(Minghui.org) Al mismo tiempo que los practicantes de todo el mundo celebran el Día mundial de Falun Dafa (13 de mayo) y el Mes de Falun Dafa en mayo, Minghui publica muchos informes sobre estas actividades. Después de leer estos informes, además de los saludos y la serie de artículos 'Celebrando el Día mundial de Falun Dafa', los jóvenes practicantes de Toronto dijeron que estaban impresionados con las historias de China.
Debido a la incesante persecución del Partido Comunista Chino (PCCh), los practicantes de China no pueden realizar eventos públicos como lo hacen los practicantes alrededor del mundo, así que escribieron acerca de cómo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia los cambiaron para bien.
Ser considerado con los demás
Yan Zhixi, de 22 años, estudia en la Universidad de Toronto. Conoce Falun Dafa desde niño, y comenzó a practicarlo en 2019. Dijo que aprendió mucho del artículo "[Celebrando el Día Mundial de Falun Dafa] Falun Dafa trae bendición a una pareja de ancianos"] escrito por Jing Lian de la provincia de Heilongjiang, China.
Jing trabajaba como cuidadora de una pareja de ancianos. Aunque le prometieron dos comidas al día, no fue así, y la ahorrativa pareja la miraba mal a la hora de comer. Al final, tuvo que traer su propia comida. La pareja también la excluía de muchas cosas, aunque los tratara como a sus propios padres. Jing hizo lo que pudo y manejó la situación con desinterés y compasión. Con el tiempo, la pareja cambió radicalmente. El anciano escuchaba las conferencias del fundador de Falun Dafa e incluso le decía a los demás que Dafa es bueno.
Después de leer el artículo, Yan dijo que esperaba poder ser tan considerado con los demás como lo era la autora. Una vez, él y un compañero de clase trabajaron en un proyecto que debía entregarse a medianoche. Como su compañero tenía un examen al día siguiente, se fue antes, así que Yan tuvo que terminarlo solo; y se sintió como un esclavo. "Intenté negar esos pensamientos", explica. "En cuanto cambié de actitud, fluyeron las buenas ideas sobre cómo hacer el proyecto".
Esa vez el proyecto de Yan obtuvo 97 sobre 100, mientras que en el pasado su puntuación más alta fue de 86. Sabía que Shifu le había dado sabiduría gracias a sus pensamientos rectos. Cuando dos semanas más tarde debía entregar otro proyecto, Yan estaba ocupado y tampoco sabía cómo hacerlo. Esta vez, su compañero de equipo lo terminó tranquilamente. Cuando Yan le dio las gracias, el compañero le dijo que era porque Yan le había ayudado antes. "Ahora sé que la bondad no sólo ayuda a los demás, sino que también beneficia a uno mismo", dijo Yan.
Volverse abnegada
Anjing, de 29 años, empezó a practicar Falun Dafa el pasado septiembre. Sus padres le hablaron de Falun Dafa durante toda su infancia. También leyó ocasionalmente las enseñanzas.
De niña, Anjing prestaba atención a sus notas y a cómo la veían los demás. Siempre se sentía muy estresada y se deprimía. Afortunadamente, recordó las enseñanzas de Fa de Shifu y decidió cultivarse de verdad.
Pensando en sí misma, Anjing se dio cuenta de que su depresión y ansiedad social también tenían su raíz en el egoísmo. "Como practicante de Falun Dafa, debería ser más considerada con los demás y ayudarles", dijo. Ahora está cada vez mejor.
De la tristeza a las sonrisas
Xiaoyu, de 34 años, empezó a practicar Falun Dafa en 2020. Cuando leyó el artículo "Toronto, Canadá: People Praise Falun Dafa During Grand Parade to Celebrate World Falun Dafa Day", recordó cómo fue participar en el evento con los demás practicantes.
Según el artículo, algunos chinos decidieron abandonar las organizaciones del PCCh tras conocer los hechos de Falun Dafa, mientras que un hombre de Vietnam se interesó en aprender a practicarlo. Xiaoyu vio los resultados de los esfuerzos combinados y la sinceridad de los practicantes. Y decidió cultivarse con diligencia. En concreto, dice que necesita estudiar bien las enseñanzas y mirar en su interior para eliminar sus apegos.
Antes, Xiaoyu reconocía la importancia de mirar hacia dentro y mejorarse uno mismo. Por eso, se dio cuenta de que ahora tendía a mirar las cosas en la superficie sin poder identificar sus nociones humanas, más profundamente enterradas. Hace poco, una compañera no pudo hacer su trabajo y Xiaoyu tuvo que terminarlo. "Aunque comprendí las dificultades de mi compañera, no podía dejar de sentirme desequilibrada", dijo.
"Cuando busqué de verdad en mi interior, descubrí que el malestar procedía del egoísmo: Me preocupaba que si hacía mal el trabajo, mi supervisor me criticara y mis compañeras me menospreciaran".
Ahora Xiaoyu es capaz de afrontar estos retos con una sonrisa. Ha decidido hacerlo mejor, con un corazón puro, tanto en el trabajo como en las actividades de Dafa.
(Continuará)
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