(Minghui.org) El Sr. Guo Meixue acababa de subirse a su bicicleta eléctrica para ir a trabajar sobre las 6:30 de la mañana del 28 de febrero de 2024, cuando fue secuestrado por cinco personas y llevado de vuelta a su casa. Ahora se enfrenta a una acusación por practicar Falun Gong, una disciplina espiritual perseguida por el Partido Comunista Chino desde julio de 1999.

El Sr. Guo vive en la aldea de Dongnan, municipio de Beima, ciudad de Longkou, provincia de Shandong. Entre las cinco personas se encontraban Lyu Changming (secretario del pueblo de Dongnan, +86-185-54037977), el agente Guo Fudui (+86-18660067090, +86-15318627858), del Departamento de Policía de la ciudad de Longkou, y tres agentes de paisano cuyas identidades se desconocen. Su objetivo era el Sr. Guo porque hablaba con la gente sobre Falun Gong cerca de su lugar de trabajo (una fábrica en la localidad de Haidai, ciudad de Longkou).

La policía mostró una citación y se llevó al Sr. Guo a su casa. La saquearon y confiscaron más de veinte libros de Falun Gong y varios ejemplares de material informativo sobre Falun Gong. No le dieron una lista de los objetos confiscados, como exige la ley.

El Sr. Guo fue interrogado en la Estación de Policía del municipio de Beima. La policía le preguntó de dónde había sacado el material de Falun Gong y no está claro si respondió a la pregunta.

El agente Guo llevó al Sr. Guo al Hospital de Medicina China de Longkou para que le hicieran un examen físico tras el interrogatorio. Esa tarde, fue puesto en detención criminal y llevado al Centro de Detención de la ciudad de Longkou. Se declaró en huelga de hambre durante cinco días para protestar por la detención arbitraria.

Dos personas de la Procuraduría de la ciudad de Longkou le tomaron declaración en el centro de detención la mañana del 8 de marzo de 2024. El oficial Guo vino esa tarde para decir que se había emitido una orden de detención formal contra el Sr. Guo. Ahora se enfrenta a una acusación por su fe.

Los padres del Sr. Guo, octogenarios, y su suegra, enferma, luchan por superar su detención.