Falun Dafa salvó a mi familia y a mí

(Minghui.org) Hace más de 20 años, me diagnosticaron linfoma. El cáncer se esparcía a los ganglios linfáticos de todo el cuerpo. El dolor era insoportable. También tenía artritis reumatoide. Mis huesos y articulaciones estaban deformados por lo que no podía caminar ni cuidarme. Era difícil comer sola. Mi familia estaba preocupada, mientras que yo me sentía sin esperanza.

Comencé a practicar Falun Dafa en 1997, y pronto mi dolor desapareció. Mi cuerpo finalmente estaba sano, podía cuidarme y hacer las tareas domésticas. También cuidé a mi suegro que ahora está en sus 80 años.

El Partido Comunista Chino (PCCh) comenzó su brutal persecución en contra de los practicantes de Falun Dafa en 1999. No renuncié a mi fe, y me llevaron a un campo de trabajo en 2002. El abuso físico y mental me dejó postrada en cama. Varios médicos me vieron y me dijeron que solo me quedaban unos días de vida.

El campo de trabajo no se quería hacer responsable, así que me trasladaron a casa. Estudié el Fa e hice los ejercicios en casa, y recuperé mi salud. Estoy muy agradecida con el Maestro por darme una segunda vida.

Mi familia fue testigo de mi increíble recuperación y aprobó a Dafa. Apoyan mi práctica y también se han beneficiado del poder de Dafa.

Después de que mi esposo vio mi recuperación, creyó que Dafa es bueno, sin embargo, no aceptó practicar conmigo porque no podía dejar de tomar alcohol y de fumar.

En marzo de 2020, mi esposo sufrió envenenamiento por monóxido de carbono en el trabajo y entró en coma. Estaba en el hospital, perdiendo y recuperando su conciencia, y también con incontinencia. El médico que lo trataba tenía pocas esperanzas de que saliera del estado vegetativo.

Tenía miedo. Le pedí al Maestro que salvara a mi esposo. Le puse las grabaciones de las Lecciones del Maestro y lo cuidé lo mejor que pude.

Después de dos meses, mi esposo pudo hablar y caminar solo. Después de eso, dejó casi por completo de fumar y beber alcohol. También se unió a nuestro Estudio del Fa y comenzó a hacer los ejercicios con nosotros.

En 2013, mi suegro tuvo un infarto. Se desmayó y perdió el conocimiento mientras yo estaba en casa sola con él. Por desesperación, le pedí al Maestro que lo ayudara, y repetí: "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Mi suegro se despertó lentamente y pronto se recuperó por completo.

Estoy agradecida de que el Maestro nos haya salvado a mi familia y a mí.

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