(Minghui.org) Después de dos meses de encierros para controlar el virus PCCh, se levantaron las restricciones en partes de Friburgo y Breisgau, destinos turistas populares al sudoeste de Alemania. La ciudad comenzó a recuperar su brillo a medida que las tiendas y pequeños negocios reabrieron. Debido a los límites de clientes dentro de las tiendas, se hacían largas filas fuera de cada negocio.
Los practicantes de Falun Dafa realizan actividades afuera de la librería de la Universidad de Breisgau en Friburgo, Alemania.
Un transeúnte se detiene para hablar con un practicante e informarse sobre la disciplina.
Transeúnte firma la petición para ayudar a detener la persecución.
Los practicantes de Falun Dafa de la región del Bosque Negro realizaron un día de actividades en Breisgau, Friburgo, el 20 de marzo de 2021. Un flujo constante de gente paró para leer la información de los carteles, como también para hablar con los practicantes y entender más sobre la disciplina y la persecución en China. Muchos firmaron luego la petición pidiendo un fin de la persecución. Algunos se llevaron folletos para darles a otras personas. Otros preguntaron dónde podían aprender los ejercicios. Algunos chinos aceptaron renunciar al PCCh y sus organizaciones después de escuchar los hechos.
La actividad se realizó en una plaza afuera de la librería de la universidad de Breisgau. El lugar es un principal centro de transporte sumamente transitado. El distrito comercial central está apenas a unos metros. La gente que viene del sur y la que viene del norte tiene que pasar por la plaza. Algunas personas comentaron que veían desde lejos los carteles con el mensaje: “Acaben con el PCCh”, “Detengan la persecución a Falun Gong” porque eran muy llamativos. Se acercaron al puesto de los practicantes y conversaron en detalle con ellos. También quisieron firmar la petición para mostrar su apoyo.
El tiempo estaba frío por la mañana y había poca gente. Dos hombres alemanes que iban en bicicletas pararon frente al cartel que decía “Acaben con el PCCh”. Después de un rato, un practicante se les acercó. Ellos dijeron que realmente era tiempo de que se acabe el PCCh porque era una aberración. Recién entonces puede terminar la persecución. “Ellos comenzaron esta pandemia global. Ahora es tiempo de acabar con el PCCh. Ustedes lo han hecho muy bien. Los apoyamos”, dijeron antes de firmar la petición.
La Sra. L se acercó a firmar la petición. Ella dijo que antes junto con muchas personas solían estar atraídas por la ideología comunista creada por Karl Marx. Luego, ¡descubrieron que eran mentiras! La verdad expuesta por los registros históricos de la ex Unión Soviética y Alemania del Este fue repugnante. Ahora, el PCCh está persiguiendo a gente buena que tiene creencias diferentes. Incluso le sustraen sus órganos a la fuerza. Esto le quitó todas las ilusiones que ella tenía sobre Karl Marx y el comunismo.
El Sr. Y un residente local de Estados Unidos dijo: “Sé que el PCCh está mintiendo. Yo estaba en China después de la masacre de estudiantes del 4 de junio. Mucha gente en Shanghái y Xi’a fue reprimida por las autoridades también. No obstante hasta hoy en día, el régimen no ha reportado esas muertes. Noté que el PCCh está ejerciendo influencia en el extranjero. ¿Acaso no hay decenas de institutos Confucio en Alemania también? Son muy activos”.
El Sr. Admlk dijo: “Me enteré de la persecución a Falun Dafa por los reportes de los medios. Escuché sobre la sustracción de órganos pero no me di cuenta de que era tan seria. Le contaré a más personas”. Pidió folletos para repartir.
Chinos renuncian al PCCh
Una mujer china pasó por el puesto de información. Dijo que se había unido al PCCh cuando estaba estudiando en la universidad. Después de mudarse al extranjero hace una década, dijo que no tuvo contacto con la organización. Además, tampoco cree lo que dicen las autoridades. Cuando los practicantes le explicaron el significado de renunciar a su membresía, ella aceptó cortar lazos con el régimen.
“Vi los ideogramas chinos en los carteles desde lejos”, dijo una estudiante china que vino hace poco. Leyó la información sobre Falun Dafa. Dijo que sus profesores hablan de la disciplina en las clases de política pero no que no tenía idea de lo que pasaba. Preguntó si la información en los carteles era verdad. Cuando le dijeron que no solo era verdad sino que la situación real es peor incluso y que esto comenzó hace 21 años, no hizo más preguntas. Los practicantes le preguntaron si le gustaría renunciar al PCCh y ella aceptó sin dudar.
Un estudiante que hablaba chino fluidamente se paró a leer los carteles por largo rato. Él dijo que era parte de un grupo étnico minoritario que escapó de Xinjiang. Sin embargo, dijo que solo podía hablar chino porque desde que era pequeño no le permitieron hablar o leer en su idioma nativo en China.
Su abuela fue denunciada a la policía por sus vecinos por leer y recitar las escrituras en su casa, y se la llevaron arrestada a un campo de reeducación. Debido a su edad avanzada y enfermedades, fue liberada después de que su familia sobornara a los funcionarios. Él se consideraba afortunado de haber escapado del país antes del 2015. Ahora es difícil irse de China, y tal vez podría ser víctima de la sustracción forzada de órganos porque mucha gente joven ha desaparecido después de ser llevadas a los campos de concentración. Dijo que escuchó que el PCCh está matando a la gente por sus órganos, pero cree que también se lo hacen a la gente en Xinjiang. Según él, hay pasajes para transportar órganos en el aeropuerto de Urumqi. No debe haber tantas personas que necesitan órganos en Xinjiang, entonces se llevan estos órganos a otras partes del país.
El estudiante dijo: “He ido a muchos lugares en Europa y vi protestas pacíficas similares de practicantes de Falun Dafa en todos lados. Estas actividades se hacen en lugares transitados en ciudades o en lugares turísticos y el impacto es enorme. Ellos simplemente tienen miedo de que la verdad sea expuesta. Por eso, los gobiernos y algunos países confían en ustedes y les permiten realizar protestas en los lugares más concurridos de la ciudad. Los admiro y estoy conmovido por lo que hacen”.
“En China, mucha gente es perseguida por el PCCh, pero nadie ha resistido al régimen como ustedes, incluyendo nosotros, grupos minoritarios en Xinjiang. El PCCh no tiene miedo de pelearse con ustedes, son buenos para comportarse como matones. Simplemente tienen miedo de que la verdad sea expuesta. Están haciendo justo lo que más temen. Esto despertará la conciencia de mucha gente y todos harán algo para derribarlo. Por ello, creo que hay esperanza en China. El PCCh seguramente será eliminado…”.
Él renunció alegremente a los jóvenes pioneros y la liga juvenil.
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