(Minghui.org) Un residente de Changchun, provincia de Jilin, de 60 años, vio negadas las visitas familiares en repetidas ocasiones mientras cumple una sentencia de seis años de prisión por su fe en Falun Gong.
El Sr. Shi Wenzhuo fue arrestado el 16 de marzo de 2023. El Tribunal del Distrito de Kuancheng lo juzgó en secreto en agosto y diciembre de 2023, antes de sentenciarlo a seis años el 19 de diciembre de 2023. Apeló ante el Tribunal Intermedio de Changchun, que confirmó la sentencia original.
Tras ser trasladado a la Prisión de Gongzhuling el 14 de mayo de 2024, el Sr. Shi fue sometido a diversas torturas con el objetivo de obligarlo a renunciar a Falun Gong. Cuando su familia lo visitó el 14 de junio de 2024, tenía el rostro enrojecido e hinchado, ojeras y se aferró a la barandilla durante toda la conversación, mostrándose muy débil.
La familia del Sr. Shi lo visitó una vez al mes durante julio y agosto de 2024. Sin embargo, al regresar a la prisión en septiembre de 2024, no se les permitió verlo y se les informó que debían obtener autorización de la división penitenciaria donde se encontraba retenido. Sin dicha autorización, se les seguiría negando la visita incluso si se presentaban en la prisión. Llamaron a la división, pero nadie respondió. Tuvieron que apelar ante la administración penitenciaria y la división de apelaciones.
El día de la visita, el 16 de mayo de 2025, la familia aún no había recibido la notificación telefónica de la prisión para visitar al Sr. Shi. Llamaron a la administración penitenciaria, quienes hicieron que el Sr. Shi los llamara.
La familia del Sr. Shi pudo visitarlo en persona el 27 de junio de 2025. Sin embargo, entre julio y septiembre de ese mismo año, se les volvió a denegar la visita, ya que el Sr. Shi se negó a cooperar con una inspección realizada por el Comité de Asuntos Políticos y Legales en julio de 2025. Como castigo, también fue obligado a permanecer sentado e inmóvil en un pequeño taburete durante largas horas.
Según informes, todos los practicantes de Falun Gong encarcelados allí deben asistir a sesiones de lavado de cerebro y escribir insultos en sus informes. El recluso Wang Jianhang fue asignado para vigilar a los practicantes y los guardias le permitieron golpearlos e insultarlos a su antojo.
El Sr. Shi comenzó a practicar Falun Gong en marzo de 1999 y nunca flaqueó en su fe tras el inicio de la persecución cuatro meses después. Desde entonces, ha sido blanco de ataques reiterados por defender su fe. Antes de su último arresto, fue sentenciado a un año de trabajo forzado en 2000 y a dos sentencias de prisión (nueve años en 2002 y cuatro años en 2012).
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