(Minghui.org) Dos alumnos comenzaron de repente una pelea cuando yo me estaba yendo de la clase. Los otros niños no los detuvieron, sino que comenzaron a alentarlos. Interferí con la pelea y los llevé a la oficina. Cuando les pregunté cómo comenzó la pelea, comenzaron a culparse entre sí. Yo no estaba contento con sus respuestas y demandé que ambos buscaran sus propias fallas.

Me di cuenta de que estaba enojado ¿por qué? ¿Por qué siempre les pedía a otros que miraran hacia dentro mientras que yo no lo hacía? Nada es accidental. Había conflictos entre los practicantes locales en ese tiempo, donde todos se culpaban entre sí, como estos dos niños.

Les pregunté si sabían qué era lo que los hacía pelear. Dijeron un par de cosas superficiales sobre con qué cosas no estaban de acuerdo, pero ninguno de ellos realmente quería indagar en la razón fundamental. Parecían estar ansiosos por irse lo más pronto posible y no querían que yo interfiriera.

Los regañé: “¿Pensaron en mí, su maestro? Comenzaron a pelear frente a mí”.

Diciendo eso, me di cuenta de que a veces los practicantes no se comportan como cultivadores tampoco, a pesar de que Shifu está al lado nuestro. A veces discutimos ferozmente frente a la foto de Shifu, defendiéndonos y culpándonos mutuamente. Algunos se enojan tanto que se van del lugar.

Inicialmente, ambos niños se habían dado un golpe, pero tan pronto como los demás niños comenzaron a gritar “Pelea, pelea”, se convirtió en algo más serio. Los que observaban parecían excitados de ver cómo la pelea se ponía más fea; estoy seguro de que la pelea no hubiera empeorado si los que miraban no la alentaban.

Hablé con los dos niños, y se dieron cuenta dónde estaba su error. Les pedí que se pidieran disculpas y que estrecharan sus manos. Ambos sonrieron y se fueron.

Entonces, ¿por qué me encontré con este incidente? Debe ser algo relacionado conmigo. Tenía que mirar hacia dentro y mejorar mi xinxing. Las viejas fuerzas son los que miran, alentando a los practicantes a tener conflictos. Intentan separarnos se ríen y excitan los apegos humanos. Cuando surge un conflicto, nos hacen pensar que siempre es la culpa del otro practicante, e intentan hacernos cambiar a la otra persona en vez de mirar hacia dentro. Las viejas fuerzas están contentas cuando nosotros estamos en caos y no trabajamos bien juntos.

Estaba avergonzado de mí. He estado practicando por tantos años pero aún no me comporto bien frente a mis estudiantes. Cuando los estudiantes no se comportaban bien, los criticaba y no los veía como un reflejo para mirar hacia dentro. No fue hasta hoy que me di cuenta de que tenemos que dejar ir nuestro ego y mirar hacia dentro incondicionalmente, dejando ir nuestros pensamientos, nociones y apegos humanos. Deberíamos formar un cuerpo y hacer bien las tres cosas que Shifu nos pide.  

Terminaré con un poema de Shifu (Hong Yin III):

Quién tiene razón, quién no
Cultivador practicante
Busca tú mismo los errores
Elimina todo tipo de corazones humanos
No te quedes atrás en grandes pruebas, pequeñas pruebas, no pienses en caer
El que tiene la razón es él
El que está equivocado soy yo
¿Por qué contienden?

Gracias Shifu por recordármelo gentilmente.