(Minghui.org) Han pasado exactamente diez años desde que me uní a una empresa de medios de comunicación en 2015. Como dice el refrán: «Diez años para afilar una espada», he estado trabajando en el mismo puesto durante la última década. Enfrentándome a diversas situaciones que han ido surgiendo a lo largo de los años, y a mis retos de cultivación, he ido tropezando por el camino. Sin embargo, afortunadamente con la guía y protección de Shifu, he llegado hasta donde estoy hoy.
Cómo me uní a la compañía de Medios
Cuando llegué por primera vez a los Estados Unidos, no tenía un trabajo estable. Un día, quise saber más sobre los lugares cercanos donde se practicaba Falun Dafa, así que busqué en Internet y descubrí que el sitio web que proporcionaba información era muy rudimentario. ¿Fue falta de talento? No del todo. Que yo sepa, varios practicantes locales trabajaban en algunas de las empresas de alta tecnología más importantes del mundo. Quizá estaban ocupados con sus trabajos y no se dieron cuenta del estado de la web.
Una idea surgió de lo más profundo de mi corazón... Ya que los demás están tan ocupados, yo podría asumir esta responsabilidad. Este pensamiento se repitió dos veces en mi mente. Si se me diera la oportunidad, podría ayudar a mejorar el sitio web local que proporcionaba información sobre los sitios donde se imparten los ejercicios de Falun Dafa. De repente sentí una profunda emoción en mi interior. Tenía experiencia en desarrollo de software, pero desconocía relativamente el desarrollo de sitios web y aún no me había planteado cómo proceder.
Sin embargo, poco después fui contratado inesperadamente por una pequeña empresa para reconstruir su sitio web de comercio electrónico. El lenguaje de programación utilizado por esta empresa nunca había sido popular, y había pocos profesionales cualificados en este campo. Tuve que aprender sobre la marcha.
Recuerdo que cuando me incorporé a la empresa, mi jefe me expresó su preocupación y me dijo que no estaba seguro de que fuera una decisión acertada contratarme para reconstruir el sitio web. Si el negocio seguía igual al cabo de un año, no sabía si yo podría conservar mi empleo. Inmediatamente le contesté: "Oh, no te preocupes, soy practicante de Falun Dafa y no te lo pondré difícil. Si el negocio del nuevo sitio web no crece mucho o crece poco el año que viene, puedo dimitir sin más".
Como resultado, después de reestructurar y lanzar el sitio web, la empresa continuó con su estrategia promocional original, pero el número de pedidos aumentó espectacularmente. En el año transcurrido desde que había entrado en la empresa, los pedidos anuales habían aumentado de cerca de 5.000 a más de 20.000.
El jefe estaba encantado, afirmando que su empresa había tardado diez años en aumentar los pedidos en sólo 1.000, pero ahora habían crecido varias veces en un solo año. Me prometió que me mantendría mientras la empresa siguiera funcionando. Sin embargo, yo sabía que no iba a ser su empleado fijo: tenía una misión que cumplir.
Tras adquirir experiencia en sitios web de comercio electrónico, entré por casualidad en una empresa de medios de comunicación. Al recordar esta experiencia, no estoy seguro de si fue mi deseo de crear un sitio web en aquel momento lo que me llevó por ese camino, o si esa situación estaba predestinada. Sin embargo, una cosa es cierta... cuando uno se cultiva a sí mismo y navega por el mundo mundano, el pensamiento puro es especialmente crucial para andar bien por el camino de la práctica de cultivación en Dafa.
Cultivándome en mi ambiente de trabajo
Después de llegar a Nueva York, me sumergí inmediatamente en mi nuevo proyecto de trabajo. Cuando empecé a trabajar, mi supervisor me dijo que el proyecto tenía poco personal y que todo el mundo estaba muy ocupado. Me comentó que debía intentar completar el trabajo que me asignaran de forma independiente y no esperar que otros me dijeran cómo resolver los problemas.
Estuve de acuerdo con este concepto y lo he aplicado subsecuentemente. En el proceso, he llegado a comprender que trabajar de forma independiente significa no sólo completar tareas sin depender de otros, sino también asumir la responsabilidad de cada paso de la tarea y su posible impacto.
Iba a trabajar todos los días con una sensación de expectación, sintiendo que avanzaba a través de una serie de retos. Me levantaba a las 4:30 o 5:00 de la mañana, practicaba los ejercicios, estudiaba el Fa, trabajaba y luego hacía horas extras, volviendo al dormitorio hacia medianoche.
Las tareas del proyecto avanzaban rápidamente. A veces, incluso soñaba con estar programando. En aquella época, la empresa no daba desayunos y mis ingresos eran limitados, así que se me ocurrió una solución: Compraba una lata de avena instantánea y me preparaba un tazón con agua caliente todas las mañanas, añadiendo a veces unas galletas. La avena costaba unos pocos dólares y podía durar uno o dos meses, lo que resultaba cómodo y rentable. Afortunadamente, nunca me cansé de este desayuno. Mirando ahora hacia atrás, ese periodo sigue siendo una de las mejores experiencias de proyecto de mi vida.
Poco a poco, a medida que asumía más tareas y las completaba con éxito, empecé a sentir alegría y satisfacción. Incluso empecé a desear que los demás trabajaran tanto como yo, que llegaran pronto y se quedaran hasta tarde. Cuando veía a los demás hacer las cosas sin mucho entusiasmo, me sentía insatisfecho, incluso superior, como si no fueran tan capaces como yo.
Al cabo de mucho tiempo, a veces me quejaba de que era tan mecánico e insensible como un reloj. Aún más preocupante fue que me di cuenta de que el verdadero yo, y el corazón humano oculto bajo la fachada del trabajo duro, tardan mucho tiempo en ser reconocidos.
Desde el punto de vista de la cultivación, aunque trabajaba diligentemente, leía el Fa y hacía la práctica todos los días, el mayor problema era que no estudiaba el Fa con atención. En ese momento, supe que necesitaba mejorar mi estado de cultivación. Cuando me enfrentaba al trabajo, a menudo me quedaba atrapado en hacer cosas, y hacía de 'completar tareas' mi objetivo principal del día, en vez de cultivarme y eliminar los apegos humanos en el proceso.
Shifu nos dijo:
"Lo que haces en sí mismo no es xiulian. Si abres una empresa o estás en un proyecto de Dafa, no importa lo que hagas, esto en sí mismo no es el xiulian; pero la actitud con la que trabajas, cómo tratar estos problemas y resolverlos, usando el estándar de un Dafa dizi cultivador, manejándolo bien, ¡esto es el xiulian!" (Fahui de Nueva York 2019, Colección de enseñanzas del Fa, Vol. XV).
Mirando hacia atrás en este período, me di cuenta de que el factor principal en la cultivación no era el ambiente externo, sino el entendimiento que uno tiene de la propia cultivación. Si pudiera volver atrás en el tiempo y empezar de nuevo, las cosas seguirían siendo las mismas, pero mi mentalidad y actitud 'cultivándome' sería diferente. Años más tarde, cuando otros practicantes muestran actitudes y comportamientos similares, y cuando me enfrento a preguntas de altos directivos, sonrío amablemente y digo: "Lo entiendo. A esto le hace falta entrega, pero las cosas mejorarán gradualmente".
Un día, mi supervisor y otro colega abandonaron repentinamente el proyecto por motivos desconocidos, y algunas tareas del proyecto recayeron en mí porque nadie más se ocupaba de ellas. Me sentí incómodo con esto porque tenía la sensación de que mi carga de trabajo ya superaba mis expectativas. Pero eso no era todo. A veces, los supervisores superiores me preguntaban de repente sobre la ejecución de tareas concretas.
Al principio pensé que había sido un malentendido o un error. Les dije que yo no participaba en esas tareas y que no entraban en mi ámbito de responsabilidad, por lo que no podía garantizar nada. Pero que, en caso necesario, me encargaría de hacerles un seguimiento.
Sin embargo, mi jefe no dijo nada, se detuvo un momento y se marchó. Esto ocurrió más de una vez, lo que me hizo sentir desanimado y frustrado. Después de experimentar estas emociones varias veces, decidí calmarme y estudiar el Fa para ver por qué sucedía esto.
Mediante el estudio del Fa, me di cuenta de que había estado tratando de permanecer en el mismo estado que antes de que mi supervisor abandonara el proyecto. Él se encargaba de todas las tareas de gestión y coordinación, así que yo sólo tenía que centrarme en las tareas que me habían asignado. Esto me daba una sensación de logro y no tenía que preocuparme de nada más. En otras palabras, mi mentalidad en aquel momento se adaptaba a ese entorno de proyecto.
Sin embargo, tras la marcha del supervisor, el entorno del proyecto cambió, pero mi mentalidad siguió anclada en el pasado. En aquel momento, el proyecto me exigía cambiar de perspectiva y asumir más responsabilidades, pero mi lado humano quería echarse atrás. Pensando en ello, me siento verdaderamente avergonzado.
Durante el estudio de Fa, me dí cuenta de que mi entendimiento era erróneo, basado en nociones. Shifu también me iluminó a una comprensión más profunda del principio de «responsabilidad». A lo largo de mi cultivación, siempre he tenido una pregunta. ¿Cómo elevar mi entendimiento de lo que 'realmente' es lo 'racional'? Aunque he leído las respuestas de Shifu a preguntas relacionadas, todavía no tenía claro cómo aplicar esto en mi cultivación.
Por ejemplo, Shifu dijo:
"...había una diferencia enorme cuando las tribulaciones acababan de empezar. Algunos estaban aturdidos. Algunos se preguntaban: “¿Qué tipo de persona será Li Hongzhi?”. Algunos pensaban: “¿Será recto este Fa?”. Una extensa prueba se ha dirigido hacia todos los apegos humanos". (Exponiendo el Fa en el Fahui del Oeste de EE.UU., Guiando el Viaje)
Todo esto estaba claro para mí, pero cuando preguntaba «por qué» desde una perspectiva 'china', era difícil responder a la pregunta con seguridad. En otras palabras, mi comprensión de «Dafa es bueno» era sólo una expresión afirmativa, mi percepción, pero no me movía a sentirme una partícula de Dafa y comportarme como tal, con todo lo que implica.
Shifu dijo:
"Yo, en todo el proceso de transmitir el Fa y el gong, me baso en ser responsable para con la sociedad y para con los estudiantes, el resultado obtenido es bueno y la influencia en toda la sociedad también es bastante buena". (Primera Lección, Zhuan Falun)
Cuando pienso en las pocas décadas de mi vida, todas las personas que he conocido, incluyendo a mis padres, hermanos, parientes y amigos cercanos, nadie excepto Shifu ha dicho nunca que fueron responsables de mi vida. Además, en toda la historia que he estudiado, tanto antigua como moderna, oriental y occidental, y en todos los libros que he leído, nunca he encontrado a nadie que haya asumido la responsabilidad por la vida de otra persona.
Mirando aún más profundamente en el cosmos, no podemos comprender los innumerables ciclos de civilizaciones cósmicas y de vida que han venido y se han ido, ni podemos comprender la miríada de sucesos correctos e incorrectos, verdaderos y falsos, y los vastos reinos implicados. Excepto Shifu, ningún otro ser -ni siquiera los seres más elevados del cosmos- puede asumir, de manera real y verdadera, la responsabilidad por otro ser.
Especialmente en las etapas finales, las viejas fuerzas se limitan a utilizar las vidas para sus arreglos. Una vez que han servido a su propósito, ninguna vida puede ser considerada «su responsabilidad» sobre su futuro o destino porque todo en el universo llegará finalmente a su fin a través de los ciclos de formación, asentamiento, degeneración y destrucción.
En otras palabras, antes de que se diseminara Dafa, nunca había habido una oportunidad tan sin precedentes de asumir la «responsabilidad ante la sociedad y ante sus estudiantes» como la tiene Shifu. Por lo tanto, en esta práctica de cultivación, ¡tener la «responsabilidad ante la sociedad y ante sus estudiantes» de Shifu es verdaderamente inestimable y sagrado!
Un Maestro que puede «ser responsable con la sociedad y con sus estudiantes» es incomparable con cualquier otro ser en el universo. Ese Maestro que puede ser verdaderamente responsable de todo en el universo es Shifu, el más Recto y Magnánimo, ¿no es así? ¿No es, entonces, el Fa más recto e inmensurable?
Estas palabras, que he leído innumerables veces y parecen tan ordinarias, en realidad tienen un significado tan profundo. Una vez que entiendes los principios, es más fácil superar cualquier obstáculo.
Eliminando yeli y teniendo pensamientos rectos
Durante los diez años en el proyecto, experimenté numerosas pruebas de eliminación de ye de enfermedad, incluyendo dos severas durante la pandemia de COVID-19, y las superé todas con pensamientos rectos bajo la protección de Shifu. En junio de 2024, me encontraba de nuevo en el estado de eliminar el ye de enfermedad. Durante este período, los dolores de muelas continuaron reapareciendo.
Después de hacer la práctica todos los días, me sentía temporalmente mejor, pero los síntomas volvían e incluso empeoraban, lo que me dificultaba comer o beber. El dolor de muelas me provocaba jaquecas y sentía como si me apuñalaran los ojos. Por eso cerraba los ojos todo lo posible cuando iba a trabajar. A veces, cuando me tocaba accidentalmente la cabeza, sentía dolor incluso en la piel, y de vez en cuando afloraban pensamientos de muerte. Me di cuenta de que eran las viejas fuerzas intentando aprovecharse de la situación. Por eso, cada vez que surgía un pensamiento así, pedía sinceramente: «Por favor, Shifu, encárgate por mí».
El nuevo artículo de Shifu «Despierta con un sobresalto» se publicó el 6 de junio. Como practicante veterano, independientemente de mis acciones pasadas, ahora debo adherirme a los estándares y esforzarme por mejorar.
Quería ausentarme varios días durante la eliminación del yeli. Por un lado, había muy poca gente trabajando en el proyecto. Por otro lado, me recordé que era a través del dolor y el sufrimiento como podía determinar si tenía la mentalidad necesaria para salvar a la gente. Así que insistí en venir a trabajar. Aunque mi estado de trabajo durante esta eliminación del yeli no era tan eficiente como de costumbre, se trataba de un sufrimiento persistente. Además, leer el último artículo de Shifu en medio del sufrimiento fue una experiencia realmente diferente.
A la mañana siguiente, de repente sentí el impulso de leer «Despierta con un sobresalto» antes de empezar a trabajar. Cuando leí: «Como individuo, cada uno es el objeto de Dios para salvar». «Toda la gente vino aquí por este Fa y toda la gente espera ser salvada». Un pensamiento surgió de repente en mí... Aquellos que fueron controlados para crear tribulaciones eran en realidad también personas que esperaban ser salvadas, y su intención original al venir a este mundo era también ser salvados.
Podía haber dañado gravemente la vida que causó mi dolor de muelas en vidas pasadas. Ahora estaba siendo utilizado por las viejas fuerzas para desafiarme. Pero todos estaban aquí originalmente para ser salvados. ¿No era una lástima que las cosas resultaran así?
Cuando llegué a casa por la noche, volví a leer el artículo. Decía:
«… mucha gente ha relajado su cultivación durante largo tiempo». Me sentí un poco perdido, pues me di cuenta de que mi cultivación a lo largo de los años seguía teniendo muchos problemas y necesitaba tomarla en serio y superar la situación. El estado incorrecto de mi cuerpo y el dolor de muelas eran señales de advertencia. Entonces, ¿cuál debe ser el estado de un practicante de Dafa?
Al comenzar mi meditación a la mañana siguiente, me vino a la mente una frase de la Segunda Lección de Zhuan Falun: "Les doy a todos un ejemplo, en la religión budista se dice que todos los fenómenos de la sociedad humana son ilusiones, que son irreales". Empecé a tratar como ilusiones todas mis experiencias pasadas, los problemas actuales, las preocupaciones, el dolor, el pesar e incluso las diversas manifestaciones del fin de la sociedad humana. Ya no pensaba en ellos, y en mi mente sólo me veía como practicante de Dafa, colaborando con Shifu.
Después de la meditación sentada, no sentí nada particularmente especial. Sin embargo, me sorprendió que todas las molestias de mi cuerpo y mi dolor de muelas hubieran desaparecido, como si nunca hubieran existido. No sentí ningún dolor durante la comida y, después de un día de trabajo, seguía sintiéndome enérgico y no cansado. Estaba sorprendido y entusiasmado.
Sin embargo, el dolor volvió al día siguiente, 11 de junio y era hora de salir del trabajo. Quería irme pronto a casa, pero me dolían las muelas y la cabeza, y apenas podía andar. Así que hice el segundo ejercicio durante una hora antes de irme a casa. Cuando llegué a casa, encontré a mi esposa y a mi hija hablando alegremente. No se fijaron en mí y no les dije cómo me sentía. Estaba agotado, así que me fui tranquilamente a otra habitación a descansar.
En cuanto me acosté, me vino un pensamiento a la cabeza... Mira, ¡no le importas a nadie! Me reí y le dije a ese pensamiento: "Nada ocurre por casualidad en este mundo. Si los demás no han llegado a preocuparse por ti, probablemente es porque no te deben nada. Como cultivador, ¿sigues persiguiendo emociones humanas?". Tras unos momentos de lucha interna, mi mente se calmó.
Después de un periodo de calma, los dolores de muelas y de cabeza empezaron a surgir como olas, acompañados de pensamientos negativos. No podía sentarme ni acostarme, y mi mente se volvía inquieta y ansiosa. Durante esas pocas horas, aunque todo en casa era normal, y no ocurría nada fuera de lo normal. La gente que me rodeaba no era consciente de mi estado, y yo sentía un inmenso dolor y desesperación...
"¿Es realmente tan difícil? ¿Debo seguir adelante? Duele tanto. ¿Qué debo hacer?". Me sorprendía que se me hubieran ocurrido esos pensamientos. Finalmente, un pensamiento apareció en mi mente: "¿Podrá este cuerpo aguantar hasta el final?". Se me salieron las lágrimas. ¿Cómo debo elegir? ¿Hacia dónde debo dirigirme?
Me pregunté: "A la gente común le duelen las muelas, y a los practicantes también. ¿Cómo puedo demostrar que soy un practicante?". Al instante se me ocurrió una idea: seguir practicando. Cuando empezó la música de la práctica, me dije: "Quizá no he practicado lo suficiente. No debería buscar la tranquilidad durante la práctica, ¡pero esto es perseverancia en medio del dolor, perseverancia frente a la desesperación!". Tras varias rondas de treinta minutos del segundo ejercicio, el dolor y la desesperación desaparecieron gradualmente.
Esta extraordinaria experiencia, especialmente el día en que el dolor desapareció por completo, me hizo darme cuenta de repente de que cuanto más desesperante es el dolor, más hay que perseverar. Los verdaderos pensamientos rectos de un practicante de Dafa trascienden el viejo universo y están libres de sufrimiento. Además, Shifu está al pendiente de todo.
Este es mi entendimiento en mi nivel actual; por favor, tengan la amabilidad de señalar cualquier cosa inapropiada.
Los artículos en los cuales los cultivadores comparten sus entendimientos generalmente reflejan la percepción de un individuo en un momento determinado en función de su estado de cultivación, y se ofrecen en el espíritu de permitir la elevación mutua.
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