(Minghui.org) Me convertí en una practicante de Falun Gong en 2008. Después de que empecé la práctica, me emocioné mucho por los profundos principios de las enseñanzas de Falun Dafa y a menudo lloraba. Finalmente entendí el significado de la vida, quién era y por qué existía. Han pasado seis años desde que obtuve el Fa y, siguiendo las enseñanzas, mi carácter ha mejorado. Salvar a la gente se ha convertido en parte de mi vida y lo hago con alegría.
Me preocupaba que no tuviera tiempo para alcanzar la consumación porque empecé tarde la práctica. Mi marido trabajaba fuera de la ciudad y yo tenía que ir a trabajar, cuidar a nuestros dos hijos y a mis padres y hacer todas las tareas del hogar. Estaba tan ocupada que no tenía tiempo para otra cosa y me enojaba fácilmente.
Mi hijo estaba en la escuela primaria y un día, cuando hacía su tarea, me pidió que le ayudara. Le contesté enojada y le dije que la hiciera él sólo y que me estaba interrumpiendo del estudio del Fa. Comenzó a llorar y me acusó que sólo me preocupaba por el Fa. En ese momento, supe que no sólo podía estudiar el Fa, tenía que hacer lo que el Fa enseñaba, sin descuidar mis responsabilidades. Tenía que ser una buena persona y una buena madre, compasiva y tolerante. Tenía que dejar de ser "dura" –esta era una noción deformada.
Dejé todo y fui a ayudarle a mi hijo con su tarea. De ahí en adelante, siempre le contesté a sus preguntas con paciencia. Cuando quería ir a pasear, lo acompañaba y conversábamos. Hablamos de Falun Dafa y de lo que significaba salvar a la gente. Después de que entendió la verdad sobre la persecución, empezó a acompañarme cuando salía a decirles a los demás los hechos sobre Falun Dafa. Se quedaba a mi lado en silencio, escuchando. Si se nos hacía tarde, no se quejaba. En la escuela, incluso persuadió a sus compañeros para que renuncien a la liga de los jóvenes pioneros (organización afiliada al partido comunista chino). Mi hijo empezó a estudiar las enseñanzas cuando encontraba tiempo y se volvió cada vez más compasivo. Yo sabía que se había beneficiado de la práctica. Mi relación con él mejoró como se describe en Zhuan Falun: “la luz del fo ilumina todo y hace la moral armoniosa y pura“.
Poco después de casarnos, mi marido se fue a trabajar a otra ciudad. Como él no estaba con nosotros, básicamente vivíamos dos vidas separadas. No hablábamos mucho y parecía que tampoco nos preocupábamos mucho el uno por el otro. Él raramente venía a casa. Este estilo de vida nuestro duró 12 años. Antes de empezar a practicar Falun Dafa, lo odiaba. Pensaba que era frío y me sentía muy desafortunada por haberme casado con él. Cuando venía a casa, lo ignoraba. Él me pedía dinero y le hacía firmar un pagaré antes de dárselo. Le hablaba con frecuencia del tema del divorcio.
Después de convertirme en una practicante, supe que tenía que mejorar mi vida familiar. Debía ser considerada con todos los demás y tener un corazón altruista, empezando en mi casa. Empecé a comprender que la vida de mi marido no fue fácil tampoco. Estaba solo y trabajaba en un entorno altamente competitivo. No tenía a nadie con quien hablar, mientras que yo tenía a mis padres y a mis hijos.
Mi corazón frío e indiferente se derritió y me sublimé en el Fa. Empecé a llamar a mi esposo a menudo y le preguntaba acerca de su negocio. Cuando venía a casa, nos ibamos a pasear juntos y hablábamos. Con el tiempo, vino a casa más a menudo y me llamaba para preguntarme acerca de cómo iban las cosas. Nos parecíamos cada vez más a una familia. Saludaba a los otros practicantes cuando me visitaban en casa y nos dejaba hablar en privado. Me recordaba en varias ocasiones que tuviera cuidado cuando salía a aclarar la verdad. Cuando me detuvieron ilegalmente, dejó a un lado su negocio y visitó diferentes oficinas gubernamentales para pedir mi liberación. Cuando por fin llegué a casa, no se quejó, en cambio, él sólo me abrazó. Sabía que el Fa no sólo me había cambiado a mí, sino también a él.
Cuando visitamos a mis suegros durante el Año Nuevo, había alrededor de 20 familiares presentes. Mi suegro me elogió frente a ellos, diciendo cómo había acercado la familia, y que di todos mis ahorros para ayudar el negocio de su hijo, sin pedir nada a cambio. Dijo que alguien como yo era muy raro, y que él podía disfrutar de sus años de jubilación gracias a mí. Les dije a todos que Falun Dafa eliminó mi egoísmo y les pedí que recuerden que Falun Dafa y Verdad-Benevolencia-Tolerancia son buenos. Mi suegra recita ahora "Falun Dafa es bueno" todos los días.
Shifu me salvó del infierno, me limpió con el Fa y me dio una familia feliz. Me siento muy bendecida y agradecida.
"¡Les pido disculpas a los practicantes de Falun Dafa!"
Realmente no tenía mucho tiempo para aclarar la verdad. Hacía lo que podía en el camino hacia el trabajo y de regreso a casa. También hablaba con mis compañeros de trabajo. Tuve que eliminar mi miedo. Pasé de no atreverme a abrir la boca a poder hablar sobre Falun Dafa naturalmente.
Cerca del final del año 2013, llevé a mi trabajo 20 calendarios que me había dado un practicante para aclararles la verdad sobre Falun Dafa a mis compañeros de trabajo. Les di una copia a cada uno de mis colegas. Una joven que acababa de graduarse de la escuela rompió el calendario en pedazos y lo tiró a la basura justo delante de mí. Me miró con odio, pero no me molesté. Le sonreí y volví a mi escritorio, pensando en cómo podría salvar a una persona que fue engañada por la propaganda del PCCh y tenía tantos malentendidos sobre Falun Dafa.
Un día, se tuvo que quedar a trabajar hasta tarde. Yo hice lo mismo, así que pude hablar con ella a solas. Antes de irse, le pregunté: "¿Por qué destrozaste el calendario que te di?". Me di cuenta que ella pensaba que yo quería pelear con ella. Le sonreí y le pregunté: "¿Si hubiera sido un calendario con animales o paisajes, aún lo hubieras destrozado?". Dijo que no. Entonces le pregunté si lo hizo porque el contenido era sobre Falun Gong. Ella me dijo: "Falun Gong es ilegal, prohibido y proscrito por el gobierno".
Me senté y le expliqué lo que era Falun Dafa, le hablé de la auto inmolación en Tiananmen manipulada por el PCCh para incitar al odio entre la gente en contra de Falun Gong, y cómo Falun Dafa se practica en todo el mundo, ayudando que la virtud y la moralidad regresen en la sociedad. Le pedí que investigara acerca de la inscripción en una roca, que dice "El PCCh está condenado a su fin" y le dije que Jiang Zemin y su régimen han cometido crímenes atroces contra los practicantes de Falun Gong por torturarlos y robar sus órganos.
Mientras hablaba con ella, se acercaron dos hombres jóvenes quienes me escucharon atentamente. Se quedaron muy sorprendidos, porque eran cosas completamente opuestas de las que les habían dicho. Me hicieron preguntas y los dos acordaron que "¡El PCCh es malo!". Ambos renunciaron felizmente al PCCh y a sus organizaciones afiliadas. Les di unos folletos con información sobre la persecución y software que podría ayudarlos a navegar sitios web del extranjero. Ellos estaban muy agradecidos: "¡Este material es muy bueno, muchas gracias!".
Al día siguiente, en el trabajo, la joven me llevó a un lugar en donde nadie podría vernos. Me quería dar 100 yuanes para ayudar a los practicantes a producir materiales de clarificación de la verdad. "Ahora respeto a los practicantes de Falun Dafa. Aún sufriendo tanto, logran ahorrar dinero para hacer materiales, sin querer nada a cambio. Me arrepiento mucho por haber roto el calendario"; empezó a llorar en silencio. Le dije lo feliz que estaba porque ahora entiende la verdad. No tomé su dinero y le dije: "¡Mejor sé un portavoz para nosotros y dile a tu familia y amigos la verdad sobre Falun Dafa. Les vas a hacer un favor inestimable salvándolos". Ella asintió con la cabeza y me aseguró: "Definitivamente". Supe en ese momento que había mucha gente buena que fue engañada por la propaganda del PCCh y que nos está esperando para salvarla.
No me extraña que mi salud se está deteriorando
Cambié de trabajo. Mi nuevo jefe me dijo que la actual gerenta estaba muy enferma. Sentía frío todo el tiempo. Incluso con el calor del verano no dejaba que la gente en la oficina usara el aire acondicionado, y aún se ponía una manta en las piernas. Durante la hora del almuerzo descansaba en el balcón para estar en el sol. Debía esforzarse para hacer su trabajo debido a sus condiciones físicas y también tenía un temperamento terrible. El jefe estaba planeando despedirla en un par de semanas. Decidí ayudarla.
Comí el almuerzo junto con ella y hablamos. Descubrí que era una budista muy devota. Continuamos nuestra conversación al día siguiente. Le pregunté: "Eres una budista y una buena persona. La gente dice que ‘la luz de Buda rectifica todas las anormalidades’. ¿Qué pasó con tu salud?". Se preguntó también: "No lo sé. No daño a los demás y aún soy joven. ¿Cómo voy a vivir así el resto de mi vida?". Le pregunté cuántos años pensaba que tenía yo y supuso que unos 35 años. Le dije que tenía 46 años, diez años más que ella.
Le dije que solía tener migrañas, incontinencia y anemia severa y siempre tenía que llevar pastillas conmigo. Me envolvía en una manta después de bañarme en el verano y nunca encendía el ventilador, mucho menos el aire acondicionado. Aún así, estaba enferma todo el tiempo y tenía fiebre alta. Le dije que ahora mis dolencias se habían ido. Ella estaba muy emocionada y me preguntó cómo lo hice. Le dije cómo mejoré mi carácter con la práctica, lo que me permitió tener mayor energía. También le dije que en este momento de la historia ya no hay Budas que se estén ocupando del mundo secular. Le expliqué que en mi práctica no tomo medicinas. Le hablé de muchas cosas de niveles altos porque ella había leído muchas escrituras budistas y era capaz de entender y creer lo que le decía.
"Eso debe ser. Los budas en los que creía ya no están alrededor y hay muchas cosas malas en los templos. No me extraña que mi salud se está deteriorando. Tienes toda la razón. ¿Qué es lo que practicas y lees? ¿Puedo leer eso también?". me preguntó. Era sincera y ansiosa. Le dije que practicaba Falun Dafa. Estaba sorprendida: "¿Por qué persiguiría el gobierno una práctica tan maravillosa?". Rápidamente le hablé sobre la persecución ilegal de Falun Dafa y todos los crímenes que ha cometido el régimen de Jiang. Ella entendió lo que dije y renunció al PCCh y a sus organizaciones afiliadas. Me dijo que iba a comprar el libro Zhuan Falun y comenzar a practicar.
En el trabajo, salvar a la gente se volvió fácil y natural. El camino delante de mí se está expandiendo porque no tengo miedo y estoy verdaderamente altruista. Quiero que mis compañeros de trabajo sepan que practico Falun Dafa para que les pueda aclarar la verdad. Quiero decirles que Falun Dafa ha ampliado mi mundo y me hizo feliz. Mis compañeros de trabajo ven la bondad de Falun Dafa a través de mí.
Le agradezco a Shifu su salvación compasiva. Heshi.
Versión en inglés: http://en.minghui.org/html/articles/2014/11/21/146966.html
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