Mujer desplazada de Shandong detenida por su fe y condenada a cinco años de prisión

(Minghui.org) Una residente de la ciudad de Zhucheng, provincia de Shandong, ha perdido recientemente su apelación contra una condena a cinco años de prisión por su fe en Falun Gong, una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

La Sra. Li Mingxia, que se había visto obligada a vivir fuera de casa para evitar la persecución, fue detenida en la casa que alquilaba el 19 de abril de 2024. Posteriormente fue acusada por el procurador Song Yanmei de la Procuraduría de la ciudad de Zhucheng. Durante su audiencia ante el Tribunal de la ciudad de Zhucheng el 30 de diciembre de 2024. Sus abogados se declararon inocentes. El juez la condenó a cinco años de prisión con una multa de 20.000 yuanes (2.745 dólares) el 23 de enero de 2025.

Recurrió ante el Tribunal Intermedio de la ciudad de Weifang. Los jueces He Dayong, Li Guixia y Gao Xingdong dictaminaron mantener el veredicto original el 20 de marzo de 2025. No está claro dónde se encuentra internada actualmente.

La Sra. Li, de 54 años, antigua contable de la Compañía Eléctrica de la ciudad de Zhucheng, empezó a practicar Falun Gong en 2009. Practicando los ejercicios de Falun Gong y siguiendo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, pronto se recuperó de su adenomioma, una enfermedad en la que el tejido de revestimiento del útero crece dentro de la pared muscular del útero. Estaba agradecida por no haber tenido que extirparle el útero quirúrgicamente.

En mayo de 2015, presentó una denuncia penal contra Jiang Zemin, exlíder del Partido Comunista Chino, por ordenar la persecución de Falun Gong. La policía comenzó a acosarla en marzo de 2016. Al no poder llevar una vida normal, se vio obligada a vivir fuera de casa para esconderse de la policía.

Fue detenida en la ciudad de Yantai, en la misma provincia, el 23 de septiembre de 2017, tras ser denunciada por hablar con la gente sobre Falun Gong. Primero estuvo retenida en el Centro de Detención de la ciudad de Yantai y luego fue trasladada de vuelta a Weifang el 31 de octubre. El Tribunal del distrito de Fangzi, en Weifang, la condenó a dos años el 31 de julio de 2018. Su apelación fue rechazada por el Tribunal Intermedio de la ciudad de Weifang. Ingresó en la Prisión de Mujeres de la provincia de Shandong en enero de 2019 y fue puesta en libertad el 30 de octubre de 2019.

De nuevo, el 3 de marzo de 2022, fue detenida en una redada policial por agentes de la División de Seguridad Nacional de la ciudad de Zhucheng. La llevaron al Centro de Lavado de Cerebro de la ciudad de Zhucheng. El guardia Song Wei la abofeteó en la cara. Se le hinchó la cara, le sangraban las encías y tuvo dolor de muelas durante más de una semana. La policía la inmovilizó en una silla metálica y la interrogó las veinticuatro horas del día en dos ocasiones, la primera durante 23 días seguidos y la segunda durante siete días seguidos sin descanso. Durante cada maratoniana sesión de interrogatorio, tuvo que permanecer sentada en la silla día y noche. Las piernas y los pies se le hincharon enormemente debido a la prolongada permanencia sentada.

El 26 de octubre de 2023, el juez Zhu Yuewei, del Tribunal de la ciudad de Zhucheng, llevó a cabo una audiencia sobre los casos de la Sra. Li y otros cinco practicantes. Después de la audiencia, la Sra. Li vivió fuera de casa para evitar una posible condena. Como no se presentó en el tribunal para la audiencia de la sentencia el 2 de noviembre de 2023, el juez Zhu anunció que su juicio quedaba en suspenso. La policía la detuvo meses después y el mismo juez Zhu la condenó a cinco años en enero de 2025. Otros dos jueces, Liu Qinghua y Shi Jianxin, así como el asistente del juez Zheng Yunlong y la secretaria judicial Du Yuling, también firmaron su veredicto.

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