(Minghui.org) El Tribunal Intermedio de la ciudad de Nanchang dictaminó en febrero de 2024 mantener la condena injusta de una residente local por su fe en Falun Dafa, una disciplina espiritual perseguida por el Partido Comunista Chino desde julio de 1999.

Zhou Qunhui, de 67 años, fue detenida el 15 de marzo de 2023 y condenada a tres años y dos meses el 9 de diciembre de 2023. Nunca se le entregó copia de la acusación. Tampoco se informó a su familia de la situación de su caso ni se le permitió contratar a un abogado. Tras su condena injusta, consiguieron contratar a un abogado.

El abogado leyó en su expediente que su esposo figuraba como único testigo de cargo. Su esposo negó haber dicho nada que pudiera incriminarla cuando la policía le interrogó.

El abogado se reunió con el juez Yin Guofu (+86-19170082625), del Tribunal Intermedio de la ciudad de Nanchang, y con el procurador Dong, de la Procuraduría de la ciudad de Nanchang, después del Año Nuevo Chino (10 de febrero) de 2024. Dio su opinión jurídica y exigió que se anulara la condena de su cliente. Yin dijo que no tenía nada que decir sobre el resultado de la apelación y dictaminó días después que la sentencia de culpabilidad se mantendría.

No está claro cuándo la Sra. Zhou será trasladada a prisión desde el Tribunal Intermedio de la ciudad de Nanchang.

Detenida el 15 de marzo de 2023

La Sra. Zhou fue detenida en su domicilio la tarde del 15 de marzo de 2023 por varios agentes de la comisaría de policía de Gangcheng y dos miembros del personal del comité residencial local. Alegaron que alguien la había denunciado por imprimir material informativo sobre Falun Dafa en su casa. Le confiscaron la impresora, la computadora portátil, libros de Falun Dafa y colecciones de artículos de intercambio de experiencias escritos por otros practicantes.

Un agente de policía dijo durante la redada: "Es la primera vez que hago esto. Estoy aprendiendo en el trabajo". Otro dijo: "Sabemos que Falun Dafa es bueno, pero no está permitido practicarlo".

La familia conmocionada al enterarse de dos audiencias secretas

Después de que la policía llevara a la Sra. Zhou al Centro de Detención de la Ciudad de Nanchang, nunca pusieron al día a su familia sobre su caso. En octubre de 2023, su familia supo que había sido acusada y que su caso estaba ahora en el Tribunal del distrito de Xihu. Cuando fueron al tribunal a preguntar por ella, les dijeron que el juez Zhang Yujuan (+86-18070080321) ya había celebrado dos audiencias sobre el caso. Cuando preguntaron a Zhang por la pena de prisión de la Sra. Zhou, Zhang respondió: "El veredicto está en el cajón. Será de entre uno y tres años. No se le permite contratar a un abogado ni apelar. Es inútil y una pérdida de dinero".

La familia de la Sra. Zhou quedó conmocionada al ver cómo Zhang podía tener tan pocos escrúpulos al condenar injustamente a una persona por el mero hecho de practicar su fe. Le preguntaron por qué no realizaba una audiencia pública, por qué no les informaba de las audiencias y por qué no les permitía contratar a un abogado. Presentaron una denuncia contra Zhang el 25 de noviembre de 2023, pero no se llegó a nada.

Condenada en secreto

El 9 de diciembre de 2023, el juez Zhang anunció que la Sra. Zhou había sido condenada a tres años y dos meses. Su familia tampoco fue informada de esa audiencia. Solo se enteraron cuando fueron al juzgado a preguntar por ella.

La familia también se enteró de que la audiencia de sentencia se celebró virtualmente, a pesar de que en ese momento no había restricciones por la pandemia. La Sra. Zhou les contó después que la calidad del audio era muy mala y que no pudo oír nada de lo que dijo el juez durante la audiencia. También dijo que le asignaron un abogado de oficio. Como no podía oír con claridad debido al problema de audio, no sabía si el abogado había hecho una declaración de culpabilidad por ella.

La familia de Zhou contrató a un abogado para apelar su condena injusta. El abogado revisó el expediente de su caso en el Tribunal Intermedio de la ciudad de Nanchang y observó que en la Comisaría de Policía de Nanggang figuraba su esposo como único testigo de cargo. Su esposo contó al abogado que la policía le amenazó con detenerlo cuando se negó a firmar las actas del interrogatorio. Por miedo, firmó, pero nunca dio ningún testimonio que pudiera incriminar a su esposa.

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