(Minghui.org) A un hombre de la ciudad de Baotou, Mongolia Interior, se le han negado las visitas familiares en prisión desde junio de 2024 porque se negó a renunciar a Falun Dafa, una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.
El Sr. Wang Ying fue detenido el 29 de marzo de 2023, junto con otros dos practicantes, el Sr. Zhang Ruitong y la Sra. Meng Lili.
La última detención de Wang se produjo un mes antes de que su madre, de unos 80 años, fuera sometida a una operación quirúrgica. No pudo visitarla. Su último calvario estuvo precedido por una condena de dos años de prisión. Fue puesto en libertad en marzo de 2020.
Tras meses de detención, la visión de la Sra. Meng se volvió borrosa y también experimentó opresión en el pecho. El Sr. Zhang, que había sido encarcelado dos veces por un total de 12 años, además de un periodo desconocido de trabajos forzados, perdió la capacidad de caminar y tuvo que utilizar una silla de ruedas. También se le encaneció el pelo.
El Tribunal del Distrito de Donghe realizó cuatro audiencias conjuntas de los casos de los practicantes los días 17, 27 y 28 de noviembre y 14 de diciembre de 2023, antes de condenarlos el 21 de diciembre de 2023. El Sr. Wang fue condenado a cuatro años y dos meses y multado con 20.000 yuanes (2.792 dólares), el Sr. Zhang a cuatro años y 18.000 yuanes (2.512 dólares), y la Sra. Meng a tres años y tres meses y 10.000 yuanes (1.396 dólares).
Los practicantes apelaron ante el Tribunal Intermedio de la ciudad de Baotou, que resolvió mantener sus veredictos originales el 25 de marzo de 2024. A finales de abril, los Sres. Wang y Zhang fueron trasladados desde el Centro de Detención del Distrito de Donghe al sexto pabellón de la Segunda Prisión de Hohhot y la Sra. Meng fue trasladada desde el Centro de Detención de Guchengwan a la Primera Prisión de Mujeres de Hohhot.
La familia del Sr. Wang lo visitó el 24 de mayo de 2024. Les dijo que las autoridades no le dieron ningún aviso previo antes de trasladarlo a la prisión y que no había tenido tiempo suficiente para empaquetar sus pertenencias. Sin embargo, cuando la familia regresó en los días de visita de junio y julio, no se les permitió verle. Los guardias alegaron que, como el Sr. Wang se negaba a renunciar a Falun Gong, su política era negar las visitas a su familia. La familia presentó varias quejas contra la prisión, pero sin resultado.
La familia del Sr. Wang también se enteró de que la prisión había realizado recientemente una sesión de lavado de cerebro a ocho practicantes de Falun Gong. Les preocupaba que el Sr. Wang pudiera haber sido uno de ellos y que pudiera estar sufriendo tortura física y mental en la prisión. Presentaron otra queja ante la Oficina de Administración Penitenciaria de Mongolia Interior, pero no han recibido respuesta.
No está claro si el Sr. Zhang y la Sra. Meng han sido autorizados a reunirse con sus familias.
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Categoría: Hechos de la persecución
