(Minghui.org) Recientemente me vi inmerso en un conflicto laboral. Escuché algunas personas decir que había obligado a dos de mis empleados tomar medidas que violaban los procedimientos formales. En realidad, había sido testigo de su participación en algunas situaciones indeseables en el trabajo. Indagué sobre las razones y discutí con ellos formas para mejorar. Sin embargo, después de unos cuantos dimes y diretes, algunos afirmaron haber sido forzados a actuar mal.

Inmediatamente busqué la forma de aclarar el malentendido. ¿Cómo podría permitir que los hechos se distorsionen así? Sin embargo, cuanto más esfuerzo hacía por intentar explicar lo sucedido, tanto peor se volvía la situación. Otras nuevas críticas comenzaron a circular entre los compañeros insinuando que había obligado a otros dos empleados a actuar con procedimientos equivocados. De hecho, les había pedido rectificarse cuando no siguieron los protocolos de la unidad de trabajo.

Me sentí incómodo y me preguntaba por qué tanta gente se comportaba con tanta falsedad. ¿Cómo podrían los hechos distorsionarse tan fácilmente? Tal vez no debería haberme preocupado por ser ofendido. ¿Sería mejor si todos fuéramos agradables entre nosotros? Por supuesto, finalmente me di cuenta de que debía mirar dentro para ver por qué me había sucedido esto y mejorar la forma en la que manejé las cosas.

Siendo un cultivador, también estaba seguro de que habría otras razones detrás de este incidente. Durante este tiempo, hubo muchos artículos compartidos en el sitio web de Minghui sobre cómo mirar hacia adentro. Los artículos discutían cómo otros practicantes pueden reflejar nuestros propios apegos, y cómo debemos mirar hacia adentro incluso cuando observamos conflictos o deficiencias en otras personas.

Entendí que, independientemente de lo que hagan los demás, debo examinarme y buscar mis propios apegos. Otro cultivador de Falun Dafa me dijo: "Ya sea que estés en contacto con personas comunes o cultivadores, encontrarás una variedad de pruebas. En muchas ocasiones, tendemos a atascarnos en un problema y buscamos quién está en lo cierto y quien está equivocado. De hecho, no tiene nada que ver con si la otra parte tiene la culpa o no. Nos encontramos con pruebas porque tenemos apegos que debemos descartar. Nada es accidental en el camino de nuestra cultivación".

Antes de toparme con críticas hacia mí, pensé que entendía las enseñanzas del Maestro Li sobre los conflictos. Sin embargo, cuando llegó la prueba real, todavía tenía apegos. Rápidamente comenzaba a pensar y hablar sobre quién tenía razón o no, y me olvidé de buscar los apegos que necesitaba eliminar.

Compartí mis pensamientos sobre este tema con otro cultivador de Falun Dafa, que también es colega mío, y le pregunté cómo veía este incidente. Le pedí que me ayudara a buscar los apegos que necesitaba cultivar. Él a menudo se encontraba con situaciones como la mía en las que parecía ser tratado injustamente sin razón.

Dijo que simplemente se consideraba como el viejo monje que cargaba con la culpas de los demás (refiriéndose a una historia china tradicional sobre el monje que acogió un recién nacido de una madre soltera. Se le acusó y se le hizo responsable de su embarazo. El Monje cargó con del niño sin replicar e hizo de él un joven con grandes virtudes). El practicante contó que simplemente soportaba la humillación por el bien de una meta más alta.

Sin embargo, pensé en lo que dijo y sentí que mi problema era algo diferente de lo descrito por él. En el pasado, había experimentado pruebas habiendo sido humillado. Mi corazón no se movió con esas pruebas. Lo que movió mi corazón en esta ocasión fue que los hechos fueron distorsionados.

Unos días más tarde, volví a leer artículos en el sitio web de Minghui. Un cultivador escribió que en ocasiones, cuando las personas hablan, exageran más allá de los límites de lo que es verdad. Exagerar o atenuar las cosas puede distorsionar la verdad.

Entonces entendí qué apego estaba señalando. Era mi propia deficiencia con respecto a ser verdadero. Recordé algunos errores que había cometido en el pasado. A menudo exageraba o atenuaba los problemas según mi estado de ánimo y nociones. Por lo tanto, terminé distorsionando los hechos por no cultivar bien el habla. El conflicto en el trabajo giraba en torno al mismo problema. Había dado por sentado mi postura. La parte del conflicto que movió mi corazón fue precisamente lo que necesitaba eliminar en mi mismo.

El comportamiento que vi en mis colegas estaba señalando mis defectos con respecto a ser veraz. El propósito de este incidente fue hacerme comprender cuán dañina era mi propia carencia de verdad para las personas que me rodeaban. El incidente también me hizo darme cuenta de cuán importante es "Verdad" dentro de las características universales de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

Después de darme cuenta de mi propio problema, sentí que un gran peso fue quitado de mi corazón. Cuando recordé cómo se habían comportado mis colegas, sentí que todos eran inocentes y que habían sido parte de un arreglo para ayudarme a mejorar mi xinxing.

También entendí más claramente por qué Shifu dijo que deberíamos agradecer a las personas que nos crean conflictos. Al recordar la fuerte reacción que tuve cuando estaba pasando por la tribulación, me di cuenta de que aún tenía envidia y odio que no habían sido completamente eliminados. Me sentí profundamente avergonzado, pues habiéndome cultivado por más de 20 años, todavía tenía bastantes pensamientos y apegos humanos. No puedo aflojar más y debo cultivarme verdaderamente.

Los pensamientos y apegos humanos en nuestra cultivación son verdaderamente dañinos para otros y para nosotros mismos, especialmente durante esta etapa histórica de la rectificación del Fa. Las viejas fuerzas utilizarán nuestros apegos para sabotearnos y crear elementos negativos que interfieran con la salvación de los seres conscientes. Por lo tanto, los cultivadores deben estar muy atentos y no dejar que las viejas fuerzas se aprovechen de las brechas.

Quería compartir esta experiencia de cultivación, y espero seguir avanzando con mis compañeros cultivadores.