(Minghui.org) Aprendí a instalar sistemas operativos hace unos años, y desde entonces he ido adquiriendo conocimientos y habilidades adicionales necesarios para utilizar y arreglar computadoras. Es importante mencionar que nunca he recibido formación específica. En realidad, aprendí por mi cuenta viendo un foro de tecnología y visitando sitios web de gente común. Tener conocimientos informáticos no solo me facilitó mucho el proyecto en el que participo, sino que también me sirvió para ayudar a mis compañeros.
Durante años, he instalado VPN (que es una herramienta de ciberseguridad) a muchos practicantes locales para que pudieran eludir el cortafuegos chino y visitar el sitio web de Minghui. También he ayudado a los practicantes a comprar y actualizar computadoras y equipos informáticos. He animado a muchos a conseguir su propia computadora y aprender a conectarse al sitio web de Minghui, en lugar de depender de otros para acceder a las publicaciones periódicas de Minghui.
Algunos practicantes rara vez se relacionaban con otros practicantes y no recibían con regularidad las publicaciones o folletos de Minghui. Les ayudé a comprar computadoras, les instalé sistemas operativos y les enseñé a visitar el sitio web de Minghui para que pudieran mantenerse al día con el progreso de la rectificación del Fa. En el proceso, Shifu dispuso oportunidades para mí que fueron fundamentales para eliminar mi yeli (karma) y mejorarme a mí mismo.
Saldando una deuda de ye (kármica) usando mis conocimientos informáticos
Una persona conocida me caía muy mal. Para mí, era egoísta, arrogante y astuta. También me tenía rencor y envidia, siempre estaba en guardia y era despectiva conmigo. No podía evitar ver a través de sus pequeños juegos mentales. En un momento, decidí que ya era suficiente y que no volvería a hablar con ella.
Pero un día vino y me pidió que la ayudara a instalar el sistema operativo en una computadora. Me anticipé a su petición y decidí negarme educadamente. De hecho, ese día ni siquiera quería abrirle la puerta, pero lo hice, no sé por qué.
Como ella no supo cómo instalar el sistema operativo, regresó con su computadora. Después de contarme brevemente los problemas, dejó la computadora y se fue. No me atreví a decirle que no otra vez. De mala gana, solucioné el problema y le instalé el sistema operativo.
La siguiente vez, trajo una vieja computadora personal suya y me pidió que la ayudara a arreglarla. La ignoré, recordando las muchas veces que fue completamente egoísta y no quiso ayudar a los demás. Nunca le importa tender una mano y hacer la vida de los demás más fácil, pero no tiene ningún problema en pedir ayuda. No creo que una persona como ella merezca la ayuda de nadie, tiene que aprender por la fuerza que una persona egoísta no recibe ayuda de los demás. Pero no quise perder la virtud, controlé mi temperamento y le arreglé la computadora.
La tercera vez, llegó con la computadora de su pariente y me pidió que la arreglara. Estaba cansado de sus interminables exigencias. Sentí que se estaba aprovechando de mí y quise echarla. ¿Por qué tengo que arreglar su computadora, su vieja computadora, y ahora la computadora de su pariente? ¿Quién te crees que eres? Di un puñetazo en la mesa y decidí que no iba a ayudarla esta vez.
De hecho, Shifu ya me había dado tres pistas hasta ese momento con la esperanza de que me deshiciera de mi resentimiento hacia ella. Una vez que me enfadé mucho con ella, Shifu me mostró en sueños que si era más tolerante con ella, tendría el respeto de todos los seres divinos de los cielos. Aun así, no pude superarlo y sentí desprecio por ella.
Sabotea todo en lo que participa y es muy combativa. Llenos de resentimiento, envidia y rabia el uno hacia el otro, simplemente no podíamos llevarnos bien. Creo que todo se debe a una desfavorable relación predestinada desde vidas anteriores. Teníamos una deuda de ye (kármica), por eso, por mucho que nos disgustáramos, no podíamos evitarnos. Finalmente acepté el hecho de que no me libraría de ella hasta que saldara la deuda. No podía volver a defraudar a Shifu. Arreglé su computadora y la dejé en casa de otro practicante para que la recogiera.
Shifu me ayudó a saldar esta deuda de ye valiéndome de mis conocimientos informáticos. La verdad es que tuve que hacer muy poco para saldar la deuda. Shifu me había mostrado una vez que acumulé algo de yeli en una de mis vidas anteriores al enviar a alguien a cortar los párpados de otra persona, poniéndola en una situación horrible. Uno de mis párpados tembló durante unos días y la deuda quedó saldada; así de poco fue. Sé que todo se debe a que me cultivo en Falun Dafa, que Shifu puede arreglar y encargarse de muchas cosas por mí. Estoy muy agradecido con shifu.
Ahora, con el corazón en calma y la mente clara, puedo ver que fue precisamente porque era tan desmesurado que muchas de mis nociones negativas y apegos salieron a la luz. No habría sido capaz de descubrir mis defectos tan rápidamente si hubiera sido con otra persona. Todo lo que ella hacía apuntaba a mis apegos, y era una prueba para ver si yo podía permanecer inconmovible e indiferente. Toda nuestra gratitud, sentimentalismo, odio y resentimiento en este mundo humano son ilusiones. Necesito mantener mi xinxing y elevarme si quiero cultivarme de verdad. Enfocarme siempre en los defectos de los demás no me va a ayudar en nada.
Si estoy agobiado por el sentimentalismo y atrapado por las emociones, no podré desprenderme de mí mismo y seguir los arreglos de Shifu. Esto no sería armonizar y ayudar a Shifu a rectificar el Fa. Sin embargo, el Fa y los arreglos de Shifu son lo primero y lo más importante. Al darles prioridad, también estoy acumulando virtud para mí mismo.
Dejando ir mis apegos a mis habilidades y al ego
Durante unos meses, una practicante no actualizó su sistema y aparecía con frecuencia una ventana que se lo recordaba. No sabía cuál era el problema y me pidió ayuda. La visité una mañana y le mostré los pasos que debía seguir para descargar e instalar las actualizaciones, pero permití que ella terminara la tarea.
Cuando me fui, recordé que un programa de su computadora había caducado y era necesario reinstalarlo. Su sistema operativo también estaba obsoleto, lo que dejaba importantes brechas en la seguridad del sistema. Esta practicante y su familia estaban pasando por una gran tribulación en ese momento. Quise arreglar estas cosas para ella lo antes posible para que no tuviera problemas al saltarse el cortafuegos chino y acceder al sitio web de Minghui. Sabía que si compartía artículos sobre Minghui ayudaría enormemente a esa familia en un momento tan difícil.
Aunque ya la había visitado por la mañana, regresé por la tarde. Cuando le expliqué que iba a trabajar en su computadora, me invitó a pasar. Pero cuando le pedí que escribiera la contraseña de su computadora, de repente se resistió a hacerlo. Me dijo que ya no necesitaba mi ayuda. Le dije que el software había caducado y que su sistema era vulnerable a los ataques, pero que le pediría a otra persona que le echara un vistazo. Dijo que confiaba en mí, pero era obvio que no lo hacía. Bien, si no necesitaba mi ayuda, entonces no la necesitaba. Así que me fui.
De camino a casa, no podía mantener la calma y me asaltaban todo tipo de pensamientos. Me arrepentí de haber sido tan arrogante e impaciente. Me sentía muy bien conmigo mismo y no tenía ni idea de que otros practicantes no confiaban en mí. Incluso había resentimiento mezclado: me esforcé por regresar a su casa e intentar ayudarla. Era poco razonable y desconfiada. Solo es el nombre de usuario y la contraseña de su computadora, no su cuenta bancaria, ¿por qué es tan importante? ¿Qué podría haberle robado? Ya tengo todo el software que había instalado en su ordenador. ¿Qué podía hacer? No entendía por qué de repente había cambiado de opinión.
Pero entonces me di cuenta. Los conocimientos informáticos de esta practicante son muy limitados y quizá no entendía completamente lo que yo intentaba hacer. Además, no me conocía desde hacía mucho tiempo. Es natural que tenga dudas sobre mí, ya que no me conoce bien. Además, su familia no tiene una buena situación económica. Aunque su computadora es vieja y no vale mucho, para ella puede ser un bien valioso. Poco a poco me fui calmando y empecé a ver las cosas desde su perspectiva.
Miré hacia dentro y me examiné. Es cierto que en los últimos años he adquirido más destreza y experiencia en el uso y reparación de computadoras. Sin embargo, también me he vuelto complaciente e incluso arrogante por eso. Me consideraba una persona competente y capaz. Cuando ayudaba a otros practicantes con sus computadoras, inconscientemente intentaba presumir y validarme.
De hecho, fueron los arreglos y el fortalecimiento de Shifu, junto con la ayuda de otros practicantes, los que me permitieron adquirir estas habilidades. Sí, pasé tiempo leyendo en Internet y aprendí por ensayo y error, pero lo que he ganado es mucho más que mis sacrificios. Estaba "apoyado en hombros de gigantes", como siempre se dice. Me beneficiaba de los demás y, por tanto, no tenía nada de lo que sentirme satisfecho. En cambio, debería estar agradecido. He ayudado a otros practicantes con mis habilidades, pero también desarrollé un apego en el proceso. Mi motivación para ayudar no siempre era pura y a veces lo hice con fuertes apegos.
Me gusta trabajar con computadoras y resolver problemas. Disfruto del proceso y de la sensación de logro que me aporta. Por otra parte, también me he validado y he presumido haciéndolo. Me hacía sentir que era mejor que los demás. Disfrutaba cuando la gente me mostraba respeto y me felicitaba por mis conocimientos informáticos.
Tenía apego a hacer las cosas. Me escondí detrás de mi papel de "técnico informático" entre los practicantes y evité aclarar la verdad sobre Dafa en persona. El propósito de aprender sobre computadoras y mantenimiento informático es ayudar a los demás, y no validarme a mí mismo y aumentar mi ego. Lo había entendido completamente al revés. Esta es una noción egoísta en su esencia. Con pensamientos y motivos tan impuros, estaba alimentando mis apegos y dándoles el espacio y la oportunidad de crecer.
Si mis conocimientos de informática son útiles para los demás, debo hacer lo que pueda para ayudar. Si no es útil, no debería utilizarlo, no debería hacerlo solo por hacerlo. Arreglar ordenadores es para rectificar el Fa y cultivarme a mí mismo. Debo dejar de apegarme a la tecnología.
Al darme cuenta de esto, mi corazón se abrió y me sentí ligero al instante. La sustancia de la melancolía desapareció completamente. Me sentí tranquilo, como si no hubiera pasado nada. El concepto del "yo" había desaparecido y experimenté el maravilloso estado de estar "libre de intención". La cultivación en Dafa es tan increíble.
Renunciando a lo que me gusta y no me gusta y cultivando la racionalidad
Las generaciones mayores de mi familia creen en el budismo, por lo que en casa siempre había estatuas e imágenes de Buda. Escuché y experimenté de primera mano cosas como la adivinación, el exorcismo y personas poseídas por espíritus o animales. En la escuela primaria, leí libros sobre Ji Gong, un monje budista que tenía poderes sobrenaturales, e historias mitológicas como Viaje al Oeste y La investidura de los dioses. Probé la práctica del qigong en la escuela secundaria y leí sobre maestros populares de qigong y tendencias generales en la comunidad de cultivación.
Siempre me han intrigado los fenómenos paranormales y deseaba adquirir algún tipo de poderes sobrenaturales. Después de empezar a cultivar Dafa, experimenté cosas increíbles. Ahora, practico Falun Dafa porque quiero cultivarme y ascender a niveles elevados, pero una pequeña parte de ello siempre fue impulsada por la curiosidad.
Shifu dijo:
“Algunos estudiantes, en el proceso de validar el Fa, utilizan corazones humanos al hacer las cosas, y así satisfacen su corazón de hacer lo que les gusta” (Despierten con atención, Escrituras esenciales para mayor avance (III)).
Shifu mencionó “su corazón de hacer lo que les gusta” en este Jingwen. Pensé en mí y me di cuenta que siempre he tenido este deseo de hacer lo que disfruto, incluso cuando se trata de cultivación y trabajo de Dafa.
Impulsado por lo que me gustaba y lo que no me gustaba, perdía fácilmente la motivación para cultivarme cuando mi pasión se desvanecía. Aflojaba y perdía mi sentido de urgencia. Esto se tradujo en no ser constante en el estudio del Fa, en hacer los ejercicios y en carecer de pensamientos rectos. No aclaraba la verdad con frecuencia porque no sentía la necesidad de hacerlo. Cuando me encontraba con dificultades, las evitaba y trataba de rodearlas. Solo me ocupaba de los proyectos de Dafa que me interesaban y que disfrutaba haciendo. Lo mismo sucedía con mi forma de relacionarme con otros practicantes. “Si la conversación no era agradable, la mitad de una frase era demasiado”. Si no me llevaba bien con alguien, mantenía la distancia y evitaba a esa persona en la medida de lo posible.
Como me descuidé y no tomé en serio la cultivación de Dafa, demostré que soy, a lo sumo, solo "una persona promedio" en la cultivación. Shifu esperaba que yo pudiera ser un estudiante A, pero me temo que ni siquiera merecía una D. Mi interés en las cosas sobrenaturales me facilitó empezar la cultivación en Dafa, pero eso también me está impidiendo ser piadoso y respetuoso y cultivarme racional y diligentemente.
Pero, ¿es solo mi interés lo que me motivó y me mantuvo en la cultivación durante todos estos años? La verdad es que no. Como practicantes, nuestras relaciones predestinadas con Shifu y el Fa son profundas. Fueron arregladas al principio de los tiempos y mantenidas a través de la historia humana. He soñado dos veces cómo descendí a este mundo humano desde los reinos superiores en el pasado remoto. Cada vez, venía por el Fa.
Shifu me ha mostrado cómo fui reencarnando en mis vidas anteriores, y cómo se creó mi relación predestinada con Shifu y fue reforzada múltiples veces a lo largo de la historia. Estas preciosas y fuertes conexiones permanecieron conmigo hasta que obtuve el Fa. Gracias a que Shifu siempre me ha vigilado y guiado, he podido llegar tan lejos en la cultivación. En la superficie, mi interés fue lo que me impulsó y condujo a Dafa, pero no ha sido la verdadera razón. El interés personal es solo un factor a nivel humano. Cuando realmente deseo avanzar y ascender a reinos superiores, mi interés se convierte en un obstáculo, por lo tanto debe ser eliminado.
Del mismo modo, logré comprender que solo cuando me elevo por encima y más allá de lo que me gusta y no me gusta, renuncio a mi sentimentalismo y emociones, priorizo la rectificación Fa sobre todo lo demás, y armonizo lo que Shifu quiere que haga lo mejor que pueda, puedo verdaderamente ayudar a Shifu. Y eso es lo que debe hacer un practicante de Dafa. Si lo hacemos bien dentro de los arreglos de Shifu, lograremos muchas, muchas cosas. La cultivación del xinxing es algo concreto que tenemos que atravesar, sin embargo, muchos beneficios mayores pueden no manifestarse en este mundo y no podemos ver en nuestro nivel actual o en el momento actual.
Una mañana, se me vino a la cabeza un pensamiento claro: "¿Qué es seguir el curso natural?". Todo ha sido arreglado por los seres superiores y nosotros solo tenemos que seguir el rumbo del plan. Si añadimos nuestras propias voluntades y deseos, es muy posible que perturbemos el plan y no alcancemos los objetivos y niveles que los seres superiores intentaban ayudarnos a lograr.
Espero cultivarme diligente y sólidamente y llegar a ser más racional y lúcido, para ayudar mejor Shifu a rectificar el Fa y salvar a los seres conscientes.
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Categoría: Caminos de cultivación