(Minghui.org) Durante muchos años, he hablado a la gente sobre Falun Dafa dondequiera que fuera y con todo aquel con el que me encontrara. A continuación, presento algunas de mis experiencias de cultivación durante el curso de la aclaración de la verdad y la salvación de la gente.

Trabajando en la tienda de mi hermana

Mi hermana abrió una tienda, pero vendía poco. Me pidió que me ocupara de la tienda un día que ella no podía estar allí. Cuidé bien de su tienda y también aclaré la verdad a todos los clientes; el 90% de ellos me escucharon y renunciaron al partido comunista chino (PCCh) y sus organizaciones afiliadas. El negocio de la tienda mejoró.

Un jefe de la rama de la aldea del PCCh vino a la tienda un día que yo estaba y comencé a aclararle la verdad. Me interrumpió con propaganda del PCCh sobre Dafa. Dijo que había visto a muchos practicantes en la cárcel, y que pensaba que esos practicantes eran tontos y estúpidos. Le respondí: "Los practicantes de Falun Dafa han establecido estaciones de radio y compañías de televisión en muchos países del mundo. La mayoría de esos practicantes son bien educados y con grandes logros académicos. También hay practicantes que solían ser músicos y funcionarios de alto rango. ¿Cómo puede llamar a estas personas tontas y estúpidas? ¿Por qué un número tan grande de personas, muchas de ellas bien educadas, creen en Falun Dafa?".

Le dije: "Desde que el PCCh tomó el poder en China en 1949, ha matado a gente de todos los niveles de la sociedad, y ahora está luchando contra Verdad-Benevolencia-Tolerancia. ¿Cómo puedes decir que el PCCh no es malo?". Escuchó atentamente con los ojos bien abiertos, y estuvo de acuerdo con lo que dije. Renunció voluntariamente a su afiliación al PCCh.

Cediendo mi trabajo a otros

En el primer semestre de 2019, pedí un préstamo de decenas de miles de yuanes por una emergencia de mi hijo. Para poder devolver el préstamo, acepté un trabajo de limpieza en la casa de un practicante anciano.

Unos meses más tarde, otra practicante vino a visitar a este anciano practicante. Quería mi trabajo de limpieza. Pensé que, al ser una practicante, debería ser considerada y pensar en los demás primero. Le dije: "Si mi empleador está de acuerdo, puedes aceptar este trabajo si quieres. Yo ya encontraré otro". Lo arreglamos y dejé el trabajo esa misma noche.

A principios de 2020 encontré un trabajo en la casa de otro practicante, cuidando a la madre de ese practicante. Congeniamos muy bien.

Un día, otra practicante llamó, solicitando un trabajo. Dijo que, en un sueño, le habían dado una pista de que debía trabajar allí. Para acabar de pagar mi deuda, quería trabajar uno o dos meses más. Sin embargo, pensé en esta practicante y en las necesidades que podría tener.

En ese momento, me vino a la mente el Fa del Maestro:

“Siendo nosotros personas que refinan gong, repentinamente se pueden producir conflictos. ¿Cómo hacemos? Si mantienes en todo momento un corazón misericordioso y una actitud serena y pacífica, al encontrarte con problemas podrás actuar bien, porque eso da espacio para amortiguar. Si siempre eres misericordioso, tratas a los demás benevolentemente, consideras a los demás al hacer cualquier cosa, y cada vez que se presenta un problema piensas primero si los demás podrán aguantar o no y si dañas a otros o no, entonces no surgirá ningún problema. Por consiguiente, debes refinar gong según estándares altos, exigirte con estándares aún más altos” (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

Volví a dejar mi trabajo de buena gana. De camino a casa, pensé en por qué parecía que los demás siempre querían mi trabajo. Surgieron algunos pensamientos negativos y empecé a quejarme. Inmediatamente eliminé esos pensamientos incorrectos.

El Maestro dijo: “La misericordia es el estado eterno de los dioses” (¿Por qué rechazas?, Hong Yin III). Necesitaba mejorar mi xinxing, porque todas las cosas, buenas o malas, son para el mejoramiento de los practicantes de Dafa.

Mi nueva oportunidad de hablar a los demás sobre Dafa

Después de dos días en casa, decidí que trabajaría cortando el pelo a la gente en el mercado. En realidad, había pensado en hacer esto dos años antes. No solo podría ganar algo de dinero, sino que también interactuaría con la gente y la ayudaría a renunciar al PCCh y sus organizaciones afiliadas. Sin embargo, debido a mis apegos al miedo a perder la cara y a que la gente me menospreciara, nunca lo intenté. Después de regalar dos trabajos, tuve que reconsiderar este otro plan, que me obligaría a deshacerme de mis apegos.

Mi casa está en el sexto piso. Cuando empecé a cultivarme, podía subir las escaleras con facilidad. Sin embargo, cuando empecé a cortar el pelo, comencé a sentirme fatigada. Después de enviar pensamientos rectos al mediodía, me quedaba dormida en mi estera. La fatiga desaparecía cuando me despertaba.

Mi hijo, también practicante, me pidió que dejara el trabajo de peluquera. Yo pensaba lo mismo y creía que podía encontrar otro trabajo. Sin embargo, al día siguiente, después de terminar los ejercicios, fui de nuevo al mercado. Les conté a todos los que venían a cortarse el pelo la verdad sobre Dafa. Una vez, de camino al mercado, aparecieron en mi mente las palabras "hazlo bien" y me di cuenta de que el Maestro (el Maestro Li Hongzhi, fundador y Maestro de Dafa) me estaba animando. Sabía que tenía que mejorar el estado incorrecto de mi cuerpo físico. Los discípulos de Dafa no deben sentir ni aceptar el cansancio y el dolor, porque nuestro cuerpo principal está hecho de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. La fatiga desapareció completamente en menos de dos meses.

Cada día, le contaba la verdad a todos los que venían a cortarse el pelo. La mayoría de la gente renunció felizmente a las organizaciones del PCCh y tomó los materiales de aclaración de la verdad. Algunos querían aprender los ejercicios de Falun Dafa.

Durante esos años, traté de no perder ninguna oportunidad de aclarar la verdad dondequiera que fuera. Antes de salir a aclarar la verdad, recitaba el Fa y pedía al Maestro que me fortaleciera. Durante muchos años, también tuve el hábito de transcribir el Fa. Cada vez que salía una nueva enseñanza del Fa, la transcribía. Ahora tengo una gran pila de enseñanzas del Fa transcritas. A veces, también he memorizado el Fa. El estudio sólido del Fa ha construido una base firme para mi aclaración de la verdad.

Salvar a los seres conscientes es la misión y la responsabilidad de los discípulos de Dafa. Aclarar la verdad se ha convertido en parte de mi vida. Durante muchos años, he ayudado a muchas personas de todas las edades y de diversas profesiones a renunciar al PCCh y sus organizaciones afiliadas. Mi único pensamiento es que haré todo lo que el Maestro me pida.

Recordemos todos lo que dijo el Maestro: “Si se cultivan como al principio, ¡seguramente tendrán éxito!” (Enseñanza del Fa en el Fahui de San Francisco).

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