​Cultivándome bien y recompensando la gracia salvadora de Shifu

(Minghui.org) En el verano de 1998, un día comí por error hongos venenosos y me enfermé gravemente. Fui llevada al hospital para recibir tratamiento de emergencia y me encontraba en estado crítico. Los médicos emitieron un aviso de enfermedad grave en tres ocasiones distintas. Después de más de un mes en el hospital, los médicos temieron que muriera allí, por lo que me dieron de alta al observar cierta mejora en la función de mis riñones.

En ese momento, mi familia era pobre y vivíamos del salario de mi esposo. Como no teníamos dinero para pagar mi tratamiento, tuvimos que cubrir los gastos del hospital con cheques emitidos por la fábrica donde trabajaba mi esposo. Luego, la fábrica deducía el monto de su salario mensualmente para reembolsar los gastos. No tuve más opción que regresar a casa para recuperarme.

Durante ese período, un grupo de personas hacía sus ejercicios en un área al aire libre frente a mi casa. Ponían la música de sus ejercicios a las 6 de la mañana todos los días. Su música era muy agradable, así que sentí curiosidad por salir a echar un vistazo. Arrastré mi cuerpo cansado y, tambaleándome, salí por la puerta hacia el lugar donde practicaban. Vi un cartel colgado allí, y las palabras que decía me llamaron la atecion. También escuché que practicar Falun Dafa podía curar mis enfermedades. Mi rostro hinchado se llenó de sonrisas y esperanza. Pensé para mí misma: quiero practicar esto.

Así fue como establecí mi relación predestinada con Falun Dafa. También obtuve una copia del libro Zhuan Falun y lo leí con atención. Luego participé en los ejercicios grupales, vi las conferencias grabadas de Shifu y viví de acuerdo con el estándar de una practicante de Dafa. Sin darme cuenta, mi cuerpo comenzó a sentirse más relajado. Estaba muy feliz y sentía que la práctica era maravillosa. Así comencé mi camino de cultivación.

Pruebas de Xinxing en mi camino de cultivación

Un día, mientras compraba víveres a los vendedores en la calle, encontré más de 80 yuanes en el suelo. Inmediatamente los entregué a los oficiales de policía en una estación de policía cercana. Cuando me preguntaron por qué lo hacía, respondí: "Practico Falun Dafa. Fue Shifu quien me enseñó a hacerlo".

Poco después, en julio de 1999, el Partido Comunista Chino (PCCh) comenzó a perseguir a Dafa. Perdimos nuestro entorno de cultivación grupal, y sentí como si el cielo se estuviera cayendo y no hubiera luz en absoluto.

En ese momento, cuidaba la tienda de mi hija para poder tener contacto con más personas, lo que me facilitaba aclarar la verdad. En este rol, también enfrenté pruebas de xinxing. Por ejemplo, no sabía cómo distinguir entre dinero real y falso. Después de recibir muchos billetes falsos, pensando que eran reales, mi hija se enfureció. Dijo que iba a llevarla a la quiebra.

Le dije con calma: "Asumiré toda la responsabilidad por el dinero falso". Cuando alguien me pidió que vendiera esos billetes, me negué, porque pensé que no podía permitir que perjudicaran a otras personas con ellos. En los siguientes años, fui aprendiendo gradualmente a distinguir entre billetes verdaderos y falsos.

Hubo muchas más oportunidades para cultivarme. En otra ocasión, un estafador entró a comprar una botella de agua mineral. Dijo que el agua estaba caducada y luego me presionó para que le diera 2,000 yuanes. Las personas en la calle me dijeron que llamara a la policía. No lo hice, pero le pedí que esperara porque no había mucho dinero en la tienda, así que fui a casa a buscar el dinero y se lo di.

Al día siguiente, otra persona del grupo de estafadores entró y me dijo que no debía haberle dado el dinero a esa persona, sino a él. Le respondí: "Si haces eso otra vez, llamaré a la policía". Cuando vio que trabajábamos todo el día y todavía vendíamos cigarrillos frente a nuestra casa por la noche, me dijo: "Trabajas tan duro para ganarte la vida. Si hubiera sabido que eras tan trabajadora y amable, no habría ordenado que te estafaran".

Inmediatamente le dije: "Gracias por tener un corazón bondadoso. Por suerte, te encontraste con nosotros. Yo practico Falun Dafa. Si le hubieras hecho esto a otra persona, te habrías metido en problemas. Espero que recuerdes: '¡Falun Dafa es maravilloso! ¡Verdad, Benevolencia, Tolerancia es maravilloso!'. Por favor, ya no engañes a la gente". Más tarde, cuando intentaron estafar a otras personas, no lo lograron.

Me iluminé a que todo lo que encontraba era para ponerme a prueba y mejorar mi xinxing.

Mi creciente apego al sentimentalismo causó una tribulación

Mi esposo murió de cáncer de pulmón en 2020. No podía superarlo y siempre pensaba: él también escuchaba las grabaciones de las conferencias de Shifu y decía que Dafa era bueno, ¿cómo es posible que haya fallecido de repente? Este asunto siempre me preocupaba. No podía soltar mi apego al sentimentalismo y, en cambio, me volví muy apegada a él.

No me di cuenta de que el sentimentalismo era un apego, lo que me causó una grave tribulación de yeli de enfermedad. No podía dormir en toda la noche, mi corazón siempre latía rápido, y latía aún más rápido en cuanto me levantaba de la cama. No sé cuántas veces llamé al 911 y me llevaron al hospital. Quería estudiar el Fa, pero no lograba llevarlo a mi corazón. Solo podía escuchar las grabaciones de las conferencias de Shifu.

Esta situación se prolongó durante casi un mes. Cuando Shifu vio que no comprendía mi situación, me dio una pista que me llevó a pensar: "¿Cómo pude llegar a ser así? ¿Por qué no puedo estudiar el Fa? Debo estudiar el Fa". Así que comencé a calmarme, escuchar las conferencias de Shifu y leer los libros de Dafa. También decidí estudiar el Fa con una mente tranquila. Entonces, gradualmente me recuperé.

Aprovechando el tiempo para salvar a los seres conscientes

Ahora me levanto todas las mañanas a las 3:40 para hacer los ejercicios y estudiar el Fa. Luego, por la tarde, salgo a hablar con la gente sobre Falun Dafa.

Un día, me encontré con un hombre mayor que estaba recogiendo basura. Le aclaré la verdad sobre Dafa. Él dijo: "Si no recogiera basura, no tendría qué comer. Mi hijo tiene dificultades para criar a sus hijos, ¿cómo podría encargarse de mí?".

Le dije: "¡Entonces debería protegerse aún más!". Le pregunté si había renunciado al Partido Comunista Chino (PCCh) y a sus organizaciones afiliadas para garantizar su seguridad.

Él dijo: "No lo he hecho, ni lo creo. Pero sí, me he encontrado con algunas personas que me hablaron sobre eso".

Le dije: "Esas personas te hablaron para salvarlo. Sabe que ellas arriesgaron sus vidas para hacerlo. Si las hubieras denunciado, habrían sido condenadas". Continué aclarando la verdad, explicándole por qué renunciar al PCCh era tan importante. Decidió renunciar al PCCh y aceptó un amuleto de mi parte.

Cuando se fue, me agradeció por contarle todo esto. Le respondí: "Por favor, no me agradezca a mí, sino a mi Shfu. Fue Él quien me pidió salvarlo. Por favor, recite sinceramente: '¡Falun Dafa es maravilloso!' y '¡Verdad, Benevolencia, Tolerancia es maravilloso!'. Así garantizará su seguridad".

Él respondió: "Lo tendré en cuenta".

Otro día, encontré una billetera muy bonita, gruesa y pesada sobre el mostrador de mi tienda. Pensé que debía tener mucho dinero dentro. Sabía que había sido dejada por una clienta que había estado en la tienda por un momento. A ella le gustaba jugar a las cartas al lado. Cuando fui al local de al lado para devolverle la billetera, vi que estaba muy molesta. Le mostré la billetera, y ella inmediatamente saltó de felicidad, me abrazó y me besó, y dijo que quería invitarme a cenar. Le respondí: "¡No se preocupe por eso! No necesita invitarme a cenar". Luego le dije que practicaba Dafa y le aclaré la verdad. Además, le di un amuleto.

Ella estaba muy emocionada y dijo: "Hoy me encontré con una buena persona".

Le dije: "Es cierto. Si hubiera encontrado a una mala persona, podría haberse enojado mucho e incluso haberse enfermado".

Ella seguía agradeciéndome. Le dije: "No tiene que agradecérmelo a mí, pero por favor agradezcale a Shifu. Fue Él quien me pidió hacerlo".

En otra ocasión, había un vendedor de piñas frente a mi tienda. A las 6 p.m., llegó un grupo de agentes de la gestión urbana, se llevaron una canasta de sus piñas y su taburete y luego se marcharon sin decir nada. El joven que vendía las piñas estaba furioso. Tomó un cuchillo para pelar piñas y corrió hacia esos oficiales. Ellos se asustaron muchísimo y rápidamente subieron a sus autos.

El joven no se detuvo y persiguió el coche, listo para atacarlos con su cuchillo. También había varias personas intentando persuadirlo para que se detuviera y tratando de apartarlo, pero temían ser heridas por él por accidente, así que tiraron de la manga de su brazo izquierdo, que no sostenía el cuchillo. La puerta de la escuela estaba llena de estudiantes que iban a clases nocturnas. Había tanta gente que la calle quedó bloqueada y el coche de la gestión urbana no podía moverse.

Parecía que una tragedia estaba a punto de ocurrir. Yo soy una practicante de Falun Dafa, y no podía quedarme allí y mirar. Inmediatamente me acerqué al joven y vi que ya había liberado su mano izquierda. Rápidamente tomé su mano derecha, que sostenía el cuchillo, y le dije con calma: "No hagas esto. No tengo la fuerza para retrocederte, pero te lo digo sinceramente: Deja el cuchillo. Solo es una canasta de piñas. ¿Sabes que tu familia te está esperando para ir a cenar?". Poco a poco, fue abriendo su mano. Solo entonces los agentes de la gestión urbana salieron del coche, le quitaron el cuchillo y se fueron.

Al día siguiente, un agente de la gestión urbana trajo el cuchillo a mi tienda y me preguntó: "¿El joven del asunto de ayer es tu familiar?".

Le respondí: "Ni siquiera lo conozco. Solo sé que es del pueblo al otro lado del río".

El agente dijo: "Dile que venga mañana a la Oficina de Saneamiento Ambiental a recoger las piñas. Ninguno de nosotros las tocó, están intactas".

Luego me agradecieron por ayudarlos y dijeron: "Eres una mujer mayor, pero lograste calmarlo con solo unas palabras sencillas".

Le dije: "¿Saben lo que hago? Practico Dafa. Mis palabras llevan energía positiva. Por favor, no quiten las cosas de los demás a su antojo. Si tienen algo que decir, por favor, háblenlo de manera amable. También se llevaron la mesa y las sillas frente a mi puerta, así como canastas de naranjas. Pero no discutimos con ustedes. Finalmente, por favor recuerden: ‘¡Falun Dafa es maravilloso! ¡Verdad, Benevolencia, Tolerancia es maravilloso!’. Serán recompensados".

Cuando tengo fe en Shifu y en Dafa, Shifu está justo a mi lado

Una compañera practicante tuvo problemas con las autoridades. Debido a que su xinxing no estaba a la altura, me delató diciendo que fui yo quien le proporcionó los materiales de aclaración de la verdad y las conferencias grabadas de Shifu. Así que los oficiales de policía vinieron a saquear mi casa. Primero llegaron a la tienda y comenzaron a revolver todo. Yo me quedé fuera, pidiendo ayuda a Shifu para que no cometieran un crimen contra Dafa y luego fueran eliminados. Mantuve el pensamiento de que no encontrarían nada, ni verían nada. ¡Mi pensamiento se hizo realidad, y realmente no encontraron nada!

El líder de ellos dijo de repente que iban a registrar mi casa. Lo hicieron, pero nuevamente no encontraron nada. Descontentos con el resultado, procedieron a arrestarme y llevarme a la estación de policía. Manteniendo pensamientos rectos, pasé la noche allí durmiendo profundamente y con tranquilidad. Tenía la certeza de que, una vez más, Shifu me había protegido.

Pensé: dado que estoy aquí en su estación de policía, tengo que aclararles la verdad. Después de desayunar al día siguiente, me interrogaron ilegalmente, preguntándo: "¿De dónde provienen estos materiales?".

Respondí con pensamientos rectos: "Estos materiales son cosas que valen la pena que la gente lea, incluido ustedes".

Luego, me amenazaron nuevamente y dijeron: "Con esta cantidad de materiales, es suficiente para sentenciarte".

Les dije: "Los dioses están observando lo que hacen. Los practicantes vinieron a salvar a las personas en un momento en que la humanidad está en peligro, y sin embargo, estos practicantes son perseguidos. ¡El Cielo no lo tolerará! El Cielo ve claramente todo lo que hacen. ¡Piénsenlo bien!".

Un oficial dijo: "Pareces tan amable, ¿cómo es que practicas esto?".

Le respondí: "Solo porque practico Dafa, y Shifu nos enseña a ser buenos, me volví tan amable. ¿Sabes cuán enferma estaba antes? Caminaba tambaleándome. Dafa curó mis enfermedades y me salvó la vida. ¿Acaso parezco una persona enferma? Arrestaron a una persona tan buena; ¿no crearon yeli al hacer eso? Además, solo nos dan agua fría para beber y para bañarnos".

Se quedaron sin palabras, así que me enviaron de vuelta a la celda. Esa noche nos dieron agua caliente. Una practicante que estaba allí no se había bañado en al menos dos semanas y dijo que se dio un baño maravilloso. Después de eso, no nos prestaron mucha atención. Incluso una mujer nos trajo cerdo salteado delicioso. Una semana después, volvimos a casa. Sabía en lo más profundo de mi corazón que fue Shifu quien ayudó a esos oficiales de policía a conocer la verdad, para que pudieran tomar la decisión correcta para sí mismos. ¡Gracias, Shifu, por su gracia salvadora!

Bajo la benevolente protección de Shifu, he llegado hasta aquí, aunque el camino fue un poco accidentado.

En todos mis años de cultivación, esta es la primera vez que escribo un artículo para compartir experiencias. Sentí que había fallado al no escribir uno antes, y que le había fallado a Dafa. También agradezco a Shifu por darme sabiduría y valentía, para que pudiera terminar de escribir este artículo.