuantas veces más, se dio por vencido.

En ese momento, vi a algunos practicantes con ampollas en la cara y el cuello por las descargas eléctricas. Pero yo no tenía ninguna marca y supe que el Maestro había sufrido por mí.

El segundo incidente ocurrió hace muchos años. Dos jóvenes practicantes de mi zona son profesores de instituto. Como están ocupados con el trabajo, les sugerí que guardaran las versiones electrónicas de los libros de Dafa en sus teléfonos móviles, para que pudieran estudiar las enseñanzas siempre que fuera posible. Les gustó la idea y le di a uno de ellos una tarjeta SD con las enseñanzas de Dafa.

Después de mucho tiempo, el practicante aún no había devuelto la tarjeta. Cuando le pregunté por ella, me dijo que no podía encontrarla. “¿Cómo pudo pasar eso?” le pregunté. “Sabes que contiene libros de Dafa”.

Dijo que no sabía dónde la había puesto. De hecho, llevaba varios días buscándola y seguía sin encontrarla.

Al darme cuenta de mi resentimiento, supe que, como practicante de Falun Dafa, debería mirar hacia adentro y reflexionar sobre por qué me sucedió esto. Pensando en retrospectiva, debería haber puesto la tarjeta en una caja pequeña, para que fuera cómoda de llevar y menos probable que se perdiera. Al darme cuenta de mi pérdida, me disculpé con Shifu por mis omisiones y le pedí a Shifu que me ayudara a recuperar la tarjeta.

Unos días más tarde, me di cuenta de que la tarjeta estaba de nuevo en el lugar donde solía guardarla. Agradecí la misericordia del Maestro.

En el campo de trabajos forzados

Después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) empezara a reprimir a Falun Dafa en 1999, me llevaron a un campo de trabajo al año siguiente. Los guardias a menudo instruían a los internos para que me torturaran, y la mayoría de las veces me olvidaba de pedir ayuda al Maestro. Cuando me rodeaban, tenía miedo.

Durante esos días, muchos practicantes resultaron heridos o incapacitados debido a las torturas, y algunos incluso perdieron la vida. Yo estaba bajo un intenso estrés en ese momento. Pero cuando pensé en todo, me di cuenta de que mi cuerpo físico y mis nociones humanas no podían protegerme sin la ayuda del Maestro. Así que decidí pensar siempre en mí como practicante de Dafa y pedir ayuda al Maestro siempre que la necesitara.

Como resultado, siempre pensaba: “Soy un discípulo del señor Li Hongzhi y el Maestro siempre está conmigo”. También recitaba ‘Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno’ y a veces las enseñanzas de Falun Dafa. Lo hacía tanto si caminaba como si comía o dormía. Los guardias a menudo obligaban a los detenidos a marchar. Mientras los demás cantaban lo que los guardias exigían mientras marchábamos, yo repetía en mi mente Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Excepto cuando estaba en lugares sucios como el baño, mantenía estos pensamientos todo el tiempo. Finalmente, mi mente se llenó de estos pensamientos, aunque todavía estaba en el campo de trabajo.

Cuando los guardias y los reclusos me torturaron más tarde, solo tenía en mente a Shifu y las enseñanzas de Dafa. Así que las palizas y las descargas eléctricas no me hicieron daño. Sabía que Shifu había sufrido mucho por mí. ¡Gracias Maestro!

En el Centro de lavado de celebro

Pensando en esto más tarde, me sentí mal porque Shifu siempre soportó mi dolor. ¿Qué pasaría si pudiera evitar que los perpetradores cometieran malas acciones o devolverles el dolor con habilidades sobrenaturales? ¡Solo miren las presentaciones de Shen Yun! Esos cultivadores podían usar habilidades sobrenaturales cuando querían. Por ejemplo, los matones no se atrevieron a golpear al Rey Mono.

El Maestro dijo:

“En el Fa he enseñado, que en la cultivación de Dafa, las capacidades de gong de uno son desarrolladas a su mayor extensión porque los discípulos de Dafa se cultivarán a niveles más altos; cuanto más alto es el nivel que uno atraviesa, está más liberado de materia, por lo tanto, demostrará por completo sus capacidades innatas (capacidades de gong). Los discípulos de Dafa ya han puesto en juego por completo sus capacidades innatas en la rectificación del Fa”. (Qué son las capacidades de gong, “Escrituras esenciales para mayor avance II”)

Mi entendimiento es que los discípulos de Dafa tienen más habilidades sobrenaturales y más fuertes que los cultivadores del pasado. Pero muy a menudo no recordaba ni sabía cómo utilizarlas. Ahora me recordé de usar mis habilidades sobrenaturales para detener a los perpetradores de hacer el mal.

En 2008, me enviaron a un centro provincial de lavado de cerebro. El director que me aplicó descargas eléctricas en el campo de trabajo había sido ascendido a director del centro de lavado de cerebro, pero yo seguía negándome a ceder.

El director vino a verme a las 10 de la noche, cuando los oficiales de la otra sala ya se habían ido. “¿Dejarás de practicar Falun Dafa?”, me preguntó. “¡De ninguna manera!” Respondí.

Utilizó toda su fuerza para abofetearme. Luego me agarró del pelo y me golpeó la cabeza contra la pared. “¿Seguirás practicando Falun Dafa?”, volvió a preguntar. “¡Por supuesto!” Respondí. Me agarró por el cuello con ambas manos para estrangularme.

Cuando el director me golpeó, sí que pensé en las habilidades sobrenaturales. Cuando me abofeteó, esperaba que se abofeteara a sí mismo, pero no lo hizo. Cuando me estaba ahogando, esperaba que se ahogara él mismo, pero no lo hizo. Mirando hacia atrás, sabía que tenía un fuerte resentimiento y que estaba apegado a las peleas. Por eso mis habilidades sobrenaturales no funcionaron.

Al ver que estaba a punto de matarme, grité: “¡Maestro, ayúdame! Maestro, ayúdame”. Mientras el director me asfixiaba, el Maestro me abrió un paso de aire para que pudiera respirar. Pero el director pensó que estaba muerto y aflojó su agarre. Al ver que seguía vivo, se molestó mucho. Después de todo, él ya había golpeado, herido y matado a muchos practicantes.

De este incidente aprendí que, sin una base de cultivación sólida, surgen muchas nociones humanas cuando nos enfrentamos a la brutalidad. Pueden incluir el miedo, el resentimiento y el apego a la lucha. Eso dificulta el funcionamiento de las capacidades sobrenaturales. Esto es diferente de nuestro envío diario de pensamientos rectos, cuando podemos calmar nuestras mentes primero. Por lo tanto, al encontrar peligros más adelante, principalmente pedí ayuda al Maestro en lugar de centrarme en las habilidades sobrenaturales. Sé que, aunque invoco con miedo y nociones humanas, el compasivo Maestro me ayudará.

Cinco agentes de policía

Con el paso del tiempo, mis nociones humanas desaparecieron y mis pensamientos rectos se volvieron más puros. Una vez, cuando distribuía materiales en 2021, alguien me denunció a la policía. Yo no lo sabía y continué incluso mientras una furgoneta de la policía me seguía.

Cuando estaba colocando carteles en una parada de autobús, la policía se detuvo a unos 20 metros. “Creo que usted es la persona que buscamos”, me dijo un agente. Estaba a punto de alejarme, pero me gritaron: “¡Quieto!”.

Me detuve y me di la vuelta. Al ver que ya me habían rodeado, les dije con calma: “Quédense ahí. No se acerquen más”. Nadie se movió.

“Por favor, muéstrenme su identificación y su documentación”, dije.

“No hemos dicho que haya violado la ley", dijo un agente. “Sólo entréguenos el material que tiene en su bolsa y nos iremos”.

Envié pensamientos rectos para erradicar los elementos perversos que había detrás de la policía. No estaban calificados para intervenir en lo que yo hacía, ya que salvar a la gente es algo muy sagrado, pensé. Dijeron que tenían cámaras corporales y que no se meterían en líos. Dijeron repetidamente que se irían si les daba unas cuantas copias de lo que tenía. Como sólo me quedaban cinco copias y no era conveniente visitarlos en la comisaría, les di los folletos y se fueron.

Pensando en esto, me di cuenta de que después de decir “Quédense ahí. No se acerquen”, ya estaban siendo retenidos por las habilidades sobrenaturales. Si hubiera sabido esto, podría haberme alejado antes.

Usar las habilidades sobrenaturales más a menudo

Hay muchos buenos ejemplos del uso de habilidades sobrenaturales en los artículos de Minghui. Cuando algunos practicantes recibieron una descarga eléctrica, enviaron pensamientos rectos para que la corriente eléctrica volviera al agresor, y funcionó. Cuando la policía no escuchó y continuó confiscando materiales de Dafa y fotos del Maestro, algunos practicantes enviaron pensamientos rectos para que los oficiales cayeran, y también ocurrió. De manera similar, mientras los guardias y los reclusos golpeaban a los practicantes, fueron los guardias y los reclusos los que terminaron con dolor y luego fueron hospitalizados.

Ahora, cuando salgo y distribuyo materiales, a menudo envío pensamientos rectos para que la policía no me vea. Cuando tengo miedo, envío pensamientos rectos para que el “miedo” vaya a la policía. Del mismo modo, cuando coloco carteles, envío pensamientos rectos para que permanezcan allí y la gente no los quite.

Lo anterior es mi entendimiento personal. Por favor, señalen cualquier cosa inapropiada.