​Joven practicante de Falun Dafa: Aprendiendo a confiar plenamente en Shifu y en el Fa

(Minghui.org) Soy un joven practicante de Falun Dafa en los Estados Unidos. A pesar de practicar Falun Dafa durante casi 20 años, mi camino de cultivación no ha sido fácil. Además de cometer muchos errores, no siempre me he adherido a los estándares de un verdadero practicante en mis pensamientos, acciones y hechos.

Estoy agradecido por el constante aliento de Shifu. Shifu me ha guiado de regreso cada vez que me he desviado y ha profundizado mi comprensión de lo que significa ser un Dafa dizi en este período de rectificación del Fa.

Confiar plenamente en Shifu y en el Fa

Trabajo en el sector de la salud y me he mudado a los EE. UU. para mis estudios. Mirando hacia atrás, Shifu organizó compasivamente cada paso de mi camino, colocándome donde necesitaba estar para poder tener éxito en mis estudios, carrera y cultivación.

A pesar de conocer la importancia de creer en Shifu y en el Fa, ocasionalmente, mis apegos eran tan grandes que superaban mi fe. Cuando solicité mi pasantía en el hospital durante mi último año de estudios profesionales, recité el Fa con frecuencia:

"…si algo te pertenece, no lo pierdes, y si algo no es tuyo, no lo consigues por más que luches". (Séptima Lección, Zhuan Falun)

Aunque me dije que todo había sido arreglado por Shifu y que no debía obsesionarme con el resultado, mi comprensión de los arreglos de Shifu seguía siendo superficial. Había decidido ingresar a un famoso hospital universitario para mi pasantía e incluso me había convencido de que, si recibía capacitación allí, aumentaría el prestigio de Dafa. Pero en realidad, mi verdadera motivación y deseo era buscar la fama y presumir. Mientras imaginaba en secreto cómo pasaría mi tiempo en este programa de pasantías, continué recitando las enseñanzas de Shifu una y otra vez. Pensé que hacerlo significaba que había renunciado a mis apegos mundanos, que mis deseos estaban alineados con mi camino de cultivación y que estaba siguiendo los arreglos de Shifu.

Cuando abrí el correo electrónico y descubrí que no había logrado obtener mi primera opción, e incluso mi segunda opción, mi corazón se hundió. Confundido y conmocionado, pensé que algo debía haber salido mal. Lloré hasta que se me hincharon los ojos y me quejé con los demás de lo injusto que era el proceso de selección. Me resistía a mudarme al otro lado del país para un programa de pasantías en el que no tenía interés. Sentí lástima de mí y no podía entender por qué las cosas habían sucedido de esta manera.

Después de completar a regañadientes la mudanza a través de los Estados Unidos, comencé mi programa de pasantías. Pronto me di cuenta de que Shifu había organizado meticulosamente el mejor camino para mí. Había sido cegado por mi bajo entendimiento y mis apegos humanos.

En realidad, este programa de pasantías me dio exactamente lo que necesitaba, las mejores y más extensas oportunidades de pasantías en el campo de la medicina. Disfruté tanto de mi programa de pasantías que extendí mi estadía por un año más para aprender más. Los pacientes que trataba cada día presentaban varios desafíos de cultivación, lo que me ayudó a elevar mi carácter.

En esta nueva ciudad, participé en nuevos proyectos de Dafa y aclaré la verdad a muchos seres conscientes. También conocí a otros jóvenes practicantes, y formamos un grupo muy unido que se animaba y apoyaba mutuamente en la cultivación.

Mirando hacia atrás ahora, me doy cuenta de que mis lágrimas y quejas eran realmente contra Shifu. Me arrepiento de haber mostrado mi inmadurez y frustración cuando las cosas fueron en contra de mis deseos. Me arrepiento de haber cuestionado los arreglos de Shifu. Ahora sé que incluso si las cosas no salen de acuerdo con las nociones de la gente común, todos los eventos en mi camino de cultivación ocurren por una razón.

Hacia el final de mi programa de pasantías, me encontré con otra prueba. Menos de una semana antes de mudarme a una nueva ciudad, me dijeron que un error de comunicación significaba que no podía comenzar a trabajar con mi nuevo empleador durante otros tres meses. Estaba conmocionado, molesto y confundido. Ya había enviado mi coche y todas mis pertenencias a la nueva ciudad y había notificado a mi antiguo empleador de mi renuncia. ¿Cómo pudieron hacerme esto?

Mientras me apresuraba a alquilar un automóvil, encontrar un lugar para quedarme en el sofá de un amigo y negociar la continuidad del empleo en mi lugar de trabajo actual, me di cuenta de que necesitaba calmarme. Como cultivador de Dafa, mi corazón no debería ser influenciado tan fácilmente.

Me di cuenta de que debía haber una razón para mi incapacidad para irme y decidí enfrentar mi situación actual con calma. Después de dejar de lado mis nociones humanas, las cosas pronto se aclararon. Durante los meses siguientes, encontré la oportunidad de aclarar la verdad sobre Falun Dafa a dos colegas con los que nunca había hablado antes. Asistí a varias reuniones con jóvenes practicantes locales de Falun Dafa, donde compartimos en detalle las dificultades y dudas experimentadas mientras nos cultivábamos. Participé en un importante proyecto de esclarecimiento de la verdad en el campus de mi universidad y me encontré con una joven practicante que había decidido volver a la práctica de cultivación el día antes de que yo me fuera. Pude conectarla con miembros del grupo local de jóvenes practicantes de Falun Dafa antes de irme.

Mientras estaba sentado en el avión que se preparaba para partir, agradecí sinceramente a Shifu por estas preciosas oportunidades, que me habían permitido ir a lugares y encontrarme con seres conscientes que habría extrañado mientras mejoraba mi nivel de cultivación. En la actualidad, soy el único practicante de Falun Dafa en el área donde vivo y trabajo. Sé que esto no es una coincidencia y que debo recorrer mi propio camino para salvar a los seres conscientes aquí. Seguiré los arreglos de Shifu y haré todo lo posible para llegar a todos los seres conscientes.

Dejar ir los apegos mientras se hacen proyectos de Dafa

Hace dos años, me pidieron que sirviera como coordinador del grupo de transcripción de entrevistas de la audiencia de Shen Yun. Cuando un coordinador me preguntó previamente, mi reacción instintiva fue decir "no" o dar una respuesta evasiva para poder renunciar en el futuro si la carga de trabajo se volvía demasiado. A pesar de haber transcrito durante muchos años, seguía sin estar seguro de asumir una responsabilidad tan grande. Pero pensándolo bien, me pregunté si Shifu estaba tratando de decirme que era hora de asumir un papel más importante. El coordinador original también me aseguró que se quedaría para ayudar, así que acepté.

Sin embargo, justo antes de que comenzara la temporada de actuación, este coordinador me dijo que dejaba este grupo para poder trabajar a tiempo completo en un proyecto de medios. Me enfrenté a varias tribulaciones durante los siguientes cinco meses. Tuve que trabajar a tiempo completo, escuchar y transcribir entrevistas para 20 o 30 actuaciones cada semana mientras coordinaba y gestionaba a los miembros del grupo de transcripción de todo el mundo. Aunque enviaba mensajes al menos una vez a la semana pidiendo ayuda, era difícil encontrar a alguien disponible. Fue difícil encontrar voluntarios para la mayoría de las actuaciones. Los pocos voluntarios que teníamos se vieron en apuros para transcribir las muchas entrevistas que obtuvimos a lo largo de la semana. Algunos voluntarios no se presentaron en línea para trabajar a pesar de haber acordado previamente. Durante ese período, escuché y transcribí entrevistas de audio por mi cuenta hasta la medianoche.

Esa temporada se añadieron con frecuencia espectáculos adicionales en ciudades donde las entradas estaban agotadas. Sin embargo, nunca recibí notificación de estos programas adicionales hasta que los reporteros comenzaron a enviarme mensajes urgentes, preguntando sobre el estado de sus transcripciones y solicitando que nos apresuráramos porque tenían una agenda apretada. Cada vez que esto ocurría, me quejaba de nuestra creciente carga de trabajo o comunicaba mi descontento respondiendo a sus mensajes de manera grosera.

Tenía que quedarme en mi apartamento después del trabajo y los fines de semana, transcribiendo entrevista tras entrevista. Poco a poco, mi insatisfacción, resentimiento y enojo crecían. Me molestaba que el antiguo coordinador me dejara con esta carga. Me molestaban los compañeros practicantes que se negaban a ayudar. Me molestaban los reporteros que no entendían lo duro que era el trabajo de transcripción y no me informaban de los nuevos programas. Sentí lástima por mí y celos de tener que quedarme en casa y trabajar mientras otros practicantes podían disfrutar de las vacaciones de fin de semana.

Después de que terminó la temporada de actuación de Shen Yun, pensé en los últimos meses y me sentí orgulloso de mí mismo. A pesar de las dificultades y los problemas, perseveré y coordiné con éxito este gran proyecto. ¿Qué repercusiones hubiéramos sufrido si no me hubiera esforzado por transcribir tantas entrevistas? Sentí que había hecho una contribución significativa. Unos meses más tarde, el artículo de Shifu "Mantente alejado del mal peligroso" sirvió como una gran llamada de atención.

Sentí que había renunciado a mi tiempo libre, transcrito tantas entrevistas y sacrificado tanto por Shen Yun y Dafa. Sin embargo, nunca me había considerado honrado o afortunado de que Shifu compasivo me concediera la oportunidad de cumplir mi misión. Utilicé mi trabajo para justificar el seguimiento de mis apegos y pensamientos negativos. Sin embargo, nunca me detuve a considerar que los compañeros practicantes también estaban en el mismo barco, haciendo malabarismos con trabajos de tiempo completo, familias u otros proyectos de Dafa, además de hacer trabajo de transcripción.

En lugar de resentimiento hacia aquellos que no ayudaron, debería estar agradecido con aquellos que se tomaron el tiempo para ayudar. Nunca había considerado las dificultades de encontrar a los miembros adecuados de la audiencia para entrevistar, ni el estrés que enfrentaban los reporteros para publicar artículos de calidad antes del final del ciclo de noticias. Teniendo en cuenta sus dificultades, ¿no debería hacer todo lo posible por ayudarlos? ¿Por qué debería estar frustrado por mi mayor carga de trabajo, cuando miles de seres conscientes tendrían la oportunidad de ser salvados debido a los espectáculos adicionales? ¿Por qué solo estaba considerando mis propios sentimientos?

Shifu dijo:

"Los dioses consideran los problemas en su totalidad, multidimensionalmente, mientras que los humanos solo ven la superficie. A veces los Dafa dizi están a mi lado; cada pensamiento, cada idea tuya, tu manifestación, yo no miro para nada tu superficie o tu comportamiento. Yo miro esa intención verdadera tuya, miro lo que tu pensamiento verdadero está pensando esencialmente, lo que está haciendo. Y en este proceso, aunque lo que se manifiesta en la superficie es tu comportamiento –del cual tienes que ser responsable– aun así, yo miro tu esencia". (25 años de la Gran Difusión de Dafa: Explicando el Fa en Nueva York)

Me sentí avergonzado después de leer el Fa de Shifu. No importaba cuántas entrevistas hubiera transcrito, había fracasado e incluso retrocedido en mi cultivación.

Con esta nueva comprensión, afronté el trabajo de transcripción de las entrevistas de Shen Yun 2024 con una mentalidad completamente nueva. A pesar del aumento del número de actuaciones en comparación con el año anterior y la adición de última hora de muchos más espectáculos nuevos, me sentí animado a dar lo mejor de mí. A pesar de los continuos desafíos para encontrar suficientes personas, deseo agradecer sinceramente a todos los practicantes que vinieron a ayudar, incluso si algunos practicantes solo lograron transcribir una entrevista.

Cuando nuestro grupo está corto de mano de obra y estamos perdidos, Shifu frecuentemente hará arreglos para que los practicantes nos ayuden en momentos inesperados. Además, a medida que reflexiono, miro hacia adentro y me mejoro, estoy seguro de que el entorno que me rodea mejorará.

Cultivando en mi lugar de trabajo

A principios de este año, comencé a trabajar en un nuevo trabajo que expuso muchos de mis defectos de carácter. Nuestra clínica atiende a pacientes de bajos ingresos con múltiples problemas médicos. Aunque llené mi agenda al máximo y traté de hacer todo lo posible durante cada visita al paciente, mis dos colegas, por el contrario, pasaron su tiempo holgazaneando. A menudo se negaban a ver a más pacientes y se sentaban frente a sus computadoras sin hacer nada mientras sus asistentes hacían el trabajo por ellos. Todos los días salían temprano del trabajo, mientras yo estaba ocupado atendiendo a los pacientes que rechazaban.

Mis compañeros de trabajo vieron esto y comentaron lo injusto que era. Me sugirieron que informara de la situación a nuestra dirección y empezara a reducir mi carga de trabajo. Estos médicos poco éticos se salían con la suya haciendo menos, mientras que yo me veía obligado a asumir su trabajo para mantener nuestra ética profesional.

Como practicante de Falun Dafa, sabía que tenía que hacer bien mi trabajo. Pero a medida que pasaba el tiempo, comencé a sentirme sobrecargado de trabajo mientras que mis esfuerzos no eran reconocidos. Empecé a quejarme de mis compañeros y de mi mal ambiente de trabajo, me sentía bien al desahogar mis frustraciones. Además, realmente creía que mis dos colegas eran tan perezosos que no podían preocuparse por sus pacientes.

Shifu nos enseñó:

"Además, a la hora de comentar algo, sólo deben comentar si el asunto es bueno o malo, no hagan comentarios sobre los individuos. Tal vez algo hecho por una persona puede ser incorrecto en este aspecto, mientras que otros aspectos de la persona pueden ser buenos. Si pueden llegar a estar con misericordia ante cualquiera, y tienen el corazón de amor ante cualquiera, de verdad, realmente no es algo que la gente corriente pueda hacer, y especialmente hacer cualquier cosa basado en el corazón compasivo hacia las multitudes de seres, será aún más difícil. ¡Pero los Dafa dizi tienen que lograrlo!". (Despierta con un sobresalto)

Cuando leí este párrafo por primera vez, creí que no tenía nada que ver conmigo, ya que nunca publico nada en las redes sociales. Incluso pensé: "De hecho, algunos practicantes deberían ser más cuidadosos con sus palabras y acciones". Pero después de asistir a una conferencia local del Fa y mirar hacia adentro, me di cuenta de que Shifu había señalado mi mayor defecto.

Dejando a un lado las actitudes laborales de mis colegas, no había tratado a mis colegas con compasión, y mucho menos con tolerancia. No pasé por alto sus defectos ni consideré que su bondad podría incluso reemplazar a la mía en otros aspectos. Peor aún, pensaba que yo era mejor que ellos porque trabajaba más duro y no me quejaba frente a ellos. De hecho, mis acciones fueron peores, porque me quejé de ellos a sus espaldas y dejé que el resentimiento se acumulara en mi corazón.

Durante mucho tiempo, no consideré mi lugar de trabajo como un entorno para la práctica de cultivación. Más bien, como una persona común, lo veía como un lugar hostil donde otros trataban de crearme problemas. Esta mentalidad todavía existe dentro de mí, y estoy trabajando para superarla. Estoy agradecido a Shifu por señalar mis apegos y trabajaré duro para deshacerme de ellos.

La cultivación en sí no es fácil. Todavía tengo muchos apegos de los que deshacerme, como el miedo, la pereza, la complacencia y la obsesión con mi teléfono móvil.

Lo anterior se basa en mi limitado entendimiento. Por favor, corríjame si hay alguna deficiencia.