De TikTok a Xiaohongshu (RedNote)

(Minghui.org) Quienes están familiarizados con la historia moderna de China conocen la Revolución Cultural, durante la cual millones de fervientes guardias rojos atacaron a sus compatriotas en una campaña política que causó sufrimientos indecibles. Estos guardias rojos solían llevar como guía espiritual un ejemplar del Xiao Hong Shu (Pequeño Libro Rojo), una colección de citas de Mao Zedong que inculcaban la lucha de clases y el odio.

Décadas después de que terminaran los estragos, por nostalgia, el término xiaohongshu se utilizó para denominar una red social china y una plataforma de comercio electrónico. La versión inglesa de la aplicación se conoce como RedNote o RED. Cerca de medio millón de «refugiados» estadounidenses de TikTok han descargado o registrado recientemente cuentas en RedNote.

Este repentino aumento de la comunicación no gubernamental sino-estadounidense en una aplicación china ha sorprendido y alegrado a los usuarios chinos. Algunos incluso pensaron erróneamente que el cortafuegos chino de Internet había caído. Cabría esperar que este entorno aparentemente relajado estuviera fuertemente censurado o aislado por las autoridades del Partido Comunista Chino (PCCh). Sin embargo, los mensajes de algunos de estos «refugiados de TikTok» han sorprendido a los usuarios chinos.

Una joven celebridad estadounidense de Internet publicó: «Amo al presidente Mao, amo al presidente Xi; derrotar a Biden, derrotar a Trump». Algunos se burlaron abiertamente del gobierno estadounidense. «Amo a los espías chinos, y me mezclo con espías chinos», escribió uno de ellos. Otro usuario mostró una pila de documentos en un vídeo y dijo ante la cámara: «Quiero entregar toda la información personal al gobierno chino. No necesitan robarla».

Algunos «rosaditos» del PCCh (jóvenes chinos que apoyan y defienden fervientemente al PCCh) se entusiasmaron de inmediato, como si acudieran a un carnaval; algunos aprovecharon la ocasión para repetir el lema de «Oriente en ascenso [China comunista], Occidente en declive» mientras menospreciaban a EE. UU. Por otro lado, algunos se enfadaron y se preguntaron cómo un «país grande y poderoso [como China] podía permitir que los “imperialistas corruptos y decadentes” hablaran inglés en nuestra aplicación». Algunos chatearon con los estadounidenses, preguntándoles por sus sueldos y detalles de su vida cotidiana.

TikTok es muy eficaz a la hora de atraer a los jóvenes hacia contenidos con agendas que incluyen la cultura woke, el ecologismo, la neutralidad de género y el discurso extremista. Su contenido aparentemente aleatorio, servido por algoritmos cuidadosamente diseñados, ha envenenado a un gran número de jóvenes desprevenidos en Estados Unidos y en todo el mundo durante los últimos ocho años. Mientras tanto, se censura cualquier discurso que vaya en contra del PCCh.

Desde su introducción en la comunidad internacional en septiembre de 2017, TikTok ha desempeñado esencialmente el papel de un «fentanilo espiritual.» A través de sus algoritmos de contenido, empuja continuamente la ideología comunista a los usuarios internacionales, desarrollando gradualmente en ellos una afición por el PCCh y sus valores.

No es sorprendente que estos jóvenes usuarios estadounidenses de TikTok no sepan mucho sobre la Revolución Cultural, la masacre de la plaza de Tiananmen en 1989, la persecución a Falun Gong y otras atrocidades del PCCh contra los derechos humanos. No saben que a los disidentes se les etiquetó de «enfermos mentales» y se les recluyó en centros psiquiátricos, ni vieron el sufrimiento que padeció el pueblo chino bajo la política de «cero-COVID» del PCCh. No tienen una distinción clara entre el PCCh y China, y hacen suposiciones sobre la vida en China basándose en sus propias vidas en otros países.

Imaginemos a un niño que ha llevado una vida cómoda desde que nació y ha recibido amor, comprensión y apoyo todo el tiempo. Aun así, puede quejarse de la disciplina de sus padres, de no tener suficiente libertad, de no recibir suficiente amor, etc. Protegido de la maldad y el odio, piensa que los demás en el mundo viven como su familia. Mientras tanto, puede que su vecino tenga problemas para llegar a fin de mes y sobreviva a duras penas, por lo que no puede permitirse el lujo de preocuparse por esos «problemas del primer mundo».

Alguien que crece en TikTok puede pensar que la China comunista también respeta la dignidad y la privacidad, e incluso puede pensar que los estadounidenses son los que menos libertad tienen. Poco sabe que lo que ha visto ha sido cuidadosamente empaquetado y seleccionado por sofisticados algoritmos.

La guerra sin restricciones del PCCh no tiene límites morales. La oleada de «refugiados de TikTok» demuestra hasta qué punto el PCCh se ha infiltrado en Estados Unidos. Pero esta es sólo una de las muchas trampas. Además de TikTok y RedNote, el PCCh también controla WeChat y Lemon8, una aplicación hermana de TikTok propiedad de la misma empresa matriz.

Mientras más gente se ha dado cuenta del engaño y la brutalidad del PCCh, ahora vemos que un gran número de jóvenes en América, Taiwán y otros lugares han sido fuertemente influenciados por la ideología del PCCh. Cómo despertarlos es una cuestión seria y urgente.