(Minghui.org) Un hombre del condado de Linyi, provincia de Shanxi, fue brutalmente torturado mientras cumplía una condena de seis años por su fe en Falun Dafa. Sigue inválido tras su liberación de prisión el 6 de noviembre de 2018.
La pena de prisión del Sr. Wang Shimin se derivó de su detención el 22 de mayo de 2012 por agentes de la Oficina 610 del condado de Linyi. Le confiscaron sus libros de Falun Dafa y su laptop. Al día siguiente lo llevaron a su oficina y esa misma noche lo pusieron en libertad bajo fianza ante la insistencia de su familia.
Un agente de la comisaría de Beixin llamó al Sr. Wang el 6 de noviembre de 2012 para pedirle que fuera a retirar su ordenador portatil confiscado. Él acudió, pero al llegar fue detenido por el capitán Linghu Chunxi, de la Oficina de Seguridad Nacional del condado de Linyi, y otros tres agentes, entre ellos Zhang Yunlai.
La familia del Sr. Wang acudió tres veces al Centro de Detención del condado de Linyi, pero en todas ellas se les negó la visita. El Tribunal del condado de Linyi vio su caso el 3 de mayo de 2013 y lo condenó a seis años.
El Tribunal Intermedio de la ciudad de Yuncheng dictaminó mantener la condena injusta del Sr. Wang sin realizar una audiencia pública. Yuncheng supervisa el condado de Linyi.
El 17 de septiembre de 2013, ingresó en la Prisión de Jinzhong, donde ya había cumplido una condena de tres años por su fe. No se notificó a su familia el traslado a la prisión con antelación.
Mientras estuvo recluido en el equipo para ancianos y enfermos, fue brutalmente golpeado en numerosas ocasiones. En una ocasión, tras una paliza, le sangró profusamente la boca y la sangre empapó la mitad de su camisa. En otra ocasión, un recluso le dio una patada tan fuerte en el muslo que giró incontroladamente y una de sus piernas permaneció levantada durante un rato. El instructor Sun Wenbin no hizo nada para detener al recluso.
Debido a los abusos prolongados, el Sr. Wang desarrolló parálisis en un lado del cuerpo. En 2016, quedó completamente paralizado y no podía caminar en absoluto. La prisión lo envió al Hospital 109 (también conocido como Prisión de Xinkang) en enero de 2017. Semanas más tarde, se notificó a su familia para que lo visitaran en el Hospital de la Policía de la provincia de Shanxi. Fueron y observaron que estaba al borde de la muerte. Su solicitud de libertad condicional no obtuvo respuesta.
El 13 de marzo de 2017 fue devuelto a la Prisión de Jinzhong. El jefe de la División 16 pidió a su familia que le comprara una silla de ruedas.
El 6 de noviembre de 2018, día previsto para la puesta en libertad del Sr. Wang, la Oficina 610 del condado de Linyi lo recogió y lo llevó al Hospital de la ciudad de Sunji, en el condado de Linyi, donde se pidió a su familia que lo esperara. Lo sacaron del vehículo en una camilla. Permaneció postrado en cama y en silla de ruedas durante los años siguientes. La prisión nunca le ha proporcionado ninguna indemnización.
Según fuentes internas, muchos otros practicantes de Falun Dafa después del Sr. Wang siguen siendo torturados en la Prisión de Jinzhong (situada en el condado de Qi, ciudad de Jinzhong). La Prisión de Beijing envió delegados a Jinzhong cerca del 20 de abril de 2025 para entrenar a los guardias de allí en la persecución a los practicantes de Falun Dafa.
A partir de mayo de 2025, la Prisión de Jinzhong retuvo a los practicantes recién ingresados en una sala de aislamiento en la cuarta planta, uno por uno, para someterlos a un lavado de cerebro intensivo. Los practicantes fueron obligados a permanecer de pie todo el día sin dormir. Fueron golpeados y rociados con spray pimienta. Después de un tiempo, los practicantes fueron asignados a varias divisiones, donde fueron nuevamente retenidos en régimen de aislamiento.
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