(Minghui.org) Minghui.org ha informado anteriormente sobre el abuso de una residente de la ciudad de Qitaihe, provincia de Heilongjiang, encarcelada en la prisión de mujeres de la provincia de Heilongjiang porque practica Falun Gong. Surgió nueva información de que el abuso nunca se detuvo. La Sra. Zhang Liping ahora ha perdido casi todos sus dientes y lucha contra la mala salud y la confusión.
La Sra. Zhang, de 62 años y ex arquitecta paisajista, fue arrestada el 11 de marzo de 2019, después de ser denunciada por distribuir materiales de Falun Gong. Fue puesta en libertad bajo fianza cuatro días después y sentenciada a nueve años en un momento desconocido. Fue detenida de nuevo e ingresada en la prisión de mujeres de la provincia de Heilongjiang en junio de 2021.
La prisión rotó a la Sra. Zhang a través de varios equipos en la División 8, incluidos el Equipo 4, el Equipo 12, el Equipo 10 y el Equipo 8. Dondequiera que la retuvieran, fue sometida a abusos implacables a manos de los guardias y las reclusas.
Abuso en el Equipo 4
La guardia Guo Lei estaba a cargo de perseguir a la Sra. Zhang en el equipo 4. La reclusa principal Ma Yiwen y las reclusas Han Jie y Xu Jun la ayudaron. Obligaron a la Sra. Zhang a tomar medicamentos para la hipertensión todos los días. (No está claro si tenía la afección). Le abrieron la boca cuando ella se negó a obedecer. Sus incisivos se aflojaron como resultado. Sus gritos se escuchaban a menudo por la mañana.
Más tarde, la Sra. Zhang fue retenida en la celda y no se le permitió salir en absoluto. Las reclusas consiguieron un orinal para que ella hiciera sus necesidades. Una vez hizo los ejercicios de Falun Gong y las reclusas le ataron las manos con una sábana, luego la colgaron por las muñecas en la cama superior de una litera. Sintió un dolor insoportable.
Abuso en el Equipo 12
Cuando la Sra. Zhang se sentó en la posición de loto para meditar, la reclusa Han, quien también fue reasignada al equipo 12, trató de detenerla. Ella se negó a obedecer, por lo que Han la golpeó en la cara, golpeando sus incisivos sueltos.
Han gritó: "¡Te golpeé! ¡Repórtame a los guardias! ¡Hace tiempo que quería dejar de monitorearte! ¡Pídeles que me reemplacen!". Inicialmente estaba programada para ser liberada, pero se extendió su condena. Luego, los guardias la asignaron para monitorear a Zhang. La reprendieron cuando no estaba "trabajando duro" con Zhang. Había tres cámaras de vigilancia de alta definición en la celda y Han no se atrevió a dejar de perseguir a la Sra. Zhang.
Abuso en el equipo 10
El guardia Guo Linlin vio a la Sra. Zhang meditando en la cama un día y la obligó a sentarse en un pequeño taburete toda la noche. Las seis reclusas del mismo equipo que también fueron obligadas a permanecer despiertas toda la noche descargaron su ira contra la Sra. Zhang.
Abuso en el Equipo 8
Cuando la Sra. Zhang se sentó al mediodía un día para meditar, la reclusa principal Li Miao trató de tirar de sus piernas, pero no pudo hacerlo. Luego golpeó la cabeza de Zhang contra la pared. Zhang sintió un dolor agudo en la parte posterior de la cabeza.
Esa tarde, Zhang se sintió mareada y tuvo que acostarse. Luego escuchó a la reclusa Qi Xin decir: "Después de que me liberen, denunciaré a los practicantes de Falun Gong cada vez que vea uno". Zhang se sintió extremadamente triste de que Qi tuviera una actitud tan hostil hacia Falun Gong. Luego se declaró en huelga de hambre durante cuatro días para protestar por el abuso.
Al quinto día, el guardia de turno llegó después de las 6 p.m. para pasar lista. Tan pronto como la Sra. Zhang se levantó de la cama, se derrumbó y perdió el control de sus manos. El guardia le tomó la presión arterial y era de más de 200 mmHg.
Zhang fue trasladada de urgencia a un hospital y diagnosticada con una hemorragia cerebral. En menos de una semana, la llevaron de regreso a la prisión. El médico del hospital le advirtió que permaneciera en cama durante tres meses para evitar un segundo episodio de sangrado.
La prisión no permitió que Zhang usara una silla con inodoro para hacer sus necesidades. Luchó contra el estreñimiento crónico y solicitó un enema de glicerina. La reclusa Ma del equipo 4, que estaba a cargo de dispensar medicamentos, le dio el laxante solo dos veces a pesar de que lo necesitaba con más frecuencia. Cuando su condición se volvió realmente grave, la reclusa Qi la ayudó a extraer manualmente sus heces.
Otra practicante de Falun Gong encarcelada en la misma prisión denunció el maltrato de la Sra. Zhang al jefe de guardia. Antes de que se pudiera hacer algo, Zhang pudo levantarse de la cama. Debido a la falta de atención en su período de recuperación temprana, perdió la función en una de sus manos y no podía sostener nada. Necesitaba gente que la cuidara. Más tarde, la prisión organizó a la reclusa Hu Hongyan para que la cuidara y su situación mejoró un poco.
Con más de cuatro años restantes en su sentencia, la Sra. Zhang lucha todos los días debido a su mala salud. Perdió casi todos sus dientes y comer es extremadamente difícil. Su mente a menudo no estaba lúcida, pero siempre recuerda que es practicante de Falun Gong. Quería hacer los ejercicios de Falun Gong para mejorar su salud, pero no se le permitió.
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