(Minghui.org) Cada cierta cantidad de años desde que tomó el poder el PCCh ha ordenado una campaña política dirigida a un grupo específico para seguir su intimidación al pueblo chino. A medida que el qigong se puso de moda en la década de los noventa, Falun Dafa, una antigua disciplina espiritual y de meditación basada en los principios de "Verdad, Benevolencia, Tolerancia", rápidamente se destacó entre miles de escuelas de qigong por su instrucción gratuita, profundas enseñanzas espirituales y poderosos beneficios para la salud.
Aunque el gobierno promovió inicialmente a Falun Dafa al reducir los costos de salud del país, su gran popularidad y su completa independencia del control del gobierno impulsaron finalmente al PCCh a elegirlo como objetivo de una nueva campaña política. En 1999, diez años después de la masacre de estudiantes prodemocracia en la Plaza de Tiananmen, el PCCh ordenó la persecución a Falun Dafa.
Combinando sus décadas de experiencia en llevar a cabo luchas políticas con el rápido desarrollo de la tecnología moderna, el PCCh fue capaz de hacer que la persecución de Falun Dafa fuera más encubierta, astuta y sofisticada que todas sus campañas anteriores. Con la estricta censura en línea y la promesa de beneficios económicos para Occidente, no solo los chinos sino también el resto del mundo han hecho la vista gorda a los arrestos masivos, detenciones, torturas y asesinatos de los practicantes de Falun Dafa.
Mirando hacia atrás a la forma en que la persecución a Falun Dafa ha evolucionado en las últimas dos décadas, uno no puede evitar ver la asombrosa similitud en las tácticas de encubrimiento usadas tanto en la persecución a Falun Dafa como en la pandemia del coronavirus.
"Si el resto del mundo hubiera sido más agresivo en la lucha contra toda esta tergiversación y encubrimiento y la negación y la narrativa contraria a los hechos al tratar el abuso de los trasplantes de órganos; si el sistema mundial hubiera insistido en la transparencia y la responsabilidad al tratar el abuso de los trasplantes de órganos; y si China hubiera enfrentado la presión mundial en favor de la transparencia y la rendición de cuentas en su sistema de salud para hacer frente al abuso de los trasplantes de órganos, no tendríamos este coronavirus ahora", dijo David Matas, un abogado canadiense de derechos humanos que ha investigado la sustracción de órganos a presos de conciencia autorizada por el estado.
"Se puede suponer que el partido comunista chino no tenía la intención de causar la propagación del coronavirus, pero en lo que han participado activamente es en la ceguera deliberada. Y yo diría que el resto del mundo también se ha unido a ellos en esta ceguera deliberada. Y ahora todos estamos sufriendo sus consecuencias". Matas continuó. 1
A continuación, miramos la historia del PCCh con la esperanza de que pueda proporcionar algunas pistas sobre cómo evitar que esta tragedia vuelva a ocurrir.
Censura
Así como el PCCh no permitió que nadie con información sobre el brote de coronavirus lo revelara, también impidió que los practicantes de Falun Dafa expusieran la persecución de su fe. Se ordenó a los medios de comunicación, sitios web y blogs personales, tanto privados como estatales, que no publicaran información sobre la persecución.
Del mismo modo, el bloqueo por parte de las autoridades de la publicación de las secuencias del genoma del coronavirus se asemeja a la prohibición de la publicación de libros y material audiovisual de Falun Dafa. Como resultado, la gente no podía ver información auténtica, solo la propaganda del gobierno.
Un practicante de Falun Dafa le dijo a Minghui.org en 2011 que asistió a una reunión de trabajo a nivel de condado sobre el inicio de otra ronda de edición de crónicas locales. El jefe de redacción dijo: "No está permitido en absoluto poner en los artículos una palabra relacionada con la oficina 610 (una agencia extralegal creada específicamente para perseguir a Falun Dafa) o con Falun Dafa. La sociedad internacional está criticando la situación de los derechos humanos en China. La persecución a Falun Dafa no puede aparecer en las crónicas locales. En algunas áreas, los artículos fueron rechazados y tuvieron que ser reeditados solo porque pusieron información relacionada con Falun Dafa". 2
Según un empleado de Baidu, el mayor motor de búsqueda de China, una parte importante de las "palabras sensibles" que censuró estaban relacionadas con Falun Dafa, como las variaciones del nombre; los métodos de tortura descritos por los practicantes; Gao Zhisheng, un abogado chino conocido por defender a los practicantes de Falun Dafa; y el libro Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista, que arroja luz sobre la historia de engaños y asesinatos del PCCh. 3
Después de arrestar y torturar a los practicantes de Falun Dafa, la policía a menudo los amenaza con no informar del incidente a Minghui.org, la plataforma central de noticias y comunicaciones para los practicantes de Falun Dafa de todo el mundo. Mientras tanto, la policía también vigila los teléfonos celulares, las líneas telefónicas fijas y los correos electrónicos de los practicantes en un intento por evitar que se genere conciencia sobre la persecución. Al principio de la pandemia, las autoridades vigilaron las redes sociales del Dr. Li Wenliang y lo reprendieron por "difundir rumores" sobre el brote.
Pero la censura no impidió que los practicantes de Falun Dafa clarificaran la verdad. Con todos los canales de información estrictamente controlados por el PCCh, algunos practicantes eligieron interceptar las señales de televisión para transmitir información sobre la persecución. Entre 2001 y 2005, un total de 129 practicantes, siendo casi un tercio mujeres, fueron arrestados por intervenir los cables de televisión para hablar sobre la verdad. Más del 85% de los practicantes, 110, fueron condenados a penas de prisión que oscilaban entre 3 y 20 años, con una duración media de 12,5 años.
En 2017, 11 de los practicantes condenados habían muerto por lesiones o problemas de salud provocados por la tortura, mientras que otros 10 practicantes también perdieron la vida a lo largo de los años. Algunos de los practicantes sobrevivientes siguen cumpliendo condenas en prisión, mientras que otros, aunque liberados, luchan por hacer frente a las lesiones que sufrieron mientras estaban detenidos. 4
Otros practicantes han sido sentenciados y torturados simplemente por hablar con la gente sobre Falun Dafa o por distribuir material sobre la persecución. La Sra. Liu Wei, residente de la ciudad de Tonghua, provincia de Jilin, fue arrestada el 17 de agosto de 2011, por hablar con la gente sobre Falun Dafa. Fue sentenciada a 4,5 años veinte días después por el tribunal de la ciudad de Ji'an. 5
En otro caso, el Sr. Wang Baoshan, un practicante de la ciudad de Tangshan, provincia de Hebei, fue detenido en su trabajo el 3 de julio de 2017, días después de que se encontrara en un vecindario una pancarta que decía "El mundo necesita Verdad-Benevolencia-Tolerancia". Más tarde fue condenado a 5,5 años y a una multa de 20.000 yuanes. 6
Desinformación
Además del encubrimiento de la persecución, el PCCh también difundió desinformación y propaganda para demonizar a los practicantes de Falun Dafa y justificar la persecución.
A finales de 2000, año y medio después de que el PCCh lanzara la supresión a Falun Dafa, la campaña no había conseguido el apoyo de muchas de las bases del PCCh. El entonces líder del PCCh, Jiang Zemin, había viajado por las provincias del sur a principios de 2000 para apuntalar el apoyo a la campaña entre los líderes locales. Mientras tanto, el apoyo público a la campaña había disminuido.
El 23 de enero de 2001, cinco individuos supuestamente se prendieron fuego en la Plaza Tiananmen de Beijing. Toda la escena fue captada por la cámara desde múltiples ángulos. Apenas unas horas después del evento, los medios de comunicación controlados por el estado se vieron inundados con informes de que los autoinmoladores eran practicantes de Falun Dafa. Estos informes incluían imágenes espeluznantes de las víctimas, que mostraban las enseñanzas de Falun Dafa como las responsables directas de la tragedia.
En las siguientes semanas, los medios estatales continuaron informando sobre ello sin parar, haciendo que la gente de toda China dejara de respetar y simpatizar con Falun Dafa para enfurecerse y atacar la práctica. Los crímenes de odio contra los practicantes de Falun Dafa aumentaron, y el PCCh intensificó su persecución con más arrestos, torturas, asesinatos y sustracción forzosa de órganos.
Después de dos décadas, el engaño de autoinmolación sigue siendo la mayor idea errónea que la mayoría de los chinos tienen sobre Falun Dafa. 7
Malos diagnósticos
En la pandemia, los pacientes con coronavirus fueron recategorizados como portadores de otras enfermedades para que el PCCh cubriera la gravedad del brote. Sin embargo, en la persecución a Falun Dafa, esos diagnósticos fueron erróneo en ambos sentidos: los practicantes sanos fueron diagnosticados como enfermos mentales, llevados a hospitales mentales e inyectados con drogas tóxicas, convirtiéndose así en verdaderos pacientes; mientras tanto, otros con enfermedades mentales pero que nunca practicaron Falun Dafa fueron diagnosticados como practicantes y se dice que se volvieron locos después de aprender la práctica.
En otra campaña de propaganda contra Falun Dafa, el PCCh fabricó "1.400 casos de muerte" y afirmó que estas personas murieron por practicar Falun Dafa. Un estudio de los casos reveló que algunas de las "víctimas" nunca existieron, otras nunca practicaron Falun Dafa, y una que se dijo que se había negado a la intervención médica murió en los brazos de los médicos que la trataron. 8
En un ejemplo, Wang Anshou, un trabajador de la fábrica de maquinaria Taishan en la ciudad de Xingtai, provincia de Shandong, mató a sus padres con una pala cuando sufrió una recaída de un trastorno mental. El veredicto del caso civil del tribunal popular de la ciudad de Xingtai, dado el 10 de noviembre de 1999, dice: "La observación del tribunal es que el acusado sufría un trastorno mental antes de casarse y había tratado de ocultar el hecho. Después de casarse, el acusado tuvo muchas recurrencias de enfermedades mentales y tuvo problemas durante mucho tiempo al tratar de curar su trastorno mental. El acusado mató a sus padres con una pala cuando recayó en su enfermedad mental..." "La firme petición de divorcio de la esposa del acusado está apoyada por el tribunal".
El PCCh dijo que había asesinado debido a Falun Dafa, a pesar de que el veredicto del tribunal no dice nada sobre la práctica. Además, había tenido un desorden mental desde 1988, cuatro años antes de la presentación pública de Falun Dafa en 1992. 9
Ocultar la verdad
La resistencia de los practicantes y los esfuerzos persistentes para contrarrestar la calumnia han llevado a más gente a ver a través de las mentiras del PCCh. Esto se convirtió en un dilema para el partido. A partir de 2003, el PCCh adoptó una estrategia llamada "suelto por fuera pero apretado por dentro", convirtiendo la persecución de un espectáculo público en una agenda oculta y clandestina. Los internos del PCCh lo llamaron "una guerra sin humo". 10
Después de que la persecución pasó a la clandestinidad, el PCCh afirmó que Falun Dafa había sido derrotado y que había desaparecido de China, tratando de desviar la atención internacional de sus abusos de los derechos humanos. Esta táctica refleja la afirmación de victoria del PCCh en la lucha contra el virus.
Destrucción de la evidencia
En 2006, "Annie", la exesposa de un cirujano, se convirtió en la primera denunciante que expuso la sustracción forzada por parte del PCCh de órganos vitales de practicantes de Falun Dafa vivos para venderlos a chinos y extranjeros adinerados. Esto explicó por qué el número de trasplantes de órganos se disparó en China después de que comenzara la persecución a Falun Dafa, a pesar de la falta de un sistema de donación de órganos establecido.
Annie, que hizo su primera declaración pública sobre la atrocidad de la sustracción de órganos en marzo de 2006, dijo que su esposo le dijo que había extraído personalmente las córneas de aproximadamente 2.000 prisioneros de Falun Dafa en el hospital Sujiatun de la ciudad de Shenyang en los dos años anteriores a octubre de 2003. Dijo que ninguno de los "donantes" de córneas sobrevivió después del procedimiento porque también se les extirpó la mayoría de sus órganos vitales y luego se quemaron sus cuerpos. 11
En respuesta a estas acusaciones y a las investigaciones internacionales sobre la sustracción forzada de órganos, la oficina del PCCh de la provincia de Heilongjiang emitió un anuncio el 25 de marzo de 2006 en el que ordenaba a todos los departamentos pertinentes que destruyeran los documentos clasificados, de forma similar a como el PCCh destruyó las muestras de virus en la actual pandemia.
El anuncio ordena: "Al destruir estos documentos, uno se asegurará de que no haya manera de recuperar los documentos originales". Los documentos en papel serán quemados o triturados y convertidos en cenizas. Las trituradoras de papel utilizadas deben cumplir los requisitos para la destrucción de documentos clasificados. Los documentos a destruir serán enviados a los lugares designados para ser destruidos. Se requiere la presencia de dos o más personas, y nadie debe abandonar el lugar antes de que los documentos sean completamente destruidos". 12
De hecho, muchas más órdenes en la persecución fueron dadas verbalmente, especialmente las de la oficina 610 extralegal, similar a la Gestapo, y a quienes recibieron las órdenes se les prohibió registrar las instrucciones.
En sus intentos de encubrir el delito de sustracción de órganos, el PCCh estableció un programa de donantes voluntarios fallecidos en 2010, pero recibió pocos registros debido a las barreras culturales que desalentaban a los chinos a donar sus órganos. Según el centro de investigación de la sustracción de órganos de China (COHRC): "Las cuentas oficiales indican que el porcentaje de órganos procedentes de donaciones saltó del 23% en 2013 al 80% en 2014, convirtiéndose las donaciones voluntarias en la única fuente oficial de órganos en 2015".
No es plausible que una transición tan completa en este sistema haya tenido lugar en solo uno o dos años". 13
Un estudio publicado en la revista BMC Medical Ethics concluyó que "en lugar del sistema voluntario prometido por los funcionarios, un sistema voluntario parece funcionar junto con el uso continuado de donantes no voluntarios (lo más probable es que sean prisioneros) que se clasifican erróneamente como 'voluntarios”. En el estudio también se decía que el objetivo de los datos fabricados era "crear una impresión engañosa a la comunidad internacional de trasplantes sobre los éxitos de la reforma de la donación voluntaria de órganos en China, y neutralizar las críticas de los activistas que alegan que se han cometido crímenes de lesa humanidad en la adquisición de órganos para trasplantes".14
Redirigiendo la culpa
A menudo, cuando países como Estados Unidos condenan al PCCh por su notorio historial de derechos humanos, el PCCh los critica por interferir en los asuntos internos de China. Mientras tanto, dentro de China, el PCCh culpa a los practicantes de Falun Dafa en el extranjero que exponen la persecución por "coludirse con fuerzas extranjeras antichinas" y "dañar la imagen de China".
Cuando el portavoz del PCCh, Zhao Lijian, culpó al ejército de los Estados Unidos de llevar el virus a Wuhan durante los Juegos Mundiales Militares en octubre de 2019, uno no puede dejar de recordar cómo el exlíder del PCCh, Jiang Zemin, entregó personalmente un panfleto difamando a Falun Dafa a más de diez jefes de estado durante la cumbre de la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) celebrada en Nueva Zelanda a finales de 1999. En Francia, Jiang Zemin calificó a Falun Dafa de "culto malvado" ante los medios de comunicación extranjeros con el fin de avanzar en su política de persecución. 15
La historia se repite. En cualquier caso, el "siempre glorioso" PCCh nunca admite una mala acción. A veces juega a ser la víctima, y a veces juega a ser el salvador del mundo. Pero cualquiera que sea la cara que ponga cada vez, su naturaleza represiva y autoritaria nunca cambiará.
Referencias
[2] Minghui.org El partido comunista chino no se atreve a documentar la persecución a Falun Gong por parte de la oficina 610 en las crónicas locales
[3] Jonathan Stray. "Lo que China está censurando esta semana". 5 de mayo de 2009.
[4] Minghui.org. Interceptando las señales de televisión en China: Una mirada a la resistencia pacífica de los practicantes de Falun Gong a la persecución
[5] Minghui.org. La Sra. Liu Wei fue sentenciada a prisión por hablar con la gente sobre Falun Gong
[6] Minghui.org. Una bandera lleva a una condena de cinco años y medio de prisión
[7] Minghui.org. El engaño de la autoinmolación en la Plaza de Tiananmen
[8] Minghui.org. Las supuestas 1.400 muertes
[9] Minghui.org. Exponiendo las mentiras de "1.400 casos de muerte"
[10] Minghui.org. Por qué la persecución de Falun Gong pasó de ser un espectáculo público a una agenda oculta
[11] Centro de Investigación de la Cosecha de Órganos de China. "El asesinato de prisioneros de conciencia por órganos en China - denunciantes"
[12] Minghui.org. El PCCh ordena la destrucción de documentos clasificados
[13] Minghui.org. Nuevo informe: "El tráfico de trasplantes continúa en China a pesar de las declaradas reformas"
[14] Minghui.org. Nuevo informe sobre la libertad religiosa destaca el reportaje diario de Minghui sobre la persecución hacia Falun Gong en China
[15] Minghui.org. La colusión de Jiang Zemin con el partido comunista chino para perseguir a Falun Gong
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Categoría: Opinión y análisis