Residente de EE.UU. pide la liberación de su cuñada que se ha vuelto incapaz de reconocer a su familia después de dos años de detención por su fe

(Minghui.org) Cuando después de dos años la familia de la Sra. Wang Haiyan pudo finalmente visitarla por primera vez, se les rompió el corazón al ver a la mujer, que antes era extrovertida y enérgica, ahora se había vuelto indiferente a las preguntas y no pudo reconocer a ninguno de sus familiares. Su hijo lloró al ver a su madre.

Sra. Wang Haiyan antes de ser arrestada

La residente de la ciudad de Qinhuangdao, provincia de Hebei, está cumpliendo condena en la prisión de mujeres de la provincia de Hebei en la ciudad de Shijiazhuang por su fe en Falun Dafa, una disciplina espiritual que ha sido perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

Según una guardia de la prisión, la Sra. Wang no habla en absoluto y es incapaz de cuidarse de sí misma, en particular de la higiene personal.

Fue arrestada el 20 de mayo de 2017 después de haber sido reportada por colocar carteles sobre Falun Dafa.

El 20 de noviembre de 2018, el tribunal del distrito de Haigang la condenó a cuatro años y tres meses y le impuso una multa de 3.000 yuanes. Su apelación fue rechazada por el tribunal intermedio de Qinhuangdao en marzo de 2019, y fue admitida en prisión cuatro meses más tarde.

A la familia de la Sra. Wang no se le había permitido visitarla hasta hace poco. No se sabe a qué torturas ha sido sometida en los últimos dos años que la han llevado a su estado actual.

La cuñada de la Sra. Wang, la Sra. Lu Caiyun, que actualmente reside en los Estados Unidos, pidió su liberación durante la cumbre de las Naciones Unidas celebrada en Nueva York del 24 al 28 de septiembre de 2019.

La Sra. Lu Caiyun pide la liberación de la Sra. Wang durante la concentración en Washington DC el 18 de julio de 2019, marcando los 20 años de persecución contra Falun Dafa.

La Sra. Wang comenzó a practicar Falun Dafa en diciembre de 1996. Ella le da crédito a la práctica por traerle la paz interior y deshacerse de su mal genio. Su lesión en el tobillo y la infección del oído que causó una pérdida auditiva casi completa también se curaron al hacer la meditación de Falun Dafa.

Por negarse a renunciar a su fe, ha sido arrestada y detenida repetidamente en los últimos 20 años.

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