(Minghui.org) Soy una practicante de Falun Dafa que comenzó a practicar en 1998. Durante los 26 años de mi cultivación, mi familia y yo hemos sido protegidos muchas veces por Shifu y hemos recibido sus bendiciones.
La inundación se detiene antes de llegar a mi campo
Estuve encarcelada en un campo de trabajo forzado durante un año en 2001. Después de ser liberada en 2002, mi familia era tan pobre que no podíamos permitirnos comprar un boleto de autobús de 20 yuanes (US $2.75). No teníamos suficiente dinero para que mi hijo comprara el almuerzo en la escuela, así que tenía hambre y comía la cena temprano en casa. Su ropa era de segunda mano y la comprábamos en un mercado de pulgas.
Planté media hectárea de soja cerca del río en 2003, esperando tener una buena cosecha para que mi hijo pudiera tener dinero para su almuerzo en la escuela. Pero una inundación en el verano las arrasó.
En ese momento, solo tenía un entendimiento superficial de la cultivación de Dafa y no me di cuenta de que esto era la persecución económica del mal hacia los practicantes de Dafa; no la negué. Tenía una actitud de resignación y dejaba todo al destino.
Pedí prestados 3,000 yuanes ($414) y planté 2 hectáreas de soja en 2004. De nuevo, hubo una inundación en el verano. Comencé a ver este asunto desde la perspectiva de la cultivación y pensé: “Soy una discípula de Dafa, tengo a Shifu. Sé que los discípulos de Dafa están bendecidos y que están bajo el cuidado de Shifu. Niego la persecución económica que las fuerzas del mal quieren imponerme.”
Envié pensamientos rectos, negué completamente la persecución de las viejas fuerzas contra mí y seguí el camino dispuesto por Shifu. Como resultado, al día siguiente mi hermano mayor me dijo que la inundación se detuvo justo antes de llegar a mi campo.
Desde entonces, las finanzas de mi familia han dado un giro completo. ¡Gracias, Shifu, por tu protección!
La protección de Shifu salva a una pareja en peligro
Pedimos prestado algo de dinero en 2015 para la boda de mi hijo. Para pagar la deuda, mi esposo tomó algunos contratos para construir casas.
Un día, mi esposo me pidió que lo ayudara en una obra para que pudiera completar el proyecto. Acepté y fui con él a las 7 a.m. Mi dedo índice izquierdo quedó atrapado en la cinta de la mezcladora de concreto alrededor de las 8 a.m. La carne en la punta de mi dedo fue arrancada, dejando el hueso expuesto. No hubo sangre ni tuve dolor en ese momento.
Mi esposo me llevó a casa de mi sobrina y él volvió al sitio de construcción. Mi sobrina y su esposo son ambos médicos. El esposo de mi sobrina echó un vistazo a mi mano y dijo que era demasiado grave para manejarlo en casa. Me llevó al Cuarto Hospital Municipal, donde el médico suturó el dedo.
Después de que el médico terminó, me dijo que comprara analgésicos de calidad, porque me dolería mucho, y que consiguiera algunos antibióticos. Dije que estaba bien porque tengo a Shifu que cuida de mí. No tomé ni una sola pastilla y no recibí ninguna inyección. Pagué la cuenta médica de 50 yuanes ($7) y regresé a casa de mi sobrina.
Esa noche, mi hijo, mi nuera y mi esposo vinieron a recogerme para ir a casa de mi hermano a cenar. Mi esposo iba en su motocicleta al frente y mi hijo lo seguía en su coche. En una curva, de repente perdimos de vista la luz trasera de la motocicleta. Mi hijo estacionó el coche y salió a buscar a su padre. Vimos su motocicleta en el suelo pero no lo vimos a él. Lo buscamos y lo encontramos tendido a unos 10 metros. Bajé y lo sostuve en mis brazos y pedí ayuda a Shifu. "Shifu, estoy en problemas. Por favor, ayúdame". Grité repetidamente al cielo oscuro.
Mi esposo despertó y pudo hablar. Lo llevamos de vuelta a casa de mi sobrina y comenzó a vomitar. El esposo de mi sobrina le dijo a mi hijo que llevara a mi esposo al primer hospital municipal en la universidad médica. Me quedé en casa de mi hermano y envié pensamientos rectos con mi cuñada, que también es practicante. No sentí ningún dolor en mi mano izquierda durante toda la noche.
Mi esposo perdió la conciencia a mitad de camino hacia el hospital. El esposo de mi sobrina llamó a una ambulancia. Mi esposo fue llevado a la unidad de cuidados intensivos (UCI) mientras comenzaba a tener incontinencia, vomitaba sangre y sangraba por la nariz. Los resultados de los exámenes mostraron que tenía el cráneo fracturado y un sangrado cerebral. El médico dijo que la zona que sangraba era un área sensible y no se podía operar.
Mi esposo recuperó la conciencia varias horas después. En medio de la noche, mi hijo nos llamó y dijo que su padre estaba fuera de peligro, su cerebro ya no sangraba y estaba consciente. Finalmente dejé de preocuparme. No puedo expresar mi gratitud a Shifu con palabras. Fue Shifu quien lo protegió.
Fui a ver a mi esposo a la mañana siguiente. Más de 30 parientes también se apresuraron al hospital. Habían escuchado la noticia de que mi esposo no tenía posibilidades de ser salvado, y se alegraron al ver que estaba bien.
Para entonces, mi mano lesionada comenzó a mostrar líneas rojas a lo largo de los vasos sanguíneos, y estaba hinchada y con un dolor severo. Mi hijo y mi nuera me llevaron a casa de mi hermana, donde tomé una ducha e hice los ejercicios de Falun Dafa. Cuando hice el primer conjunto de ejercicios por segunda vez, sentí una corriente cálida fluyendo por mis brazos y el dolor en mi mano desapareció.
Comí algunos fideos y completé el quinto ejercicio de meditación. Después, pude dormir bien.
A la mañana siguiente después de nuestros accidentes, visité a mi esposo en el hospital y le llevé algunos dumplings. Algunos parientes me preguntaron por mi brazo. Me subí la manga, pero no había líneas rojas. Cuando mi sobrina vio que mi mano había sanado en una noche sin tomar ningún medicamento ni inyecciones, dijo a nuestros parientes: "Falun Dafa es tan mágico. Después de que practicara anoche, toda la rojez e hinchazón desaparecieron. ¡Ni siquiera las inyecciones y los medicamentos podrían haber tenido tal efecto!".
Mi esposo se recuperó rápidamente y fue dado de alta del hospital al tercer día. Mi mano se recuperó alrededor de un mes después, y pude cosechar los cultivos en los campos.
Mi esposo y yo enfrentamos el peligro el mismo día. Afortunadamente, ambos practicamos Falun Dafa y, bajo la protección de Shifu, sobrevivimos a los desastres. ¡Mis familiares tienen mucho respeto por Falun Dafa!
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