(Minghui.org) Soy un practicante de Falun Dafa que nació en la décda de los noventa.

Iluminación a través de un sueño

Recientemente mi abuela materna, que también es practicante de Falun Dafa, tuvo un sueño. En el sueño, yo estaba con ella. Vio un vasto océano y deslizamientos de lodo viniendo hacia nosotros. Mi abuela quería que corriera con ella, pero después de correr un rato, me negué a seguir corriendo. Mi abuela siguió corriendo. Cuando miró atrás, veía la corriente de agua y los aludes acercándose mucho a mí. Corrió de vuelta hacia mí, y luego me agarró y tiró de mí. Saltamos por encima de una profunda zanja hecha por la corriente de agua y empezamos a correr por nuestras vidas.

Pasamos por delante de una aldea, y todavía había muchos aldeanos. Mi abuela transformó su boca en unos grandes altavoces, y gritó: "¡Seres conscientes, corran ahora, aludes y una gran corriente de agua vienen hacia ustedes, corran ahora!". En la primera casa que vio, abrió las puertas a empujones y le dijo a la gente: "Se avecinan aludes, ¡corran ahora!". No importaba la forma en que mi abuela les avisara, no la creían ni parecía importarles.

Al volver a la carretera, mi abuela vio a dos personas y dijo: "Se avecina una gran corriente de agua y un alud, ¡corran ahora!". Uno de los espectadores dijo con incredulidad: "No veo ninguna corriente de agua ni ningún alud". Mi abuela y yo seguimos corriendo. Subimos a una colina y vimos un poste negro que se elevaba del suelo, que emitía gas venenoso. Mi abuela tenía una bolsa de plástico con la que nos cubrió la cabeza a los dos. Dentro de la bolsa de plástico podíamos respirar aire limpio y fresco. Evitamos el gas venenoso y vimos que se propagaba en todas las demás direcciones. Miramos detrás de nosotros y vimos que muy pocas personas nos seguían.

Entonces vimos una yurta mongola, abrimos la puerta y entramos. Alguien se acercó a nosotros y dijo que teníamos que mostrarle las plantas de nuestros pies, para que pudiera comprobar nuestra cualidad innata. Otros estaban muy contentos después de ser revisados por su cualidad innata, pero en cuanto a mí, todavía me sentía somnoliento, y mis pies estaban entumecidos. Un poco más tarde, alguien llamó a la puerta. Mi abuela preguntó: "¿Qué está pasando?". Alguien en la yurta dijo que la gente de afuera estaba tratando de entrar. La persona que estaba revisando mi pie dijo: "Nadie puede entrar ahora. Es demasiado tarde". Poco a poco, dejaron de llamar a la puerta.

Fue durante nuestros ejercicios matutinos cuando mi abuela me contó este sueño. Quería contarme el sueño porque se dio cuenta de que yo era perezoso y no quería practicar los ejercicios. Después de hacer los ejercicios, pensé en lo que pasó en el sueño. Con el peligro inminente justo delante de mí, todavía me veía inquieto y distraído. Incluso tuve que ser arrastrado por un practicante y no sentía preocupación cuando alguien revisaba mi cualidad innata. Me di cuenta de que necesitaba tener la mente más clara.

En el último tiempo, me interesé por ver qué decían los medios de comunicación sobre el almacenamiento de alimentos, bienes y otros materiales. Empecé a almacenar alimentos y bienes comprándolos en Internet, o en tiendas sin decirle a mi abuela. También me interesé en usar cupones y buscar las tiendas más baratas. Si compraba algo a un precio decente, me sentía muy satisfecho. ¿No es esto un apego a la ganancia personal y al beneficio? Además de eso, empecé a compartir con mi colega qué tipo de arroz podía almacenarse más tiempo, dónde comprar materiales baratos, o qué había en las noticias de hoy. Todo esto era para presumir de mí mismo.

No podía concentrarme en el estudio del Fa tanto tiempo como antes y no podía seguir practicando los ejercicios. También me quedaba atrás en hacer las tres cosas. En aquel entonces, dejaba mi smartphone en mi lugar de trabajo, y traía a casa un modelo de móvil más antiguo. Cuando llegaba a casa, solía leer libros. De esta manera, me restringía de estar apegado a los celulares y de buscar las noticias. Sin embargo, empecé a llevar el móvil a casa, y estaba constantemente en el teléfono. Incluso empecé a ver dramas de televisión.

Una mañana mientras practicaba los ejercicios, recordé el Fa del Maestro:

Por lo tanto, antes de alcanzar la perfección, siempre tendremos pensamientos y comportamientos humanos comunes durante el curso de nuestra cultivación” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Singapur).

“Creo que todos entienden el principio del cual acabo de hablar. Algunos pueden pensar, “oh, ahora entiendo porque uno podría tener malos pensamientos a través de todo su proceso de cultivación. De ahora en adelante no me preocuparé acerca de eso, ya no les tengo miedo. Los dejaré simplemente que hagan lo que quieran”. ¡No, no deben hacer eso! Siendo ustedes cultivadores, si no se controlan en el nivel superficial, será lo mismo que no cultivarse. Así se relacionan estas cosas” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Singapur).

Me di cuenta de que necesitaba vigilar mis pensamientos. Nunca tomé la iniciativa de cultivar mi estado mental, en cambio lo ignoraba, no le daba importancia y no me preocupé por mi conciencia principal. Cuando veía las noticias, seguía a la multitud pensando ciegamente: "¿Me moriré de hambre? ¿Se inflarán los precios? ¿Perderé mi trabajo? ¿Cómo me mantendré económicamente? ¿Qué le pasará a mi familia?". Utilizando todo tipo de métodos ordinarios para sufrir menos durante esta epidemia, nunca pensé que esta fuera una oportunidad para mejorar, y para eliminar los pensamientos ordinarios. Por lo tanto, me dije que no debía aceptarlo, y que debía dejar de lado las cosas ordinarias de una vez por todas. Sin embargo, todavía estaba perdido en la sociedad ordinaria. Después de darme cuenta de lo que debía hacer, empecé a concentrarme en mis pensamientos, eliminando todo lo que no era recto para un cultivador.

Shifu dijo:

“En el pasado, esa persona que practicaba el xiulian, después de trepar hasta la cueva con una cuerda, la cortaba y hacía el xiulian allí, y si fracasaba en su xiulian, moría dentro de la cueva. Al no tener agua ni comida, él simplemente aplicaba un método singular de xiulian en un ambiente extremadamente singular como este” (Octava Lección, Zhuan Falun).

Creía que los cultivadores del pasado llevaban una vida dura. Si no alcanzaban la consumación en la cueva en la que se estaban cultivando, morirían dentro de la cueva. Si hubiera sido yo, ¿habría aflojado en la cultivación? La respuesta es no. Porque si uno no fuera diligente, moriría en esa cueva.

Seguí buscando la razón por la que me cultivaba. Shifu dijo:

“Muchos de nosotros abrigan un tipo de corazón de obtener verdaderamente el Dao, que es, por supuesto, el propósito del xiulian; la meta final del xiulian es precisamente obtener el Dao y la Perfección" (Primera Lección, Zhuan Falun).

La muerte no puede compararse con no poder llegar a la perfección. No ser capaz de asimilarse con el Fa es mucho peor que no poder salir de la cueva. Sin embargo, sigo pensando en la muerte y en no poder salir de la cueva. El miedo a la muerte es un apego, un apego al egoísmo. ¿Es esta una cultivación falsa?

Este apego es un reflejo de no ser diligente en la cultivación. Debido al cómodo entorno, mi cultivación comenzó a aflojar. En ese entonces, cuando el mal estaba desenfrenado, yo estudiaba el Fa siempre que había un problema. Pero, eso era solo para deshacerme de mi propio sufrimiento. Mi cultivación no era pura, usaba Dafa para apaciguarme y tenía el corazón de búsqueda. Sentía remordimiento en mi interior. Después de ser consciente de este apego, ajusté la base de mi cultivación. La base de la cultivación es obtener el Dao y alcanzar la perfección, cultivar todos los pensamientos egoístas y asimilarse a Dafa. En cuanto a mí, si me cultivo falsamente, todo será en vano.

Cultivándome en mi lugar de trabajo

Cuando mi supervisor y mis colegas en el trabajo expresaban sus ideas y pensamientos sobre sí mismos, pensando que sus ideas eran las mejores, siempre estaban forzando sus ideas a otra persona. Dando un paso atrás y reflexionando sobre mí me di cuenta de que yo hacía exactamente lo mismo. Cuando expresaba mis ideas, quería que la gente estuviera de acuerdo conmigo, y que estuviera de acuerdo que mis ideas eran absolutamente correctas. Esta es la mentalidad de presumir. Cuando me trataban injustamente en el trabajo, lloraba en casa, quería dejar mi trabajo y encontrar uno mejor. Mi abuela decía: "Supongamos que lo dejas, tu próximo trabajo seguirá siendo igual que este. Habrá supervisores como el que tienes ahora".

Shifu dijo: “Aunque eres un Dafa dizi, tu trabajo en la sociedad no es cultivación, pero tu cultivación se reflejará en tu trabajo en la sociedad” (Exponiendo el Fa en San Francisco, 2005).

En el fondo sabía que mi lugar de trabajo no me molestaba, que era porque tenía que eliminar todos mis apegos después de mirar hacia adentro, y elevar mi xinxing.

Una vez mi supervisor trajo unos higos de casa y los distribuyó a todos. Tan pronto como vi mis incomibles higos rotos en mi escritorio, me enfadé. Los higos de la mesa de mi colega se veían bien y eran comestibles. Pensé: "Esto es injusto, él siempre trata mejor a los demás. Limpio el lugar de trabajo todos los días y me quedo con las tareas sucias y cansadoras, además de que mis colegas hacen menos trabajo que yo. Está bien si no me haces un cumplido. Pero, ¿por qué tienes que seguir tratándome así? Esto es demasiado". Cuanto más lo pensaba, más me enojaba.

Después de calmarme decidí que la gente común tiene su propio estado de ánimo y nivel de iluminación, así que ¿por qué debería discutir con ellos? ¿No se me mueve el corazón cuando miro hacia afuera y me fijo en los defectos de los demás? A veces cuando eres maltratado por alguien, tal vez lo has maltratado mucho en una vida anterior. Empecé a mirar hacia dentro, y encontré muchos apegos como el resentimiento, los celos, el ser materialista, el requerir que la gente me devuelva favores, el egoísmo, así como poner por delante de los demás lo que pienso y lo que siento. Existe una mentalidad egoísta detrás de todos estos apegos. Después de desenterrar estos apegos, no me sentí tan enojado.

Shifu dijo: “Vivir por esta bocanada de qi, piensen todos, ¿no es agotador vivir así? ¿No resulta sufrido?” (Novena Lección, Zhuan Falun).

Después de leer una experiencia en la que una practicante compartió que recogió un clavo que cayó al suelo en su lugar de trabajo, limpié mi lugar de trabajo, recogí un alfiler y lo puse en la basura. Pensé que, si la practicante recogía algo tan pequeño como un clavo, yo también podía hacer lo mismo. Anteriormente, me montaba en la motocicleta de la empresa y cargaba mi móvil en mi lugar de trabajo. Sin embargo, todo lo que pertenece a mi lugar de trabajo debe permanecer allí. Además, todos cargaban sus celulares en el lugar de trabajo, pensando que es más conveniente. Pero en realidad, esto es un apego al interés personal, ya que así se ahorra electricidad en casa.

Pensando en mi apego al interés propio, también hubo un incidente que ocurrió recientemente. Fui a comprar judías verdes y vi que los precios estaban bastante inflados, pero aun así compré. A la hora de pagar, la cajera se equivocó en 10 yuanes. Fingí no darme cuenta y me fui. ¿No era esta otra forma de engañarme a mí mismo? Volví y le pregunté a la cajera si me había devuelto mal el cambio. Comprobó el precio y dijo: "Calculé mal, podrías haberte marchado. Eres realmente una buena persona". Mientras arreglaba la diferencia de precio, no dejaba de decir: "Eres realmente una buena persona". Decidió también darme un puñado extra de judías verdes. Le dije: "Yo cultivo Falun Dafa, los practicantes de Falun Dafa son todos así". En ese momento, sentí que mi apego al interés personal había sido eliminado.

Nada ocurre por casualidad en la cultivación

En casa, recordé lo que pasó. Todo sucedió por una razón. Nada ocurre por casualidad en la cultivación ya que todavía tengo el apego al interés personal. Al principio, pensé que el precio de las judías verdes era demasiado caro, pero aun así las compré. Cuando la cajera calculó mal, fue para probar si mi corazón se movía o no. Cuando la cajera me dio unas judías verdes extra, las acepté voluntariamente, y pensé que no estaba mal ya que no las pedí. Sin embargo, podría haberlas rechazado, no fui lo suficientemente firme, y mi apego al interés personal aun existía. Necesitaba hacerlo mejor la próxima vez.

Me di cuenta de que hay reglas y normas para las personas comunes, pero en medio de la distorsionada sociedad de hoy en día, estas reglas y normas no pueden ser reguladas. ¿Cómo puedo estar inculcando estas cosas negativas en mí?

Antes pensaba que había tantos apegos humanos, como el apego al interés personal, la lujuria, los celos, el rencor y el pensamiento de que la cultivación era muy difícil. Ahora, entiendo que la raíz de todo esto es: el egoísmo. El egoísmo tiene diferentes variantes, pero al final es todo lo mismo. Después de descubrir los orígenes de todos mis apegos, eliminarlos no fue tan difícil como pensaba.

Pensando en mi camino de cultivación, recuerdo que experimenté muchos altibajos. De ser un cultivador ingenuo pasé a ser capaz de mirar hacia adentro. Dafa me ha cambiado verdaderamente, eliminar estos apegos es ahora mucho más fácil.