(Minghui.org) Soy un practicante que reside en China. En los años recientes, varias experiencias me han dado razones para revisar seriamente mi estado de cultivación. Solo después de pensar cuidadosamente me di cuenta de que mis pensamientos no rectos atrajeron interferencia demoníaca y tribulaciones adicionales en mi sendero de xiulian.

Un día, mientras bajaba del auto, me caí de rodillas e inmediatamente sentí un gran dolor. En ese momento mi pensamiento fue que yo estaba bien. Me quedé parado un rato y caminé normalmente. Sin embargo, en los días siguientes, me dolían mucho las rodillas, y apenas podía hacer la meditación sentada. Caminar también me dolía. Aunque miré hacia dentro para intentar entender cuál podría ser la razón para esta tribulación, fallé en encontrar algo. Pensé que quizás no estaba haciendo bien las tres cosas.

En nuestro grupo de estudio del Fa, le conté a los practicantes sobre mi dolor en las rodillas que hacía ya dos meses que lo tenía. Un practicante me preguntó: “¿Hiciste o dijiste algo que no debías?”. Pensé por un momento y de repente recordé que, durante el estudio del Fa grupal, todos nos sentamos con las piernas cruzadas. Después de 30 minutos, todos bajaban las piernas porque sentían dolor. Sin embargo, yo podía seguir con las piernas cruzadas sin sentir dolor. Entonces pensé en mi corazón: “Miren, todos ustedes tienen dolor, pero yo no”. ¡Qué apego a ostentar tenía! Poco tiempo después de darme cuenta de esto, el dolor empezó a desaparecer cuando hacía la meditación, y también podía caminar normalmente.

Soy un médico que ve pacientes en una clínica para quejas sobre mareos. Un día inadvertidamente tuve un pensamiento: “¡Miren! Todos ustedes se sienten mareados y yo no”. Al día siguiente, me sentí mareado inesperadamente y me desmayé. Ni siquiera podía abrir los ojos, y vomitaba todo el tiempo. Por primera vez en 19 años de cultivación, ¡tuve que tomarme un día por enfermedad! Al día siguiente, me di cuenta de que mi pensamiento del día anterior era incorrecto y dio como resultado una interferencia demoníaca. Sentí que manché la reputación de Dafa y me arrepentí. Con lágrimas, admití inmediatamente mi error ante la foto de Shifu. Después de esto, mi mareo cesó.

Una vez, mientras aclaraba la verdad, le conté a otros que muchos pacientes habían demandado a otros médicos en nuestro hospital. Yo era el único médico en no recibir demandas. Como resultado de este pensamiento inapropiado, recientemente recibí una demanda de un paciente también. La disputa se resolvió tan pronto como me di cuenta de mi apego a ostentar.

Debido a mis apegos, fui arrestado y detenido por practicar Falun Dafa en 2015. Me liberaron y regresé a casa sin tener que escribir ninguna confesión o documento denunciando a Falun Dafa. En casa, mientras copiaba el Fa, estaba pensando: “¡Mira! Me liberaron sin tener confesar nada”. De nuevo apareció el apego a ostentar. Como resultado, seis o siete personas aparecieron en casa, golpearon la puerta con fuerza y dijeron: “¿Ya se fue a trabajar?”. Comencé a sudar de miedo. Tan pronto como me di cuenta de mi apego a ostentar, me senté a enviar pensamientos rectos. Golpearon la puerta por unos diez minutos antes de irse.

Después de irse, reflexioné: “Aunque he practicado la cultivación por tantos años, ¿por qué no me he dado cuenta de mi apego a ostentar? En vez, tengo orgullo y no tengo los principios del Fa claros. Hemos estado transitando este sendero con altibajos por casi dos décadas, y todo ha sido hecho para nosotros por el Maestro Li. Sin la protección del Maestro y la coordinación de los practicantes de Dafa actuando juntos en base al Fa, ¿qué podemos hacer realmente por nosotros mismos? ¿De qué estoy orgulloso?”.

Estas lecciones son dolorosas. La razón por la que escribo este artículo hoy es porque espero que los practicantes que tienen circunstancias similares puedan usar mis experiencias como advertencias y evitar desvíos en su práctica de cultivación. Espero que todos podamos tomar el Fa como Maestro para evitar interferencia de nuestras propias mentes y caminar firmemente el camino arreglado por Shifu.