Cómo el Partido Comunista Chino perturba la sociedad estadounidense (2.ª parte)

(Minghui.org) Las protestas propalestinas estallaron en los campus de las universidades estadounidenses en la primavera de 2024. Tomaron edificios, interrumpieron clases, dañaron infraestructuras y amenazaron a estudiantes judíos.

Tras desalojar una barricada propalestina en el Hamilton Hall de la Universidad de Columbia, el Departamento de Policía de Nueva York descubrió que los manifestantes estaban sorprendentemente bien equipados, con cadenas industriales, máscaras de gas, tapones para los oídos, gafas, martillos, cuchillos y cuerdas. También descubrieron que el 25% de las personas detenidas no eran estudiantes. En la City University de Nueva York, el 60% de los manifestantes detenidos no eran estudiantes.

En su informe 2022, la Comisión de Revisión de la Economía y la Seguridad entre Estados Unidos y China señaló que, dado que el Partido Comunista Chino (PCCh) utiliza organizaciones aparentemente benignas para llevar a cabo su labor de frente unido, su influencia suele ser «encubierta» o «engañosa» y difícil de rastrear. En el mismo informe de 2022, la comisión recomendó que el Congreso mantuviera un «directorio no clasificado» del aparato de control del PCCh que incluyera «organizaciones afiliadas al Departamento de Trabajo del Frente Unido».

(Continúa de la Parte 1)

Ojos y oídos fuera de China continental

Desde la década de 1930, el PCCh ha contado con un departamento expresamente encargado de promover su influencia fuera de su propia jurisdicción. El 5 de enero de 1939, el Secretariado Central del PCCh estableció oficialmente el Departamento de Trabajo del Frente Unido (UFWD) como un brazo dentro del PCCh. Este departamento era responsable de crear un «frente unido» de operaciones del PCCh en todos los aspectos de la sociedad china -grupos religiosos, minorías étnicas, partidos políticos, empresarios y literatos no afiliados al PCCh-, así como en las sociedades fuera de China.

Aunque el Ministerio de Seguridad del Estado (MSS) es el principal responsable de las operaciones de espionaje del PCCh, la UFWD también coordina una buena parte del espionaje a través de sus redes encubiertas en el extranjero.

Dos casos de gran repercusión en Estados Unidos sentenciaron a miembros del TTP [el Plan de los Mil Talentos (TTP) del PCCh] por transmitir secretos comerciales estadounidenses a entidades chinas. La primera persona, Xiarong You, fue sentenciada en 2021. Era una científica especializada en polímeros empleada en Coca-Cola y posteriormente en Eastman Chemical Company de 2012 a 2018.

Durante su mandato, utilizó secretos comerciales de las dos empresas para lanzar su propia empresa en China: Weihai Jinhong Group, que recibió millones en financiación del gobierno chino, incluida la TTP. Estos secretos comerciales costaron a las empresas estadounidenses más de 120 millones de dólares en investigación y desarrollo.

«La solicitud de You para el Programa de los Mil Talentos y otras pruebas presentadas en el juicio demostraron que su intención era beneficiar no sólo al Grupo Weihai Jinhong, sino también a los gobiernos de China, la provincia china de Shandong, la ciudad china de Weihai y el Partido Comunista Chino», declaró el Departamento de Justicia en un comunicado de prensa sobre su caso. You fue sentenciada a 14 años de prisión, 3 años de libertad supervisada y se le impuso una multa de 200.000 dólares.

En marzo de 2022, Xiaoqing Zheng fue sentenciada a dos años de prisión por conspiración para cometer espionaje económico. Zheng, exingeniero de General Electric (GE) durante 10 años, robó los diseños de GE para turbinas terrestres y de aviación y se los dio a universidades y empresas chinas.

"Se trata de un caso de espionaje económico de manual. Zheng se aprovechó de su posición de confianza, traicionó a su empleador y conspiró con el gobierno de China para robar tecnología innovadora estadounidense", declaró el procurador general adjunto Matthew G. Olsen, de la División de Seguridad Nacional del Departamento de Justicia.

Otra fuente de espionaje gestionada por la UFWD procede de su control de las asociaciones de estudiantes y académicos chinos en el extranjero (CSSA). «Numerosas asociaciones de estudiantes y académicos chinos, que son grupos de fachada unidos para estudiantes internacionales chinos, han participado en la supresión de la libertad académica y en la movilización de estudiantes para actividades nacionalistas», señaló el Instituto Australiano de Política Estratégica.

La revista Político entrevistó en una ocasión a un exagente de contrainteligencia estadounidense que habló de un caso en el que una estudiante de posgrado de la Universidad de California en Berkeley, afiliada a la CSSA, «trabajaba para el MSS e informaba sobre las actividades de otros estudiantes chinos en el campus».

Christine Fang, de nacionalidad china y matriculada en la Universidad Estatal de California East Bay, era la presidenta de la Asociación de Estudiantes Chinos del centro. Abandonó Estados Unidos de forma abrupta en 2015 debido a una investigación del FBI sobre sus actividades, que incluían el establecimiento de relaciones con políticos estadounidenses, incluso románticas y sexuales. Funcionarios estadounidenses dijeron a Axios que Fang estaba «centrada en la recopilación de inteligencia política y la realización de operaciones de influencia en el Área de la Bahía».

Manipulación de los medios de comunicación

Uno de los objetivos declarados del UFWD es fomentar la propaganda del PCCh, y también lo hace utilizando diversos métodos. Por ejemplo, el UFWD opera el Servicio de Noticias de China, una red de medios de comunicación que difunden los temas de conversación del PCCh a la diáspora china.

Entre los miembros más destacados de esta red se encuentran Qiaobao, un periódico en chino de Estados Unidos, y Pacific Media Group, con sede en Australia.

Recientemente, también se ha descubierto que el PCCh introduce a personal vinculado a la UFWD en puestos de trabajo de medios de comunicación occidentales para manipular la narrativa. Una serie de artículos publicados en The New York Times reitera muchos de los principales argumentos propagandísticos del PCCh sobre Falun Gong, una minoría religiosa que el PCCh ha intentado exterminar durante 26 años. La reportera principal de esta serie, Nicole Hong, es hija de un conocido agente de la UFWD que participó anteriormente en las operaciones de propaganda del PCCh en Estados Unidos.

George Hong, o Hong Zhaohui, ha sido director honorario de la WRSA. En 1995, se reunió con Zhang Weichao, el subdirector de la Oficina de Asuntos Chinos fuera de China (una organización afiliada a la UFWD que fue subsumida en la UFWD en 2018) para hablar sobre la promoción de la educación en idioma chino en los Estados Unidos. Tras la visita, se enviaron a Estados Unidos 4.500 juegos de los libros de texto estandarizados que se utilizan en las escuelas de China. Estos libros de texto estaban llenos de propaganda del PCCh, desde falsas representaciones de los japoneses hasta la glorificación de los héroes del PCCh.

Por su dedicación al trabajo para el Partido, Hong fue recibido en dos ocasiones en el Gran Salón del Pueblo de Beijing por el exjefe del PCCh, Jiang Zemin, y fotografiado con él.

Según Yaqiu Wang, director de investigación para China, Hong Kong y Taiwán de Freedom House, estas tareas e incentivos coinciden con la forma en que el UFWD trabaja con los miembros de la diáspora china. «La gente se une [al UFWD] por compañerismo, por un sentido equivocado del patriotismo», dijo Wang. «La gente también se une porque les da la oportunidad de ser recibidos por funcionarios chinos de alto nivel cuando vuelven a China de visita, incluso [el máximo dirigente]. Quieren este tipo de prestigio».

De hecho, la hija de Hong utiliza varias técnicas de propaganda en la construcción de su serie de artículos. Su descripción de las creencias clave de Falun Gong se basa en una serie de hombres de paja obtenidos sacando las enseñanzas de contexto y por personas que probaron la práctica y decidieron que no era para ellos. No hay ni un solo caso en el que se consulte a un practicante actual o a un experto en religiones asiáticas. Minimiza enormemente la brutalidad de la persecución -que, según expertos en derechos humanos de todo el mundo, incluye la sustracción forzada de órganos- y utiliza una única fuente que trabaja en un departamento académico que está siendo investigado por el Departamento de Justicia por no revelar fondos del PCCh.

Tal vez lo más sorprendente de todo es que la fuente que parece haberle contado la historia es un posible tirador escolar identificado por el FBI. Este posible tirador ha expresado en repetidas ocasiones su deseo de «destruir» el movimiento Falun Gong, ha proferido amenazas contra dos escuelas religiosas afiliadas a Falun Gong y se autodenomina «sociópata». Tras proferir estas amenazas, fue detenido y ahora se enfrenta a dos cargos por tenencia ilícita de armas.

A lo largo de siete meses, este posible tirador publicó en las redes sociales mensajes en los que detallaba su estrecha colaboración con la hija de Hong. Hasta la fecha, ni The New York Times ni la hija de Hong han rebatido sus afirmaciones, lo que hace temer que esta publicidad fomente las tendencias violentas del posible tirador o incluso instigue un atentado contra las escuelas de Falun Gong.

Construyendo inmunidad a la influencia del PCCh

Funcionarios estadounidenses han estado haciendo sonar la alarma sobre el alcance de las operaciones de influencia del PCCh en los Estados Unidos y tomando medidas para mitigar la perturbación que puede causar a los Estados Unidos.

"La China comunista se está infiltrando en las empresas, universidades y gobiernos locales y estatales de Estados Unidos. No podemos seguir ignorando esta amenaza", dijo el secretario de Estado Marco Rubio, cuando aún era senador por Florida en 2024.

El representante John Moolenar, presidente del Comité Selecto de la Cámara de Representantes sobre el Partido Comunista Chino, dijo que estaba consternado por la profundidad de la infiltración del PCCh en Estados Unidos. El Partido Comunista Chino no está simplemente allí. Están en nuestras costas trabajando para subvertir la experiencia estadounidense", afirmó.

"El Partido Comunista Chino es una gran amenaza para Estados Unidos y para nuestro gobierno. ¿Alguien no está de acuerdo en que, mientras hablamos, el Partido Comunista Chino está intentando infiltrarse en nuestro gobierno, en varias agencias gubernamentales y en nuestro sistema político en general?", preguntó el representante Jamie Raskin durante una reunión del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes.

Más recientemente, el Secretario Rubio saltó a los titulares al anunciar el 28 de mayo que iba a empezar a revocar los visados a los estudiantes de nacionalidad china que tuvieran vínculos conocidos con el PCCh o estudiaran en campos sensibles. El 22 de mayo, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos revocó la certificación del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio de la Universidad de Harvard, alegando su preocupación por los vínculos de Harvard con el PCCh y organizaciones afiliadas. Esta orden está siendo impugnada ante los tribunales.

En su audiencia de confirmación en el Senado para el cargo de Secretario de Estado, Rubio hizo hincapié en la necesidad de adoptar medidas inmediatas y un enfoque de toda la sociedad contra la infiltración del PCCh.

"Los chinos creen que Estados Unidos está en inevitable declive y ellos en ascenso. Y debido a nuestras propias acciones, gran parte de eso es cierto. Si no cambiamos de rumbo, vamos a vivir en un mundo en el que mucho de lo que nos importa en la vida -desde nuestra seguridad hasta nuestra salud- dependerá de si los chinos nos lo permiten o no", dijo Rubio.