(Minghui.org) Tengo 40 años de edad, y la sensación de que el tiempo pasó en un parpadeo. Mirando hacia atrás, nunca gané nada, salvo algunas pocas cosas materiales

Me pregunto si después de otros cuarenta años aún seguiré teniendo nada. Si no hubiese despertado, todo seguiría igual.

Me gustaría compartir con ustedes cómo es que desperté a las mentiras del partido comunista chino (PCCh) y cómo empecé a apoyar a Falun Dafa (también conocido como Falun Gong)

Matrimonio complicado

Después de casarnos, mi esposo y yo fuimos a vivir a una casa antigua en una aldea remota. Quedaba a más de 30 kilómetros de mi trabajo. Me trasladaba en autobús; salía temprano en la mañana y llegaba tarde en la noche.

Discutíamos con frecuencia. Mi marido se entregaba fuertemente a la bebida, a las apuestas y a los juegos. En varias ocasiones acordó dejar sus malos hábitos, pero sus promesas no duraban mucho. A veces me arrepentía de haberme casado con una persona así.

Pocos años después tuvimos un hijo y nuestra situación económica mejoró. Teníamos una casa y un automóvil. La satisfacción por tener cosas materiales reemplazó mi vacío espiritual y me ayudó a olvidar las preocupaciones y tristezas.

La salud de mi esposo desmejora

La salud de mi esposo comenzó a deteriorarse a medida que se hacía más viejo. Sufría de indigestión crónica y de dolores a lo largo de su espalda, cuello, pecho y cintura. Todo esto afectaba en gran medida su vida cotidiana.

Intentó con varios tratamientos médicos: medicina china, masajes, terapias de moxibustión, acupuntura y más. Todos estos tratamientos solo le dieron un alivio temporario, pero no funcionaban realmente.

Predestinación

En el décimo aniversario de nuestro matrimonio, mi esposo me dijo: “Trabajé muy duro toda mi vida y también he sufrido mucho dolor. Tú no tuviste que trabajar tanto y tu vida es más fácil que la mía. ¿Cómo explicarías esto si no es con la predestinación? ¿Estuvo nuestro matrimonio también predestinado?”.

“Solo pido un deseo”, dijo después de prender una vela. “Quiero entender el sentido de la vida”.

Nunca antes había pensado seriamente sobre el destino. No sabía la razón del por qué había venido a este mundo, porque no era una cosa que dependiera de mí.

Estuve de acuerdo con él: El destino está determinado por el Cielo

Mi esposo se vuelve practicante

Una tarde, cuando regresé del trabajo, vi una copia del Zhuan Falun en mi cama. Estaba confusa.

No sabía mucho sobre Falun Dafa. Solo había visto que mis padres lo practicaban cuando yo era joven.

Después del 20 de julio de 1999, en la televisión y los periódicos comenzó a propagarse mucha información calumniosa. La propaganda hizo sentir a las personas como si estuvieran corriendo peligro si tenían contacto con Falun Gong. Sentí miedo de solo ver las palabras “Falun Gong” en casa.

Perdí el temperamento con mi esposo cuando llegó. Lo interrogué: “¿Para qué practicas esta cosa?”.

“¿Por qué esta mal practicar Falun Gong?”, me contestó.

“¡El partido [comunista] viene prohibiendo a las personas practicarlo durante años! No deberías hacerlo”, grité.

“Siempre escuchamos del partido sobre lo malo que es Falun Gong. Ahora quiero verlo por mí mismo”.

Estaba furiosa. “¿Cómo podrías vivir sin el PCCh? ¿No es el PCCh quien te paga el salario?”.

Permanecimos en un punto muerto durante un tiempo.

El poder curativo de Falun Dafa

Después de practicar Falun Gong por un tiempo, las enfermedades de mi esposo desaparecieron. Recuperó su salud y se sentía ligero. Me contó que el Maestro Li (fundador de Falun Gong) había purificado su cuerpo.

Ahora tenía una sonrisa de alegría, una sonrisa que solo una persona saludable podría tener. Yo también sonreía.

También fui testigo de otros cambios. Dejó de beber, de apostar y de jugar con videojuegos. Ayudaba con los quehaceres del hogar y templó su mal temperamento.

Viendo estos milagros y la grandeza de Dafa, no pude evitar exclamar: “¡Falun Dafa es bueno! ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia (principios fundamentales de Dafa) es bueno!”.

Despertando a las mentiras del PCCh

Para ayudarme a entender la verdad sobre Falun Gong, mi marido me mostró varios videos, como “Fuego Falso”, “Sustracción de órganos a practicantes vivos de Falun Gong”, “Contamos la verdad” y otros. También miramos otros programas que exponían la propaganda del PCCh, hablaban sobre la historia moderna de China y analizaban la naturaleza diabólica del PCCh.

A partir de estos programas, aprendí sobre el mundo desde una perspectiva diferente. Pude entender que había sido profundamente influenciada y atontada durante décadas por la cultura del PCCh.

No me podía imaginar cómo un niño creciendo en esta sociedad podía llegar a tener una visión correcta de la historia, el mundo humano y el universo.

Fui engañada hasta el punto de llegar a pensar que no podía vivir sin el PCCh, ya que el partido me daba trabajo y un sueldo. Pero en realidad, al sueldo me lo ganaba con mi esfierzo.

Bajo el régimen del PCCh, el estándar moral de las personas se derrumbó precipitosamente y la corrupción es rampante. Comprendí que las personas tendrían una vida mucho mejor sin el PCCh.

A medida que mis pensamientos hacia el PCCh fueron cambiando, ¡pude entender cuán maligno es este!

Denunciando al PCCh

El Maestro Li nos enseña el significado de “perder y ganar” en la Lección Cuarta de Zhuan Falun:

“…lo que quiere la gente común es simplemente obtener beneficios personales y vivir bien y cómodamente. Nosotros, quienes refinamos gong, no somos así sino justamente al revés, no nos interesa perseguir aquello que la gente común quiere tener; en cambio lo que obtenemos es algo que las personas comunes por más que lo deseen, no conseguirán, a menos que se cultiven y refinen”.

Mi esposo dijo: “Lo que el Maestro nos da es la cosa más preciada del universo. Es una escalera al Cielo. Debo atesorar esta oportunidad sin precedentes”.

Mi esposo había buscado el éxito material siendo joven. Una vez que empezó a practicar Falun Gong, comprendió que su búsqueda era vacía y que las personas deberían vivir para retornar a su verdadero ser. Por eso eligió el camino de la cultivación.

Finalmente entendí que Falun Dafa es bueno para las personas y sus familias, para la sociedad y la nación. Los practicantes son un grupo de cultivadores que siguen los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

La propaganda del PCCh difama a Falun Gong. Las personas tienen que reconocer su maldad y despertar rápidamente.

Ya no tengo dudas. Sin demoras le pedí a mi esposo que me ayude a renunciar al PCCh para ganar una nueva vida.