Tres increíbles recuperaciones del virus Wuhan

(Minghui.org) Mientras el virus de Wuhan, también conocido como el virus PCCh (llamado así por el partido comunista chino debido a sus constantes encubrimientos y desinformación) continúa haciendo estragos en todo el mundo, muchas personas se recuperaron luego de distanciarse del PCCh recitando sinceramente "Falun Dafa es bueno; Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".

Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, es un sistema de meditación basado en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Más de cien millones de personas adoptaron la práctica espiritual desde que se presentó al público en China en 1992.

El PCCh, que se nutre de la lucha de clases, la violencia y las mentiras, consideró a Falun Dafa una amenaza a medida que la popularidad de la práctica aumentaba, y en julio de 1999 inició una campaña nacional para eliminarla.

Los practicantes de Falun Dafa llevan 21 años exponiendo pacíficamente la persecución del PCCh. Desde que el coronavirus estalló, también están contando a la gente cómo el PCCh utiliza las mismas tácticas de encubrimiento y engaño en su manejo de la pandemia que en la persecución de Falun Dafa.

Al mismo tiempo, sin ninguna cura para el virus PCCh a la vista, los practicantes están alentando a todos a repetir "Falun Dafa es bueno y Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno", inspirados por los informes de Minghui de personas que recuperaron su salud tras recitar las frases.

Uno puede preguntarse por qué recitar frases tan simples tendría un poder curativo tan asombroso. La cultura tradicional china cree que la mente y el cuerpo son lo mismo y que una persona con pensamientos buenos será bendecida.

Un practicante de Falun Dafa en Francia cuenta cómo su tía, su inquilino y el amigo de su tío se recuperaron del coronavirus recitando, "Falun Dafa es bueno y Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".

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Me llamo Thuy Anh y vivo en París, Francia. Desde que empecé a practicar Falun Dafa hace un año, me beneficié mucho, tanto física como mentalmente.

Thuy Anh comenzó a practicar Falun Dafa hace un año.

Cuando la pandemia llegó a París, mi tía, mi inquilino, y uno de los amigos de mi tío se enfermaron. A continuación están sus historias.

Mi tía

Mi tía, Nguyen Thi Hong Ngoc, tiene 78 años y también vive en París. A finales de marzo, mi primo llamó para decir que se había confirmado que mi tía tenía el virus y había sido llevada a una sala de emergencias después de tener fiebre durante más de una semana y luego perder el conocimiento.

Le conté a mi primo sobre la relación entre el coronavirus y el PCCh. "He practicado Falun Dafa por un año", dije, "y escuché y experimenté tantos milagros. Por favor, dale a tu madre los audios de las conferencias de Falun Dafa para que los escuche y pídele que repita: Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno. Realmente la ayudará".

Mi primo estuvo de acuerdo, pero aun así quería asegurarme de que mi tía lo hiciera. Como no se me permitía visitarla, decidí probar suerte y llamarla. Por sorpresa, de alguna manera recuperó la conciencia en ese momento y contestó el teléfono. Como ya había hablado con ella sobre Falun Dafa antes, simplemente le recordé que recitara las dos frases y se relajara mientras escuchaba las conferencias de audio.

"Por favor, no te preocupes", le aseguré. "Estarás bien". "Ajá", mi tía estuvo débilmente de acuerdo.

A la mañana siguiente, todos sus síntomas desaparecieron sorprendentemente. Me llamó y hablamos durante unos 20 minutos. "Sabes, me recomendaste que leyera Zhuan Falun (las principales enseñanzas de Falun Dafa) unas cuantas veces en el pasado, pero nunca lo hice", dijo. "Esta vez definitivamente lo leeré".

Varios días después, fue dada de alta y regresó a casa. "Estoy leyendo Zhuan Falun estos días", llamó para decir. "Y espero unirme a los ejercicios de grupo una vez que se levante la prohibición de quedarse en casa".

Los practicantes de Falun Dafa practicaron los ejercicios juntos para celebrar el Día Mundial de Falun Dafa en la plaza de los derechos humanos cerca de la Torre Eiffel en París el 5 de mayo de 2019.

Mi inquilino

Nguyen Tong es un inquilino en mi departamento de alquiler. En abril me llamó antes de la cena y con voz débil, me pidió que le ayudara a cerrar la ventilación del baño ya que estaba enfermo.

Me apresuré y revisé el respiradero. Estaba bien, cubierto con un deflector de viento y lo cerré. Eso no debió haberlo hecho enfermar.

Tong estaba en la cama. Llevaba un sombrero de lana y estaba cubierto con varias mantas, estaba acurrucado como un oso de peluche. A través de la cubierta de su cara, me dijo que tenía fiebre. El calor ya estaba en su punto más alto y la habitación era sofocante. Pero aun así sentía frío y seguía temblando. Dijo que se puso en contacto con una línea de emergencia. Alguien vino pero se fue rápidamente después de darle un poco de medicina para la fiebre.

Como todavía tenía fiebre, me quedé a charlar con él. Le conté cómo la práctica de Falun Dafa me ayudó a ser una mejor persona y a mejorar mi salud. "El año pasado, fui a Vietnam a visitar a mis padres. En ese tiempo, había practicado Falun Dafa por menos de un año, pero mi madre apenas podía reconocerme, dijo que me veía mucho más joven y más bonita", expliqué.

Antes de irme, escribí "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" en un pedazo de papel y lo dejé al lado de su cama.

Al mediodía del día siguiente, fui a verlo de nuevo con una copia de Zhuan Falun en francés. Cuando llegué, me di cuenta de que la temperatura había bajado. Tong todavía estaba en la cama, pero sólo tenía una manta encima.

"Me siento mucho mejor ahora después de recitar las palabras que escribiste", dijo. "¡Gracias! Incluso salí esta mañana y compré algo de comida". Me alegré mucho por él.

Esa tarde, tosió un poco de sangre y fue a hacerse un test. Dio positivo y fue internado de inmediato. Le recordé que siguiera recitando las frases.

Siguió mi consejo y se puso cada vez mejor. Al día siguiente, todos sus síntomas desaparecieron. Dejó de toser y la fiebre desapareció. Dos días después, me llamó para decirme que ya estaba en casa.

Tong también comenzó a leer Zhuan Falun y planea ir a un sitio de práctica para aprender los ejercicios cuando termine el período de permanencia en casa.

Un amigo de mi tío

Más de 20 personas de mi familia practican Falun Dafa. A menudo le contamos a otros familiares acerca de la práctica y ellos saben que uno será bendecido por abrazar los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

En abril, mi tío de 79 años me llamó para decirme que su amigo Nguyen Tu Thai había sido recientemente diagnosticado con cáncer de garganta y el coronavirus. Recordando los beneficios de Falun Dafa que le había explicado anteriormente, él quería saber si había algo que pudiera hacer para ayudar a su amigo.

Le dije las frases y le expliqué que, si el tailandés podía recitarlas sinceramente, los milagros podrían ocurrir.

A la mañana siguiente, Thai llamó a mi tío para decirle que se sentía mucho mejor. Dos días después, los síntomas desaparecieron y le dieron el alta.

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