[Minghui Net] Pasé tres días en Flushing, Nueva York, aclarando la verdad sobre Falun Gong y ayudando a disipar las mentiras que han sido implantadas en las mentes de la gente por el Partido Comunista Chino.

Tan pronto como me enteré de que los miembros del Partido Comunista Chino habían montado un stand con folletos difamando a Dafa y a Shifu en una de las calles principales de Flushing, decidí desplazarme a la zona durante un par de días. Mientras aclaraba la verdad por las calles de Flushing, creo que aprendí mucho hablando con la gente cara a cara y compartiendo experiencias con los otros practicantes que estaban conmigo. Voy a tratar de contar varios incidentes de los que fui testigo, y también trataré de transmitir qué es lo que aprendí de ellos.

Un hombre de edad avanzada que no era chino, tomó una camiseta del stand que el PCCh había montado. La camiseta estaba impresa con palabras chinas difamando la práctica de Falun Dafa. Me acerque a él y le pregunté si entendía lo que estaba escrito en la camiseta. Dijo que no entendía y me pidió que se lo explicara. Después de que supo que llevando esta camiseta estaría diciendo que él estaba en contra del principio de Verdad-Benevolencia-Tolerancia inmediatamente la arrugó y prometió tirarla. El hombre, entonces me dio las gracias y se marchó. Un minuto después, regresó, cogió mi mano y me puso una pulsera, diciendo que estaba muy agradecido de que yo le hubiera ayudado a comprender la verdad.

Un hombre de mediana edad que no era chino y residente en Flushing, pasó mucho tiempo preguntándome sobre la razón por la que yo estaba repartiendo material informativo. Él dijo, Los chinos están luchando entre sí, ¿por qué quieres involucrarte en esto? Le hablé sobre la maravillosa práctica de Falun Dafa y sobre la ilegal y cruel persecución de Falun Gong en China. También le dije que tenía mucha suerte de haber nacido en un país libre donde la gente sólo conoce el régimen comunista en teoría y realmente nunca han tenido experiencia de él. También le explicé cómo yo había crecido bajo el régimen comunista en Rusia, donde la gente vive y respira las mentiras, donde floreció la desconfianza, y donde las violaciones de los derechos humanos eran una práctica habitual. El me escuchó atentamente y nos dimos la mano al final de la conversación como una muestra de aprobación. Se marchó y tan sólo pasados unos minutos volvió con una botella de agua fría, y dijo: ¡Bebe un poco hoy hace mucho calor!" Sentí una gran alegría por él, porque incluso en el entorno más difícil y malvado, él fue capaz de reconocer la verdad y tomar el camino correcto."

Durante toda mi estancia en Flushing yo seguía poniéndome una camiseta amarilla con las palabras Falun Dafa escritas en ella, y me dirigía a los lugares donde más gente me podía ver. Luego me di cuenta del efecto que la camiseta tenía sobre el pueblo chino. Miraban a mi camiseta, luego a mi cara, y una vez más miraban a la camiseta. Con mucha frecuencia notaba la expresión de sorpresa y admiración de sus rostros. Otros practicantes occidentales también vinieron a Flushing. Ellos estuvieron repartiendo periódicos y aclaraban la verdad a todas las personas que estaban engañadas por la propaganda del Partido Comunista Chino.

Un practicante joven me dijo, Incluso si no repartimos folletos y solamente caminamos por las calles de Flushing llevando las camisetas de Falun Dafa, este acto por sí solo ya sería muy útil para reprimir el mal y salvar a los seres conscientes.

Repartí un periódico a una mujer china de mediana edad. Ella me miró con sospecha, y me indicó con la mano que no lo quería. Le hablé sobre cómo comencé a practicar Falun Dafa hace 11 años y acerca de cómo la práctica me ha ayudado a elevar mi moral y mejorar mi salud. También mencioné que muchos de mis parientes y amigos en Rusia, así como en otros países también practican Falun Dafa. Hablando me di cuenta de que la expresión de su cara iba cambiando poco a poco. Al principio, la expresión del disgusto y de la desconfianza desapareció de su rostro, y entonces ella manifestó una gran sorpresa y sus ojos comenzaron a brillar de felicidad. La mujer sonrió, dándome las gracias, recogió un periódico y continuó su camino. Lo que trae resultados realmente maravillosos es el poder de nuestros pensamientos rectos y la determinación de limpiar nuestras mentes y llegar a la benevolencia más alta mientras estamos aclarando la verdad, teniendo en cuenta sólo el deseo de salvar a la gente de la destrucción y eliminar la maldad. El mal se esta eliminado capa por capa, y la naturaleza benevolente de la gente se está despertando de forma gradual, saliendo hacia fuera. Tuve la oportunidad de ser testigo de este proceso increíble de transformación una y otra vez, ante mis ojos.

Me gustaría dirigirme a todos los practicantes, especialmente a los practicantes de origen occidental: ¡Si tienes oportunidad y las condiciones adecuadas, considera la posibilidad de ir a Flushing! Tenemos que reprimir el mal, concentrando nuestros mayores esfuerzos. Los seres conscientes están esperando ser salvados. Recuerden que aquí en América hay un lugar con un stand que tiene información y materiales que roban a los seres conscientes su futuro.

Fecha de edición: 07/09/2008
Fecha del artículo original: 01/09/2008
Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2008/9/1/100297.html