(Minghui.org) Los practicantes del Reino Unido realizaron una manifestación en Londres el 25 de abril de 2024 para informar a la gente sobre la Apelación Pacífica de 10.000 practicantes que tuvo lugar en Beijing el 25 de abril de 1999.

Tenzin Kunga, presidente de la Comunidad Tibetana en Gran Bretaña y responsable de la defensa de Free Tibet, condenó la persecución del PCCh (Partido Comunista Chino) contra los budistas tibetanos, los musulmanes y los practicantes de Falun Gong. Kunga expresó su admiración por los practicantes que han mantenido sus creencias y se han seguido los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. «Estos principios son buenos para el desarrollo personal. Creo que es una práctica de cultivación de la que todos pueden beneficiarse. No debería ser reprimida».

Dijo que los tibetanos saben lo perverso que es el PCCh y están con Falun Gong. Le entristeció leer sobre la sustracción forzada de órganos a practicantes vivos de Falun Gong por parte del PCCh y se alegró de saber que el gobierno británico prohibió el turismo de órganos a China.

El Sr. Tenzin Kunga expresó su apoyo a los practicantes de Falun Gong.

María, una profesional de la informática cuyos padres procedían de la antigua Unión Soviética, declaró: «El partido comunista no respeta ninguna cultura tradicional. Va contra la moral... La gente debería tener libertad para elegir su modo de vida y sus creencias. Es terrible perseguir a la gente por sus creencias». Destacó la importancia de manifestarse pacíficamente y dijo que la manifestación para denunciar la persecución era significativa.

María reconoce la importancia de la manifestación.

Stephan, un practicante de Falun Gong, dijo: «Los que acudieron a la Apelación Pacífica del 25 de abril nos legaron un gran ejemplo: una forma compasiva y pacífica de aclarar los hechos. El mundo ha comprendido que los practicantes de Falun Gong son ejemplares a la hora de practicar Verdad-Benevolencia-Tolerancia».

Los practicantes también organizaron una vigilia con velas frente a la Embajada de China para conmemorar a los miles de practicantes perseguidos hasta la muerte por el régimen chino en los últimos 25 años de persecución y pidieron un esfuerzo colectivo para acabar con las atrocidades.

Los practicantes guardan duelo por sus compañeros fallecidos en la persecución.