(Minghui.org) Con más de un millón de casos confirmados de coronavirus en todo el mundo, cada vez más personas han dirigido su atención hacia China, cuyo encubrimiento por parte del régimen y la desinformación sobre el brote que comenzó en Wuhan han hecho que el virus infecte a más de 200 países.

En Alemania, uno de los países más castigados, se han infectado más de 81.000 personas y casi 4.000 han muerto. Dos artículos alemanes recientes han destacado la responsabilidad del partido comunista chino (PCCh) en esta calamidad.

Un gran número de casos no reportados

Die Welt (El Mundo), un importante periódico alemán que se vende en unos 130 países, publicó el 30 de marzo de 2020 un artículo titulado "Crisis del Coronavirus: Cómo China quiere utilizar la pandemia con fines propagandísticos".

"Sin el encubrimiento de Beijing, la pandemia del coronavirus nunca hubiese sucedido. Pero ahora la república popular se presenta como un salvador e inicia una campaña de propaganda", comenzaba el artículo.

El 19 de marzo, la comisión nacional de salud de China informó de cero nuevos casos de coronavirus transmitidos a nivel local por primera vez en los últimos dos meses, pero contabilizó 34 "casos importados". Esta pauta de casi cero casos transmitidos localmente y un puñado de casos importados continuó en las semanas siguientes, y el total de casos confirmados en China se ha mantenido básicamente igual (cerca de 82.000) en las últimas semanas.

El artículo de Die Welt puso en duda los datos de China: "La cuestión es si una epidemia puede ser contenida tan radicalmente en dos meses que prácticamente no haya nuevas infecciones en un país de 1.400 millones de personas. O si China presenta al mundo cifras que no reflejan la realidad, sino más bien los deseos del partido comunista".

En el artículo de Die Welt se citaba un informe de la revista china Caixin en el que se afirmaba que había más de una docena de infecciones cada día en Wuhan, pero que esos casos no se notificaban porque los pacientes no presentaban síntomas.

El citado informe de Caixin indicaba: "Es cierto que hasta el 85 por ciento de los infectados por el coronavirus no muestran ningún síntoma o solo leves". A su vez, el informe de Caixin citaba a Radio Televisión Hong Kong (RTHK) diciendo que los hospitales de Wuhan se habían negado a proporcionar tratamientos a algunos pacientes con coronavirus.

Los números no cuadran

El artículo de Die Welt citaba otro artículo de Caixin que insinuaba que las cifras oficiales del número de muertos en China no cuadraban. El artículo de Caixin decía que las funerarias de Wuhan habían empezado a permitir que los residentes pudieran retirar las cenizas de sus familiares fallecidos por el virus y que solo una funeraria repartía 3.500 urnas en un día. Sin embargo, el número oficial de fallecidos en Wuhan es de tan solo 2.531. El artículo del Caixin recordaba al lector que además esta era solo una de las ocho funerarias de Wuhan.

El artículo de Die Welt también citaba a Jeremy Wallace de la Universidad de Cornell diciendo que los números juegan un papel crítico en la política de China. "Una vez que la misión de propaganda del gobierno central de ganar la 'guerra popular' contra el virus se hizo evidente, los números cambiaron para lograr esa visión", escribió en un artículo para The Washington Post el 23 de marzo. "Tales cambios probablemente serían sutiles, no cientos o miles de muertes ocultas, sino que excluirían las muertes que podrían atribuirse a otros tipos de neumonía o insuficiencia cardíaca, por ejemplo".

Advertencias ignoradas por la OMS

La Organización Mundial de la Salud (OMS) también desempeñó un papel especial en el desarrollo de la pandemia, escribió en su artículo el Die Welt. Cuando los profesionales médicos de Wuhan identificaron el brote el 30 de diciembre de 2019, sus esfuerzos por dar la alarma fueron castigados duramente.

El 7 de enero se notificó al máximo dirigente comunista Xi Jinping, pero el CDC chino no anunció la epidemia hasta el 20 de enero, tres días antes de que 60 millones de personas fueran encerradas en la provincia de Hubei.

Aunque no es miembro de la OMS, Taiwán "advirtió a la OMS el 31 de diciembre de una posible transmisión del nuevo virus de persona a persona". Su advertencia fue ignorada por la agencia, que también se negó a responder a una pregunta relacionada con Taiwán durante una entrevista con RTHK, mientras elogiaba a China por lograr "quizás la contención de enfermedades más ambiciosa, ágil y agresiva de la historia".

Pero la pérdida es real, y los expertos estimaron que la mayoría de las infecciones podrían haberse evitado si China hubiera actuado a tiempo. "Si en China hubiese libertad de prensa, el coronavirus podría no ser una pandemia", declaró Reporteros sin Fronteras el 24 de marzo.

La propaganda como herramienta para recuperar el control

Aunque la asamblea popular permaneció suspendida sin una fecha alternativa, Hubei levantó su bloqueo el 26 de marzo. Mientras tanto, en los medios de comunicación controlados por el gobierno aparecen toneladas de artículos elogiando a Xi y al partido.

El artículo de Die Welt escribió que solo el 24 de marzo, el People's Daily (el vocero del PCCh) tuvo tres de sus siete artículos en primera plana cantando alabanzas a Xi. Taisu Zhang, un profesor de la Universidad de Yale, dijo que el PCCh lo hizo para recuperar el control, tanto a nivel nacional como internacional.

Para algunos funcionarios europeos, los esfuerzos de China parecían funcionar. Uno de ellos es el Ministro de Asuntos Exteriores italiano, que publicó un video en vivo en Facebook en el que celebraba la llegada de los bienes de socorro chinos a Italia.

El PCCh se ha estado describiendo como un salvador que ayuda a otras naciones durante la crisis. "Prácticamente todas las historias en la primera página de sus órganos de propaganda en el extranjero anuncian los esfuerzos de China para ayudar a diferentes países con bienes e información, al tiempo que destacan la superioridad del enfoque de Beijing", escribió una revista estadounidense el 18 de marzo.

"China está en todas partes, el país donde estalló el virus y que tiene la mayor parte de la culpa de su propagación mundial, podría en última instancia salir fortalecido de la pandemia", advirtió el artículo en Die Welt.

T-online: Propaganda del coronavirus del PCCh

"China afirma que ha superado la crisis del coronavirus. Pero las evidencias están aumentando, ya que los números del país no son correctos", informó T-online, el portal de noticias en línea más grande de Alemania, el 31 de marzo en un artículo titulado "Propaganda del coronavirus en China: Un sistema enfermo".

"Mientras que otras partes del mundo están sufriendo por el creciente número de personas infectadas, China está tratando de ganar soberanía sobre la crisis y utilizarla internacionalmente en su política de poder", escribió el artículo. "El actual retorno a la vida cotidiana en China es la caricatura de un sistema enfermo que está completamente subordinado a la ideología política".

Aunque los funcionarios afirmaron que el número de muertos en el epicentro de Wuhan fue de 2.531, "algunos residentes de Wuhan estiman que el número de muertos por coronavirus podría ser de 26.000, basándose en la cantidad de urnas que se entregan y distribuyen en toda la ciudad", señala el artículo citando un informe de Newsweek del 29 de marzo. "Los ciudadanos en las redes sociales chinas han dicho que siete funerarias de Wuhan probablemente distribuirán 3.500 urnas por día en promedio del 23 de marzo al 4 de abril, fecha en que se celebra Qingming, el tradicional festival de barrido de tumbas. Según esta estimación, se repartirán 42.000 urnas en un período de 12 días".

Si China hubiera reaccionado más rápido, la escala de la pandemia podría haberse debilitado, incluso en el extranjero. "Pero en lugar de admitir sus propias omisiones o esbozar los efectos a los mercados de la vida silvestre, el probable origen de la pandemia del coronavirus, China está ahora tratando de explotar la crisis en términos de política exterior", publicó el artículo de T-online.